Mi mirada se posó por unos segundos en aquel árbol que había frente a mis ojos --- ¿Y si fuera yo ese árbol? --- pienso --- ¿Y si fuera cada hoja que cae al suelo frágilmemte con el danzar del viento ? Hoja la cual llega intacta sin romperse.
Pero...
Mis ojos no podían creer lo que estaban viendo en estos momentos. Daniel me había dado aquellos horribles documentos que decían que el paciente no quería medicamentos ni ningún otro medio para prolongar su vida. Estaba estupefacta. Aquello ya me estaba sobrepasando.
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--- ¡Me puedes explicar que rayos es esto ! --- alcé mi tono de voz --- ¿Cómo que no quieres prolongar tú vida Daniel ? Di algo por favor ---
--- Creo que es lo mejor. Así que --- me dio la espalada para irse --- Aléjate ya una vez de mi.
--- ¿Crees que alejarnos es lo mejor ?--- grité exaltada esperando una respuesta de su parte ---¡ RESPÓNDEME DANIEL ! No me dejes así. Con la palabra en la boca. ¿ALEJARTE DE MI ES LA SOLUCIÓN A TÚ PROBLEMA ? --- fui hacia él sin pensarlo y cogí una de sus manos pero él la rechazó con brusquedad --- ¿Es que ya no recuerdas lo que me prometiste aquel día en el lago? --- entonces se paró en seco en medio de aquel pasillo blanco aguantando su carrito donde en la punta de este colgaba el suero y su oxígeno --- dijiste que pasara lo que pasara estaríamos juntos. Que no tenía por qué tener miedo, que en tus brazos estaría a salvo. Que cuando tuviera otra de mis pesadillas, solo necesitaría llamarte aún si fuera medianoche tú vendrías a mi y yo correría a tí. Que ante cualquier situación tú siempre estarías ahí. Se que eres más fuerte que esta enfermedad Daniel. No te rindas aún. No me Apartes de tu lado.
Pero por más que tratara de mantenerme firme, por más que tratara de estar a su lado, Daniel no quería. Lo único que salió de su boca fue lo que terminó por romper mi corazón --- Adiós Skayler. Por favor ten una buena vida.
Sabía que esa era su despedida.
Daniel...
Me sentía como un verdadero imbécil. Lo único que quería era olvidarlo todo y mandarlo a la basura, correr e ir tras ella. Pero la realidad era otra. No puedo dejar que se quede a mi lado . Sería egoísmo de mi parte aferrarme a esa idea . Yo la amo, y por esa misma razón es que tengo que dejarla ir. Que continúe con su vida Aunque yo ya no esté en ella.
Cuando regresé a la que correspondía como mi habitación en el hospital, encontré a quien menos me imaginaba ver en ese lugar.
--- Hijo --- Stephan estaba sentado en uno de los butacones de la habitación --- Quería saber .... --- pero antes de seguir escuchando otra palabra más que saliera por boca de ese hombre lo interrumpí.
--- Lárgate Stephan --- dije tajante --- no tienes nada que hacer aquí. Aunque ¿ sabes qué ? Dime. Dime el ¿por qué ? ¿ Por qué regresaste ? ¿ Es que acaso tienes cargo de conciencia ? ¿ Es eso, te pesa la conciencia ?
--- Estoy aquí porque eres mi hijo
---¡ NOOOO! --- exploté tirando el carrito al suelo haciéndome daño ya de paso --- No eres mi padre. Dejaste de serlo el día que nos abandonaste Stephen. El día que nos abandonaste a mi madre y a mí. Huiste como un cobarde cuando te enteraste de su enfermedad para irte con tus mujerzuelas.
