Donde una noche de pasión es la clave para cambiar bastantes cosas
⚠️Ni la imagen de la portada, ni los personajes son míos, esto lo hago como entretenimiento⚠️
Alexia iba hacia la biblioteca en sábado ¿por qué? porque su primo se había enterado que sus calificaciones en Transformaciones habían bajado, Draco podría aparentar que no pero ponía demasiado esfuerzo en sacar las mejores calificaciones y no iba a permitir que su prima bajara las suyas.
La calma del pasillo se vio interrumpida por una voz desconocida –Vaya, vaya, si es la pequeña Black, qué coincidencia, justo pensaba en buscarte–; la joven se dio vuelta estando extrañada, al verlo directamente se dio cuenta de que era Smith, un chico insufrible que tenía más amigos en otras casas que en la suya.
–Estoy ocupada– no pretendía quedarse a escuchar la estupidez que quería decirle.
–Creí que al ser una Black tendrías algo de modales pero ya veo que no– desafió.
–¿Cómo te atreves a insultar a la casa Black?– si bien no quería soportarlo, tampoco iba a dejar que se metiera con su familia.
–Tranquila fiera, solo que un pajarito me dijo que buscas un pase para ir al baile de Navidad– dijo con una mirada burlona.
–Ella no irá contigo, así que largo– sonó la voz de Pansy por detrás de la chica.
–O si no ¿qué? ¿me vas a acusar con tu noviecito? oh, es verdad, ahora es el novio de Potter– respondió con burla.
–Cierra la boca y lárgate, no requiero de Draco para dejar irreconocible la blasfemia que llamas cara– ni siquiera Pansy lo soportaba.
–Jajaja ¿de verdad crees que eres capaz de hacerme algo?– preguntó con superioridad.
Y en ese momento Alexia recordó la frase que Dadfoot le dijo en alguna carta "si alguien te molesta, dale un puñetazo, los magos no suelen saber defenderse a puño limpio, si te metes en problemas, seguro tu papá te va a sacar de ellos" y decidió comprobarlo.
Lanzó el golpe y escuchó otra voz detrás de la pelinegra -Oh Pansy, te...– y su puño impactó contra el rostro de Zacharias, ignorando los quejidos de aquel molesto chico y el dolor punzante de sus nudillos, volteo, vio como Bulstrode palidecía y Daphne se sonrojaba.
¡Ay, Merlín! Había golpeado a alguien enfrente de la chica que le gustaba, ahora la evitaría por el resto de sus vidas, como reflejo se tapó la cara de la vergüenza; –¡Te lastimaste!– sonó la voz de la rubia con algo de preocupación, se destapó la cara al oír que la voz de la chica no sonaba igual de fría que siempre y esta al darse cuenta, carraspeo un poco.
¿Estaba preocupada por ella? las mejillas de Alexia se empezaron a teñir de rosa, haciendo que el leve sonrojo de la otra chica se tornara en un cálido rojo; mientras ellas jugaban a ver quien se sonrojaba más, Pansy y Millicent estaban quietas, esperando a que se percataran de que ellas también estaban ahí.
Zacharias se recompuso pero antes de que pudiera tomar represalias, Pansy lo desmayó para que no interrumpiera el momento; el chico no interrumpió conscientemente pero el sonido de su cuerpo chocando contra el suelo, si lo hizo, sacando a las dos chicas de su nube y regresandolas a la realidad.
–¡Oh, Merlín! !Olvidé a Draco en la biblioteca! Ay no, primero tengo que llevarlo a la enfermería– dijo la joven Black en pánico.
–Nosotras lo llevamos, tu ve antes de que Draco te ponga a estudiar hasta morir– ofreció Pansy.
–Gracias– dijo la pelinegra, para rodear el cuerpo del chico y salir corriendo hacia la biblioteca.
–¿De verdad lo llevaremos a la enfermería?– preguntó la castaña.
–No, andando, aún quiero ese panqué de arándanos– admitió Pansy, rodeando el cuerpo inerte del Hufflepuff y siguiendo hacia la cocina.
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Alexa estaba tan preocupada por el regaño que le daría su primo que olvidó el momento que había tenido con Daphne; al llegar al lugar de la cita, se dirigió hasta la parte más alejada, donde su primo estudiaba siempre, gracias a la falta de murmullos de otros alumnos.
Al llegar pudo ver a Draco sumergido en un libro de Runas, iba a empezar a disculparse por la tardanza cuando volteó al suelo y vio un par de pies sin cuerpo, la curiosidad ganó y dirigió una mano hacia aquellos zapatos, los conocía pero no sabía de donde; su mano chocó con una cosa sólida.
Sintió una especie de tela y la jaló, descubriendo una parte de un pantalón del uniforme, –¿Qué haces ahí?– interrumpió la voz de Draco, espantando a la chica.
–Yo... lo siento, llegué tarde, pero fue culpa de Smith, empezó a molestarme y–
–¿Zacharias Smith?– preguntó Draco, alguien iba a recibir un buen castigo y seguía desmayado en un pasillo.
Volteó la mirada hacia donde estaba el par de zapatos antes y ya no estaba, –¿Te hizo algo?– volvió a preguntar el rubio, pero esta vez levantándose de su asiento para revisarla el mismo.
–No, Pansy llegó y me defendió, aunque después le di un puñetazo y Pansy lo desmayó– confesó, no tenía caso esconderselo si de todos modos lo iba a averiguar él.
Una risa comprimida sonó desde una de las sillas cercanas, descolocando a ambos chicos –¿Quién está ahí?– preguntó el platinado sin terminar de localizar el sonido; unos segundos después, al no obtener respuesta, Draco tomó sus cosas y se marchó con Alexia de la mano, esa interrupción no iba a evitar que estudiaran.
🍵✨: Bue, recién chacho que perdí mi oportunidad de ponerle "Alexia Walburga" JAHSJAJA
