Como conocí al Soldado de Invierno.

Capitulo 14: Esto es Guerra. (This is War)

AL DÍA SIGUIENTE…

No entiendo porqué pero realmente no pude dormir bien anoche, un mal presentimiento no me dejó dormir… Sentía que debía protegerme de algo pero no sabía exactamente de qué, pude escuchar unos ruidos que al parecer venían de la cocina, me levanté sigilosamente de la cama y fui a investigar de inmediato me pude tranquilizar cuando vi que en realidad era mamá en la cocina, ella se alegró al verme.

—Buenos días, Cariño. —me sonrió y continuó en sus quehaceres.

—Buenos días, mamá. —dije un poco soñolienta.

Volví de vuelta a mi habitación, me bañé y me preparé para desayunar, luego de que terminé de todo salí a correr, siendo honesta no había alguna otra cosa que me hiciera sentir mejor en aquel momento que algo de ejercicio, corrí y corrí como si tan sólo eso pudiese hacer que me librara de todos mis problemas, me coloqué los audífonos y comencé a escuchar: This is War de 30 Seconds To Mars.

Me dejé guiar por aquella canción sin dejar de correr esperando que aquella canción por lo menos subiera algo mi ánimo, no sé porque me preocupaba tanto o porque realmente yo no podía sacarme a James de la cabeza…

James… James.

Sacudí mi cabeza, esperando poder sacármelo de la cabeza, sólo su recuerdo me parece frustrante… Es extraño que en los días en los que estuve secuestrada por él… Sólo puedo enfocarme en los buenos recuerdos, incluso si nos conocimos de la forma más extraña posible y continué corriendo sin algún rumbo específico hasta que no pude evitar chocar con alguien, fue casi al instante antes de poder darme cuenta yo me encontraba encima de él.

—¡Oh! Cielo santo… ¡Perdón! —Me disculpé.

No tardé en quitarme de encima del sujeto sin siquiera percatarme de quien era, él hombre acepto cordialmente mis disculpas, era un hombre común (No debía de tener más de unos 30 años) Fue atormentador cuando vi sus ojos azules los cuales me recordaban tanto a los muy profundos y expresivos  ojos azules de Jam…

¡Rayos! No quiero pensar más en él.

El hombre se despidió de mí y yo continué corriendo, volví a colocarme los auriculares, 30 Seconds To Mars, de alguna forma… ni siquiera ellos me hacían olvidarme de un sujeto tan peculiar como El Winter Soldier. Continué corriendo hasta que llegué al parque me sentía un poco agotada así que tomé asiento en una banca para recuperar algo de aire, fue entonces cuando ni siquiera yo me pude percatar de ese extraño aroma… Una rara fragancia que sentía a mí alrededor, me levanté de mi asiento y comencé a toser y mirar a mí alrededor parecía que nadie más se percataba de nada.

Me asusté al ver a alguien acercándose a mí y tomándome en sus brazos yo me di cuenta de que mis piernas se sentían débiles…

—Realmente tengo suerte, no esperaba toparme contigo otra vez.

Fue lo único que apenas pude escucharle decir cuando caí en un profundo sueño.

 (...)