⸙͎Night Flower [YM] [By Ania] CAPS. FINS.

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TREINTA Y UNO

🎶𝒴 𝓂𝒾́𝓇𝒶𝓂ℯ 𝒶 𝓁ℴ𝓈 ℴ𝒿ℴ𝓈🎶

              
La recuperación de Jimin en casa fue exitosa y sus avances en las sesiones asombraron a su psicóloga pues ahora este se mostraba más suelto con las palabras y sobretodo con sus emociones. Para Yoongi fue difícil escucharlo llorar durante cada sesión, consolarlo después de que la doctora saliera de la habitación, darle su espacio cada vez que se mostraba indiferente, calmarlo las veces que despertaba a mitad de la noche y hacerlo sonreír cuando su mirada reflejaba tristeza.

—Deberías decirle —aconsejó Jin colocando su taza de té sobre la mesita de la sala—. Ya sabe lo que te sucedió y no te rechazó como creíste así que cuéntale la verdadera historia —acotó.

—No tiene caso, nada cambiará y...

—¿Te preocupa lo que haga? —interrogó el omega castaño.

—Sí pero también me da miedo la reacción de mi mamá —reveló Jimin comenzando a proyectar los diferentes escenarios en su mente.

—¿Miedo? —repitió Jin frunciendo su entrecejo—. Ella estará de tu lado, te apoyará tal como lo hizo Yoongi, no deberías preocuparte por eso.

—Yoongi dice que debo enfocarme en mis terapias —contó el rubio—. Siempre está al pendiente de mí y ya no me hace preguntas respecto a ese tema así que no hay necesidad de que le cuente más —habló con seguridad.

—Te diré algo Jimin y trata de grabarlo en tu mente —ordenó Jin acercándose más al cuerpo de su amigo.

—¿Qué me dirás? —balbuceó extrañado Jimin.

—Los castigos son impuestos por el líder de una manada, Yoongi es nuestro líder y tú eres su omega —dijo sin dejar de hacer contacto visual con el rubio—. Yoongi puede matar a ese alfa y nadie tendría que intervenir ni cuestionar su acción —susurró con una expresión de seriedad tan única que dejó a su amigo helado por breves segundos.

Aquella conversación se habían estado repitiendo en su cabeza lo restante de la tarde, preguntándose si era correcto sentir satisfacción ante la posibilidad de que ese suceso se hiciera realidad pero eso desapareció al darse cuenta de la horrible persona que era al tener esa clase de pensamientos.

—Jimin, amor —llamó Yoongi al sentarse a su lado.

—¿Hace cuánto llegaste? —preguntó confundido el omega dado que ni siquiera escuchó el sonido de la puerta.

—Justo ahora —contestó el alfa—. Luces ido y aturdido ¿en qué pensabas? 

—No era nada importante —respondió con una sonrisa de labios cerrados—. Preparé la cena —informó para desviar el tema.