El amor duele

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Dos adolescentes enamorados estaban tomados de la mano, admirando aquel hermoso fenómeno de la naturaleza conocido como Aurora Boreal, el cielo nocturno estaba lleno de luz y color.

—La vista aquí es maravillosa— comentó con asombro la joven chica.

—Por algo la Montaña del Norte es conocido como el mejor lugar para ver las Auroras. ¿Te gustó la sorpresa?

—Es increíble— sonrió sinceramente— gracias.

—Aunque ni siquiera estas luces son tan hermosas como tú. — dijo el encapuchado a lo que la platinada se sonrojó y rió un poco. Después ambos se sentaron en la nieve.

—Todavía no me acostumbro. Ayer aún éramos amigos y ahora te la pasas diciéndome cosas lindas todo el tiempo—dijo mientras se acomodaba un mechón rebelde de su cabello.

—No te preocupes, te acostumbrarás pronto porque te lo diré todos los días y cada que pueda.

—Eres un empalagoso.— rió negando con la cabeza.

—Pero así me quieres— se encogió de hombros soltando una risilla.

Pasaron unos minutos mirando hacia el cielo, hasta que Elsa decidió romper el silencio.

—¿Pasa algo?— preguntó al ver que el encapuchado parecía distraído.

—Estaba pensando... mamá me dijo que a veces el amor dura... , pero otras veces duele.— hizo una pausa y la miró a los ojos con preocupación— ¿Cuál de las dos opciones crees que pase con nosotros?

Elsa sonrió de lado y recargó su cabeza en el hombro del muchacho.

—Estoy segura de que el amor que siento por ti, es de los que no duelen. Es amor verdadero, y sé que nunca nos haríamos daño.

El chico también sonrió y abrazó a la ojiazul con ternura.

—Te quiero, Elsa. Eres la persona más increíble que haya conocido, y quiero que seas la más feliz de todas las princesas. Te prometo que intentaré todo para que puedas controlar tus poderes y veas a Anna de nuevo.

—Sé que si estás a mi lado, lo lograré.

Elsa se levantó y el chico la imitó. La platinada levantó la capucha del muchacho dejando ver su rostro, y depositó un pequeño beso en sus labios. Lo tomó de las manos y pegó a su frente a la de él.

—Te amo, Jackson Overland.

—También te amo, Elsa Arendelle, nunca lo olvides.

***《Jack》

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***
《Jack》

Mi corazón pareció detenerse por un momento en cuanto vi su rostro, mi interior se convirtió en una guerra de sentimientos encontrados que no podía distinguir con claridad.

𝑬𝑳 𝑪𝑶𝑺𝑻𝑶 𝑫𝑬𝑳 𝑶𝑳𝑽𝑰𝑫𝑶  [𝐉𝐞𝐥𝐬𝐚]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora