EN BUSCA DE LUZ [✔️]

Capitulo 28

//𝐄𝐫𝐢𝐜𝐤 𝐌𝐢𝐥𝐥𝐞𝐫//

No me había levantado de la mejor manera, era 24 de diciembre y aunque lo quería ocultar no podía olvidar en estas fechas a James, y probablemente nunca lo olvidaría, hace años estas fechas eran algo maravillosas, ahora no eran más que días normales solamente esperando a que termine el año para que se vuelva a repetir la mierda.

No podía negar que por un lado me encontraba algo feliz al saber que hoy tendría a Emma a mi lado, poder sentir su aroma nuevamente, poder ver sus hermosos ojos y sentir la calidez de sus abrazos y la paz que transmitía su sonrisa, la tranquilidad que me daba el escuchar su voz, Emma se había vuelto más que una persona especial para mi, estaba enamorado y me enamoraba cada vez más cuando pensaba en ella.

Ella se había vuelto tanto para mi que podría destruirme con palabras si ella así lo quisiera, pero hasta el momento ella prefirió quedarse conmigo y sanar mis heridas. Ella quiso mirarme, ella quiso sostenerme, ella me quiere. Y la verdad agradezco que ella se haya quedado y haría lo posible para que ella no se fuera de mi lado.

—¿A qué hora te irás?—Preguntó Jennifer.

—A las cuatro, en la tarde.—Dije mientras veía la nieve caer del cielo oscuro hasta el suelo plano de la cera de la casa, Jennifer me miraba desde el pequeño corredor de su casa mientras yo estaba sentado en la cera donde el techo de la casa impedía que cayera la nieve en mi cuerpo.

—Entiendo, y... ¿A donde iremos exactamente?—Dijo observando la nieve en el suelo mientras jugaba con la taza caliente en sus manos.

—En realidad eso lo tiene planeado Carlos, solo me dijo que fuéramos a la casa de Emma, dijo que ahí nos veríamos.—Dije serio.

—Ya veo...

Silencio nuevamente... ¿Por qué una conversación siempre tenía que tener un silencio? ¿Era normal que así lo fuera? 

Yo soy de esas personas que realmente no les gusta el silencio pero tampoco es que me gustara hablar.

—¿Sucede algo?—Preguntó Jennifer.

—Realmente no. ¿Por qué?

—Te noto extraño... como ¿cansado?—Dijo manteniendo la mirada en mi en todo momento.

—¿Cansado? Para nada, estoy bien, no te preocupes...

—Mira, he lidiado con muchas cosas en silencio, así que no pienses que conmigo podrás esconderlo tan fácilmente. ¿Es por tu hermano?—Dijo, solo me mantuve en silencio tratando de evitar que mis ojos se volvieran tan húmedos para brotar lágrimas.

—No lo sé realmente. Es como si te encontraras feliz por un lado pero te acostumbras a estar mal la mayor parte del tiempo que sientes que no mereces ser feliz o que algo malo pasará si te encuentras bien... Entonces no sabes como sentirte realmente porque si te sientes feliz tienes miedo que todo se vaya a la mierda a como siempre pasa cuando lo estás.—No sabía porqué realmente le estaba diciendo todo eso a Jennifer, tal vez lo hacía porque pensaba que posiblemente ella conociera ese sentimiento.