Sex and homework 🔞 ✔

Cap 33 🔥

Taehyung estaba besando cada parte de Jungkook.

Antes de que los padres del mayor volverán, él se había encargado de repartir muchos besos sobre las mejillas del menor.

Primero lo había hecho porque quería sonsacarle una sonrisa de alegría y timidez, pero al final Jungkook terminó cediendo al placer porque necesitaba pensar en otra cosa que no fuera el problema con su madre.

Y ahor que estaba desnudo ante Taehyung, podía preocuparse por otras cosas.

Ahora su mente estaba llena de preguntas.

¿Su cuerpo era lo suficientemente atractivo? ¿Lo excitaba? ¿Qué pensaba Taehyung de sus abdominales que estaban empezando a desaparecer?

Como Jungkook ya no comía las porciones a las que estaba acostumbrado, había bajado de peso y eso se había llevado sus abdominales.

¿Qué pensaría Taehyung de su miembro? ¿Acaso le parecía mediano o grande?

Porque ciertamente el amiguito de Jungkook no era pequeño.

No tenía nada que envidiarle al de Taehyung. 

En fin, cuestiones de machos.

—¿Qué pasa? —le preguntó Tae mientras se quitaba la remera.

Ahora estaba al completo desnudo, igual que Jungkook.

Vulnerable ante cualquier reparo.

Desnudo. Sin armadura, sin filtro. Simplemente siendo él en todo sentido de la palabra.

—Mmm... ¿yo te gusto?

—Ya te lo había dicho hace unos días, corazón.

Eso bastó para ponerle las mejillas rojas al menor.

—Hablo de mi cuerpo. ¿Es suficientemente para ti?

Taehyung se sintió agradecido por saber que Jungkook ya no estaba pensando en  problema con su madre.

Se acercó a él entre sus piernas y le tomó la mejilla.

—Es más de lo que puedo pedir —le guiñó un ojo y fue directo a buscar la pequeña botella de lubricante y el condon.

Seguridad ante todo.

Jungkook respiro hondo y se dio la vuelta.

No estaba listo. Pero era el momento. Necesitaba a Tae.

Lo necesitaba de verdad.

Tae se llenó los dedos del lubricante y cuando Jungkook lo miró de reojo sobre el hombro, colocado en forma de perrito sobre la cama, le sonrió para darle tranquilidad.

—¿Listo?

—Listo.

. . .

Las sabanas se arrugaban al rededor de la cama. Ya se estaban saliendo de lo fuerte que tiraba Jungkook.

El ambiente estaba calmado, con la luz apagada y las luces les en color azul.

—¿Te sientes bien o mal? —Le preguntó Tae deteniéndose un segundo, aprovechó para respirar un poco.

Jungkook abrió los ojos porque los tenía cerrados fuerte. Seguía en la pose del perrito cuando Tae salió de él y se acostó en la cama para que Jungkook lo montara.

—¿Por qué lo preguntas?

Taehyung escapó de su mirada.

—Porque yo estoy gimiendo más que tu y no me gusta sino saber si te gusta lo que hago o no.

Jungkook notó que lo decía muy en serio. Se colocó sobre él, sentado y con las piernas abiertas a cada lado de las dd Tae. Tuvo tanto temor que se tapó su miembro, por puro instinto.

Taehyung le quitó las manos, y le ofreció una sonrisa tranquilizante.

—Es que me da vergüenza gemir tanto. ¿Qué tal si tus padres llegan y nos escuchan?

Tae se alzó de hombros.

—Será un concierto para sus oídos.

Ambos rieron.

Era hermoso.

Jungkook dejó que Tae volviera dentro de su cuerpo y se empezó a mover de manera inexperta.

Se estaba maldiciendo mentalmente por ser virgen y no tener experiencia a comparación de Tae.

Pero la manera en la que Tae lo agarraba de la cintura y lo ayuda con las embestidas le dejo en claro que el mayor lo disfrutaba, que no parecía importarle si lo hacia bien o mal.

Tae echo la cabeza hacia atrás en la almohada y cerró los ojos, calmado. No dejó de jadear con la boca entreabierta.

Jungkook lo admiraba mientras se movía más rápido y llegaba a su clímax.

—AGH... ¡TAE! ¡YA CASI!

—Ja, ahora si gritas ¿Eh?

Taehyung lo volteó en la cama y quedó sobre él, Jungkook con las piernas abierta y más avergonzado que nunca.

Se mordía el labio con fuerza y Taehyung lo besó al momento en el que ambos llegaban al tan aclamado orgasmo.

Juntos.

Jungkook sintió que a Tae se le rompió el condon y se empezó a reír cuando acabaron.

—Parece que no aguantó la presión.

Tae compartió sunrksa y salió de él con tanta lentitud que le provocó un espasmo al menor.

El mayor fue por pañuelos, pero cuando abrió la puerta de su cuarto se encontró a sus padres en el living.

—¡Ahhhh! —gritó cerrándoles la puerta de sopetón.

Sus padres se rieron como nunca antes.

Jungkook se llevó una palma a la frente y negó con la cabeza.

—Te lo dije —Susurró y ambos se rieron. Tae con la espalda y el cuerpo desnudo pegado a la puerta y Jungkook a medio tapar en la cama.

Desnudos en cuerpo y alma.