CAPITULO 6

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Por un momento olvide lo que me hizo, ignore sus actos y pase por alto su arrogancia y el simple hecho que ya estaba cayendo rendida a sus pies como lo hacia gran parte de las personas, decidida camino hasta la puerta principal, trago en seco cuando a la distancia diviso a dos gorilas riendo a carcajadas estos se van, cuando no se encuentran en mi radar salgo apresurada como puedo y corro, abro la puerta aprovechando que no tiene seguro y me introduzco por el camino que guiaba a una puerta aun mas grande. 

Con los nervios invadiendo mi sistema me tropiezo un par de veces, estaba a punto de escapar, solo necesitaba dar un paso por la puerta donde al parecer entraba los trabajadores de esta mansión, corro como puedo hasta llegar al portón, respiro repetidas veces analizando como podría escapar si el portón estaba cerrado. Mi vista pasa por el pequeño cuarto vacío que estaba a unos kilómetros de mi derecha, camino sigilosamente y fuerzo la puerta, le brindo varias patadas a la puerta y esta cede, después de unos minutos claro. Antes que pudiera ingresar siento como agarran mi brazo con brusquedad sacándome de un tirón y botándome al duro concreto. 

- auchhh.- Me quejo, levanto la vista encontrándome con un hombre alto, mirada inexpresiva pero bastante intrigante. 

Me levanto a costas del dolor y lo miro destellando odio puro. 

- ¿que mierda pasa por tu cabeza? - grito pero no obtengo una reacción. 

Se acerca rompiendo la pequeña distancia que nos separaba, siento como inhala y toma hilos de cabellos míos acercándolo a su nariz, me aparto extrañada por su reacción. 

- ¿que crees que haces?.- doy pasos hasta chocar con el muro. 

- Eres una intrusa. - confirma para el mismo.- pero no logro entender como entraste a este lugar. 

Levanto una ceja confundida ¿como es que entre? si me secuestraron. 

- el Alpha Artem de trajo en contra de mi voluntad. 

Lo único que obtengo es una carcajada por varios segundos, pasa su mano al lado de mi rostro chocando contra el muro y arrinconándome. 

- vaya estupidez quieres que me trague humana. - se apega mas a mi cuerpo sintiendo el tacto duro de su pecho contra el mío. 

Aparto mi mirada fijándose en el cuarto pequeño donde estaba a punto de entrar, muerdo mi labio frustrada, estaba tan cerca de mi libertad que la podía sentir en este momento pero este idiota me retenía en contra de mi voluntad. 

- te diré algo muñeca - toma de nuevo mi cabello y lo huele, asqueada giro mi cabeza bruscamente para quitárselo pero continua repitiendo. - Si quieres sobrevivir  de nuestro Alpha podría hacer algo para que te perdone la vida, después de todo soy un guardia de la primera línea. 

- me perdonara.- aseguro- pero dudo que lo haga igual contigo. 

Su mano libre baja por mis muslos alterando mis sentidos, tenia ambas manos en su pecho para apartarme pero no lo conseguía, ni se inmutaba tan siquiera. En este momento me arrepentí horriblemente de mi decisión, estaba a punta de llorar. No podía creer que saliendo tranquilamente por la puerta iba a encontrar mi libertad, pensé que seria sencillo pero el resultado que esperaba resulto ser todo lo contrario. 

- tranquila muñeca. - se acerca a mi, chocando sus labios contra los míos. - ¡Joder! que mierda tienes? hueles jodidamente bien, quiero estar en medio de estas piernas. 

Acaricia mis muslos sin ningún pudor y sube su mano lentamente hasta llegar con mis pechos, los acaricia e inmediatamente me siento asqueada, estaba llorando sin parar, me sentía indefensa, pierdo todas mis energías, estaba a punto de suceder cuando me lleva a un rincón jalándome,  pataleaba pero nada tenia efecto en el, mis movimientos eran lentos y sin ningún tipo de fuerza, estaba aterrada. 

THE ALPHA ARTEM [PAUSA]Where stories live. Discover now