El Secreto de Louis Tomlinson (M-PREG) Larry Stylinson

Capítulo 44: Inesperado

(Este capítulo lo he vuelto a subir después del epílogo por las letras extrañas)

ÚLTIMO CAPÃÂ�TULO DE LA TEMPORADA âÂ�¤

El ruido de maletas rodando sobre el suelo de parqué resonaba alrededor de la silenciosa casa. Puertas que se abrían y persianas que volvían a estar alzadas después de dos semanas sin dejar entrar la luz. Todos los muebles nuevos permanecían intactos en su lugar con una fina capa de polvo recubriéndolos, pero sin perder su aspecto hogareño.

Louis se sintió feliz de estar de vuelta en casa tras aquellas merecidas vacaciones y poder respirar de nuevo el aire de su ciudad natal. El vecindario en el que ahora vivía era una zona residencial llena de familias con niños y de un ambiente bastante acogedor. Ya estaba harto de vivir en aquel barrio a las afueras, con el miedo de ser atracado cualquier día al salir de su casa. Ahora por fin tenía un sitio al que poder llamar hogar, y personas con quienes compartirlo.

Subió con lentitud los tres pequeños escalones del porche, mientras Harry seguía yendo y viniendo desde el coche hacia la casa cargando con sus maletas. Quería ayudarle pero tenía claro que las palabras de su novio iban a ser las mismas de siempre: "no debes hacer tantos esfuerzos Lou, es malo para el bebé". Y también sabía que no podía quitarle la razón, pero odiaba sentirse un estorbo inútil. Su enorme tripa de veintitrés semanas cada día le dejaba hacer menos cosas.

-¿Estás bien, cielo? -preguntó Harry al verle entrar a la casa y tirarse exhausto sobre el sofá.

-Un poco cansado por el viaje, pero ha merecido la pena -contestó Louis con una sonrisa de éxtasis.

Pronto el chico de rizos se acurrucó también junto a él mientras hacían un review de los maravillosos días que habían pasado en España. Aquellas vacaciones habían sido la sorpresa que Harry se había dedicado a preparar en secreto, ya que sabía que su novio jamás se había bañado el mar. ¿Y qué mejor opción que el cálido mediterráneo para su primera vez?

Aunque no sólo había sido su primera vez en la playa o su primera vez en avión, también habían tenido tiempo durante aquellas vacaciones para algunas otras primeras veces. Louis había sido capaz de evadirse del mundo por unos días y olvidarse del odio que tenía hacia su cuerpo para disfrutar de él. Y esta vez no habían sido necesarios el limón y el tequila. El vínculo amoroso creado entre ellos era suficiente para desatar toda la pasión contenida.

-¿Qué día es hoy? -preguntó Harry de repente pensativo.

-Veintinueve de agosto, ¿por qué lo preguntas? -el ojiazul le miró interrogante.

El chico de rizos cogió su móvil para revisar su agenda. Sabía que muchas veces su memoria le jugaba malas pasadas y por eso prefería tenerlo todo apuntado. Recordaba perfectamente que ese día era el cumpleaños de su mejor amigo, pero a parte de eso tenía la sensación de que algo se le olvidaba. Cuando vio lo que era una sonrisa apareció en su cara instantáneamente.

-¡Louis! -exclamó levantándose de un salto-. ¡Mañana es el día!

-¿El día? ¿Qué día?

-¡Mañana tenemos cita con el médico y por fin sabremos que nuestro bebé es una niña!

Harry estaba más emocionado que un niño abriendo regalos en la mañana de navidad y Louis en seguida se contagió de su alegría levantándose y abrazándole.