Sex and homework 🔞 ✔

Cap 13

El primer día de trabajo oficial para Jungkook surgió luego de la semana de prueba.

La dueña le había dicho que había sido muy cuidadoso con los platos y que había limpiado pulcramente los baños.

Así que Jungkook ya llevaba su última hora de trabajo cuando Hyunjin entró a la cafetería.

Jungkook se quedó detrás del mostrador, cuando lo saludó con la mano el rubio se lo quedó viendo.

—¿Qué haces aquí? 

—Trabajo —dijo con media sonrisa.

Hyunjin se impresionó. Jungkook dejó los platos y fue a llamar a un empleado para que atendiera a su amigo. A esa hora la cafetería normalmente no tenía clientes porque se iban yendo, y los empleados se iban a la salita de atrás a descansar.

Hyunjin hizo su pedido y se largó de allí. Pero se quedó a esperar a Jungkook, quien ya se estaba quitando el delantal para irse a su casa.

Se despidió de la dueña y él y Hyunjin caminaron juntos.

—¿Estás bien? —preguntó Jungkook. Iban a ir a su casa.

No hacía falta que Hyunjin le pregunta si podía quedarse a dormir, Jungkook ya sabía por qué lo seguía hasta su hogar.

Hyunjin no dijo nada hasta que se encontraron en la habitación de Jungkook, luego de haber saludado a su madre sin éxito.

Jungkook cerró la puerta y Hyunjin se bajó la capucha de la sudadera negra. Otra vez estaba rompiendo las reglas de Chris.

Entonces Jungkook notó que su amigo rubio ya no era rubio.

Y por eso tenia un moretón en el ojo derecho.

—Oh dios... traeré hielo.

Jungkook se apresuró a buscarlo y volvió con él.

—Le dije a Chris que estaba harto del pelo rubio. Así que me lo corté y lo teñí de negro, pero todavía no se lo mostré. Me golpeó cuando le dijo que me lo iba a cambiar. Todavía no me ha visto.

Hyunjin se puso el hielo en el ojo.

—¿Qué te hizo?

—¿Tú que crees?

—Además de dejarte un ojo morado, no tengo ni idea.

Hyunjin bajó la cabeza.

—No creo que quieras saber más.

Jungkook se acercó a él y le tomó la mano. Pero en eso divisó los moretones que su amigo tenía.

—¿Lo golpeaste?—preguntó, invadido por el asombro.

—Lo intenté. Pero soy muy débil, me golpeó más por eso -Hyunjin recostó la cabeza en su hombro—¿Sabes? Le gustaba mi cabello rubio porque me hacía ver cómo una muñeca Barbie.

Hyunjin chasqueó la lengua.

—Cambiaría mi belleza por una cara más fea. Una cara que él no quiera ver. Una cara por la cual él no mataría.

—Si tanto le gusta tu cara ¿para que te golpea?

—Dice que cuando me porto mal, mi belleza lo debe pagar.

—Hijo de perra.

—Hijo del diablo—susurró el nuevo pelinegro.

Hyunjin entrelazó su brazo con el de Jungkook y el otro lo abrazó. Ya casi estaba empezando a llorar.

—No lo quiero...

—Lo sé — Jungkook le besó la frente porque pensaba que lo necesitaba. Hyunjin cerró los ojos: un poco de cariño por parte de un amigo no le venía mal.

¿Hacía cuanto tiempo que alguien no lo besaba con esa dulzura?

Hyunjin solo deseaba tener una mejor vida, pero le parecía algo completamente inalcanzable.

. . .

Unos días más tarde, el director de la escuela anunció que entraría un chico nuevo al curso en donde se encontraba Jungkook.

Todo mundo estaba emocionado porque hacía tiempo que no tenían compañeros nuevos.

El chico entró al aula y se presentó como Félix. El director lo sentó atrás de todo, al lado de Hyunjin, quien tuvo que alejar su banco hasta la orilla por si Chris pasaba y lo veía sentado con alguien más.

Chris le había dicho que debía sentarse solo al fondo del salón, porque quería verlo cada vez que pasaba por el pasillo de la escuela.

Hyunjin no podía estar con nadie y por eso casi nadie le hablaba directamente.

Pero sí hablaban a sus espaldas, comentando la toxica relación en la que estaba metido.

Jungkook, desde su banco en la otra punta al final del salón, observó a su amigo que no dejaba de retorcerse las manos porque ya no podía separarse más de su nuevo compañero de fila.

Félix, el chico nuevo lo miró con una ceja alzada. No le veía el rostro porque Hyunjin tenía la capucha puesta.

—¿Estás nervioso por la evaluación?— preguntó el chico nuevo viendo cómo la profesora de matemática le repartía la hoja menos a él porque recién había entrado a la escuela a mitad de cursada. Él ya había hecho el examen de ingreso y era con los contenidos que ellos estaban viendo en ese mismo momento.

Hyunjin solo mintió y le dijo que si con la cabeza.

Félix, con un instinto natural para caer bien y hacer amigos, no lo dejó tranquilo.

—Yo me sé las respuestas, si quieres te ayudo.

Pero Hyunjin se bajó más la capucha cuando vio a Chris pasar por el pasillo con su banda de amigos

Chris le dirigió una mirada a su novio. Por supuesto que el hecho de que hubiera alguien sentado casi cerca de su novio le jodía.

Hyunjin divisó el momento exacto en el que Chris le hacía un gesto con la mano. Ya sabía lo que significaba.

Tendría que verlo después de clases, para pagar por desobedecer las reglas.

Una vez más. Un infierno.