Sex and homework 🔞 ✔

Cap 19

Hola lectores! Agradecería leer un poco más de comentarios, últimamente han bajado mucho, desde ya lo agradezco 🥺💜♥️🥺💕

Una vez más, Jungkook salía del trabajo, dispuesto a ir a comprarse unas donas en otro local porque las de esa cafetería no le gustaban. No es que fueran malas, sino que prefería las de la panadería que estaba cerca de su casa.

Y hubiese comprado sus donas, si tan solo no se hubiera cruzado con una figura encapuchada que le resultaba extremadamente familiar.

—HyunJin  —lo llamó corriendo detrás de él. 

El pelinegro se quedó parado a mitad de la cuadra, con la mano de Jungkook en el hombro. No se volteó, pero le dijo:

—Déjame solo, Jungkook.

—¿Qué te ocurre? Hace dos semanas que no nos vemos.

HyunJin se quitó suavemente la mano que lo retenía.

—Mañana volveré, lo prometo.

—Mírame.

Pero HyunJin siguió de largo, sin haberle mostrado el rostro.

No quería que Jungkook lo viera. Estaba mal, estaba peor que nunca.

No comía hacía días. No se bañaba. El estómago le dolía por los cortes que su novio le había hecho.

Cada día estaba más delgado, cada día perdía más peso, más belleza, más control.

Estaba harto. Harto de pertenecer a un círculo vicioso que no tenía fin.

Jungkook se fue a su casa, preocupado. Odiaba no poder hacer más para ayudar a su amigo. No sabía qué hacer y para colmo Hoseok le había dicho que su compañero ya no tenía más el contacto de los de abuso y violencia.

HyunJin siguió su camino. Chris lo estaba esperando en el auto, en la esquina donde estaba el Starbucks. HyunJin se subió y antes de que su novio encendiera el motor, le dijo:

—Quiero terminar contigo.

Pero Chris se limitó a soltar una carcajada amarga y retorcida.

—Sí. Suerte con eso, diablillo.

"El diablo eres tu".

.   .  .

Tal como había prometido, Hyunjin volvió a la escuela al día siguiente.

Todo el mundo lo miraba, porque debajo de esa capucha se veían sus golpes. Sus ojeras, sus pómulos y su piel pálida y enferma.

Muchas chicas se acercaron a él y le preguntaron si podían hacer algo para ayudarlo. Él les dijo que no, que estaba bien.

Algunos chicos también se preguntaron qué le había pasado. Hyunjin no les contó nada.

Se sentó en su banco con la cabeza gacha en sus brazos y cerró los ojos, hasta que alguien le tocó suavemente el hombro, con un dedo.

Hyunjin levantó la cabeza, sin darse cuenta de que Félix vería todas y cada una de sus magulladuras.

Su compañero iba a decirle "cuánto tiempo" con una sonrisa en la cara, pero cuando lo vio, se asustó.

—¿Qué te pasó?

—Me caí de la escalera.

Félix le hizo una mueca.

—No creo que eso sea el golpe de una escalera, amigo.

—No soy tu amigo — Dijo, bajando más su capucha —no soy amigo de nadie. Excepto de Jeon. 

—Las personas necesitan mas amigos. Me gustaría poder ayudarte si es que...

Pero en ese momento Chris pasaba frente al aula de Hyunjin. Los vio hablando y apretó los puños.

Entró al aula y de repente se hizo el silencio. Todos lo vieron con los ojos sobresaltados.

—Cariño, ¿Qué haces? —Intentó preguntar con una sonrisa fingida, intentando sonar preocupado. Pero apretaba los dientes, estaba volando de la ira.

Hyunjin desvió la mirada.

—Solo hablábamos de la materia —Mintió bajito.

—Ven, tengo algo que discutir contigo.

Pero cuando Chris fue a agarrarlo de la muñeca, Félix se interpuso.

—No lo toques —Félix le estaba apretando tanto la mano que él se vio obligado a soltar a Hyunjin.

—¿Disculpa? Es mi novio, puedo tocarlo como quiera.

Pero Félix le dio un empujón. Todo el mundo ahogó una exclamación. Hyunjin retrocedió al asiento de nuevo.

Félix estaba enojado, cosa que rara vez sucedía. Él había salido de una relación con una chica toxica y posesiva, se daba una idea aproximada de lo que Hyunjin tenía que pasar.

Aunque a diferencia de él, a Hyunjin lo golpeaban, él solo había sido víctima de humillaciones, y cachetadas por parte de la chica, de arrebatos de ira y demás.

Félix no había sufrido tanto como Hyunjin. No había tenido parejas hombres que fueran tóxicos, todos sus novios y sus novias habían estado bien, excepto por la chica posesiva de la cual le había costado un tiempo librarse.

—Le haces daño. Vete de aquí.

Chris lo empujó a él y antes de que le diera un golpe en la cara, Félix lo agarró del brazo y se lo dobló hacia atrás.

Que buena suerte que practicase defensa personal a pesar de que odiaba entrenar.

Lo sacó a rastras del aula y aun con el brazo hacia atrás y a empujones lo llevó al aula del director y le dijo:

—Sáquenlo de esta escuela, está loco.