Sex and homework 🔞 ✔

Cap 28

Algunos días pasaron y Jungkook no iba recuperando su buen humor.

De hecho, había días en los que se sentía más desdichado que nunca.

No podía dejar de pensar en lo que sería tener una verdadera madre y un buen padre. No dejaba de preguntarse sobre cómo se sentiría que ambos te abrazaran y te apoyaran en todo.

Él no podía pedirle algo como eso a los padres de Taehyung. Y aunque se los pidiera, no sería lo mismo, porque al fin y al cabo no eran sus propios padres.

Se sentía agotado mentalmente, muchas cosas que Taehyung intentaba hacer para animarlo, no funcionaban.

El mayor se sentó en su cama un sábado por la noche. Jungkook estaba de espaldas a él, durmiendo una siesta.

Últimamente lo único que hacía era dormir e intentar no salir del cuarto de Taehyung para no molestar a los padres del chico, y si tenía que ir al baño lo hacía caminando despacio y silenciosamente.

Intentando molestar lo menos posible.

También, cuando a veces cenaban todos juntos (normalmente Taehyung llevaba la comida a su cuarto pero otras noches comían los cuatro en la mesa) Jungkook comía en silencio, haciendo el menor de los ruidos, solo por si acaso.

Los padres de Tae se dieron cuenta de ese comportamiento a eso de los tres días de la presencia de Jungkook en la casa. La madre de Tae quería hablar con Jungkook para preguntarle por su familia pero tenía miedo de abrumarlo más de lo que ya estaba, así que decidió no preguntarle nada.

Ahora Tae estaba sentado en su cama, con Jungkook durmiendo. Se preguntó qué más podía hacer para ayudarlo.

Él no comprendía del todo bien la tristeza que embriagaba a Jungkook, puesto que el amor de un padre y una madre no le había sido negado nunca en su vida.

Taehyung se sentía muy triste por Jungkook. El pobre tenía una vida de mierda y solitaria.

Jungkook se movió sobre el colchón y abrió los ojos despacio. Se encontró con Tae allí sentado.

—Hola —dijo Jungkook.

—Son casi las seis de la tarde.

Jungkook hizo un pucherito.

—¿Cuánto dormí?

—Como unas tres horas.

Jungkook quedó impresionado. Tae lo dejó levantarse de la cama. Jungkook fue al baño y volvió. Se sentó a su lado.

—De noche no dormirás nada.

—Sí que podré. Yo siempre tomo siestas y luego duermo.

—Duermes demasiado.

Jungkook se alzó de hombros, despacio. Tae notó que seguía delgado y algo pálido.

"La depresión lo está matando" pensó Taehyung mirándolo de soslayo.

—Supongo que es un hábito —contestó Jungkook —Duermo de esta manera desde hace años. Nunca fue un problema.

—No es bueno dormir demasiado. Hoy es sábado, ¿no quieres ir a cenar a algún restaurante o a McDonald? También podríamos ir a algún lugar de comida vegana para probar cosas nuevas o algún puesto de comida callejera para comer rápido.

—No sé. ¿Tú quieres ir?

—Te estoy preguntando si tu quieres.

Jungkook desvió la mirada.

—Realmente no, pero si tu quieres ir no quiero molestarte al decirte que no.

Taehyung dejó escapar un suspiro y le tomó la mano con las dos suyas.

—Me duele decirte esto, pero estas enfermo Jungkook.

—Pero si no tengo fiebre.

—Me refiero a enfermo de depresión, de tristeza, de angustia. De todas esas cosas que te sofocan.

—Ah... —Dijo con un tono sin importancia —Supongo que sí.

—Yo se que debe ser difícil. Pero solo queda en tí sentirte mejor.

Jungkook se alzó de hombros otra vez y volvió a acostarse.

—Dormiré un poco más.

Tae suspiró, rendido. Pensó en dejarlo solo, pero se acostó detrás de él y le hizo cucharita.

Cuando los brazos de Taehyung rodearon a Jungkook, él menor se largó a llorar.

Fue instantáneo, como si Taehyung hubiese activado un interruptor para que se desahogara.

Tae no le dijo nada, no lo consoló con palabras, simplemente se quedó ahí, abrazándolo y conteniendolo.

No hacía falta decir nada, con eso era más que suficiente.