10.- ¿Dónde están las cámaras?

242 39 51
                                    

Es raro no tener a MinHo en la universidad, no voy a mentir

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Es raro no tener a MinHo en la universidad, no voy a mentir. Ya me había acostumbrado a dar vueltas por los pasillos y las calles de SKKU con él, mientras charlábamos de todo un poco, a veces con las chicas, otras veces con TaeHyung, o incluso con otros compañeros de carrera que a menudo se nos unen para pasar el rato, para conocernos mejor, para compartir y reír un poco.

MinHo nunca ha sido el centro del grupo. Siempre es de los que escucha, ríe y contesta lo que le preguntan. Siempre se mostró como un muchacho apacible, tranquilo y receptivo. Quizá por ello fue que la sopresa resultó ser mayúscula cuando se precipitó sobre TaeMin, decidido a golpearlo con tanta rabia. Y, bueno, la rabia que él tenía era tal que me hizo sentir nauseabundo. Me hizo sentir incluso un poco de miedo.

No es como que me vaya a alejar de MinHo. No por ahora, al menos. MinHo no es malo, pero está en una muy mala posición, en un muy mal momento de su vida. Tengo la corazonada de que alguno de sus padres tuvo estas mismas actitudes que él inconscientemente está imitando, así como me atrevería a afirmar que tras su ex-amistad con TaeMin hay un conflicto grave que jamás solucionaron, que jamás siquiera pensaron en hablar.

¿No le dije a MinHo que tomara esta oportunidad para solucionar sus asuntos pendientes con TaeMin? Pues a todas luces, pareciera que no me escuchó ni me va a escuchar. No sería la primera vez, de todas formas. Siempre me pasa que doy consejos que la gente no sigue, para que tiempo después vuelvan y me digan que les pasó exactamente lo que yo les advertí. Pero he aprendido a hacer las paces con el hecho de que la gente tiene que cometer errores, y a veces varios errores, para finalmente aprender.

Lo malo es cuando las consecuencias de los errores son graves, como lo han sido en este caso.

—Aquí es —me dice TaeHyung, deteniéndose frente a un edificio alto e imponente que se alza como un gigante frente a un parque que parece más un pueblucho indefenso—. Piso 15, apartamento 1501.

—Vamos, entonces —intento sonreír. La verdad es que me pone un poco ansioso esta situación, y resulta todavía más difícil dado el hecho de que TaeHyung esta igual o peor que yo.

Ha de sentir que está traicionando a TaeMin de una forma u otra, lo cual tiene sentido si considero que con TaeMin se conocen hace años. Además, fue TaeHyung quien más le cuidó durante el nefasto episodio de ayer, como si supiera bastante mejor que cualquier otro lo que había que hacer. ¿Lo habrá visto así antes? No he tenido tiempo de preguntarle al respecto y tampoco sé si vale la pena hacerlo. Fue una fortuna que TaeHyung estuviera allí para ayudar y quizá sea mejor quedarme con esa idea. No es realmente mi asunto. No es algo en lo que me corresponda inmiscuirme. Lo más seguro es que en algún momento TaeHyung me lo comente de todas formas, porque siempre resulta ser así.

Caminamos hasta llegar donde el conserje. Nos pide nuestros IDs, anota nuestros nombres en una computadora y llama al apartamento donde le hemos dicho que nos dirigimos. Pareciera que MinHo estaba aguardando junto al citófono, porque no tarda más de un segundo en responder al llamado y brevemente ya nos han autorizado para entrar.

〈 La Habitación Blanca 〉Where stories live. Discover now