Como conocí al Soldado de Invierno.

Capitulo 17: Despertar.

Imagen: Viper.

Me quedé dormida, bostecé dándome cuenta de que ya era otro día, estaba acostada sobre una cama me incorporé sentándome sobre la cama y me froté levemente los ojos. Luego de despertarme por completo vi que había una nota en la mesita de noche que estaba al lado de la cama.

"Buenos días, espero que hayas dormido bien."

—Es irónico, ni siquiera recuerdo haberme dormido. —frunzo el ceño y camino hacia la puerta.

En cuanto salí del cuarto en el que dormía pude sentir un olor a comida, mi estomago se dio un brinco y no pude evitar sentir hambre, olía delicioso. Continué caminando hasta que llegué a la cocina, alcé las cejas cuando vi a James frente a la estufa preparando un Omelette de huevo, jamón y queso.

—Buenos días, bella durmiente. —dijo colocando todo en un plato y dejándolo sobre la mesa para mí.

—Vaya, todo se ve muy bien. —dije mirando hacia mi plato.

—He vivido solo desde siempre, a la fuerza tuve que aprender a cocinar.

Reí un poco ante el comentario, era de los pocos chicos que he visto en mi vida cocinando, mi padre ni muerto se acerca a una estufa.

—Bueno, espero que me lleves pronto a mi casa. —dije sentándome sobre la mesa y preparando para comer.

—Sí, pronto te llevaré... —dijo dudoso.

—¿Pasa algo? —lo miré extrañada al ver su expresión.

—No, tranquila, no pasa nada. —dijo sentándose frente a mí en la mesa. —come, quiero saber si te gusta.

Dudé un momento pero usando el cubierto y el tenedor corté un trozo de Omelette y me lo comí.

—Whoa, está delicioso. —dije siendo honesta y continué comiendo.

Él sólo continuaba observándome mientras yo comía, al principio me sentí algo incomoda pero luego de unos momentos dejé de darle importancia a aquello.

—Em, hablando sobre el regalo... ¿Cuándo se lo daré?

—Pronto, no nos apresuremos, primero debo explicarte algunas cosas. —sonrió de lado.

¿Cosas? ¿Qué cosas? Ya me está asustando, con este sujeto nunca se sabe.

—Am, está bien. —me limité a decir y luego tomé de un vaso de jugo que estaba al lado de mi plato.

—Ya que estamos en un ambiente tranquilo supongo que puedo volver a preguntártelo. —tragué saliva un poco nerviosa. — ¿Cómo escapaste de SHIELD?

Él rió negando con la cabeza.

—A veces quieres saber demasiado, ¿no crees?

Hago una mueca. —Con un no hubiera sido suficiente.

Luego de que terminé de comer él se llevó mi plato y mi vaso ya vacios y los dejó en el lavatrastos, luego regresó hacia mí para sentarse en la mesa de nuevo y fue interrumpido por su teléfono cuando se preparaba para decirme algo. Me quedé observándolo en lo que él contestaba su teléfono.

—¿Sí?...¿Ahora?... Será después ahora estoy ocupado... Puedes buscar a otra persona... Sí, lo que digas...—rodó los ojos y colgó el teléfono.

—¿Pasó algo? —alzo una ceja. —Parecía importante.

—Tus padres te están buscando, y como no es pura casualidad que yo haya escapado y tu hayas desaparecido nos buscan nuevamente. —gruñó molesto y dio un suspiro profundo. —Lamento haberte tenido que arrastrar en todo esto, creo que tu padre debe de odiarme ahora mismo.