CAPITULO 15

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- enseguida vamos.- gritamos Kristen y yo al unísono.

Acomodo mi falda mientras Kristen termina de dar un tono carmesí en sus labios delgados, nos ubicamos al frente del gran espejo y sonreímos victoriosas por nuestra imagen, bueno mi imagen. Kristen voltea verme dramáticamente.

- mierda, dime que estoy bien Alessia.- comenta frustrada por no ver su reflejo en el espejo.

Sonrío y asiento un par de veces.

- estas hermosa.

Muerdo mi labio indicando que esta caliente, esta pega un brinco y me abraza con todas sus fuerzas, suelto una carcajada y la obligó a separarse.

- nos están esperando.

Para en seco para después alejarme. Sonriente sale del cuarto y grita a todo pulmón <<Byron>> no puedo evitar soltar una carcajada que me obliga a sentarme. Observó el pasillo, lentamente dejó caer mis párpados por el cansancio, llevaba varias semanas aquí con Byron, Kristen, Desmon y los demás vampiros, aun no lograba entender en qué parte nos encontrábamos pero ninguno de aquí tampoco quiso decirme, aun con la duda decidí convivir con ellos e irónicamente poco a poco me lograba acostumbrar a excepción de ciertas cosas. Desmon no soportaba que mencionara a Artem tampoco me mencionaba sobre el trato que hicimos, me desilusionada, lo acepto.

Desmon con su tono de voz áspero y grave revolvía mi sistema, tenía el mismo efecto cuando Artem estaba conmigo; volvían mi mundo de cabeza, aun así no lograba inmiscuirme en su persona, era bastante reservado, deseaba saber más de él.

Era como comer la fruta prohibida, entre mas te impidan mas lo deseas.

Gaynor no volvió a comunicarse conmigo... Se podría decir que perdí conexión alguna con ella, mis sentido disminuyeron, no era como una genuina loba o como lo era cuando estaba con el. Mis rasgos físicos se mantuvieron a excepción del tamaño de mi cuerpo, podría decir que perdí estatura.

- se que estas aqui Desmond.- murmuro aún sin abrir los ojos.

Algo que había notado es que Desmond tenía una afición por vigilarme sin que me diera cuenta, en este momento no sabía que estaba pero aun así no descarte posibilidades de que lo estuviera sin yo darme de cuenta.

- esa falda te vuelve caliente Alessia.- confiesa una voz ronca al lado mío, toma mis caderas y las deja caer en su regazo.

Lo sabía, me estaba vigilando.

- ¿por qué te gusta observarme de la nada? - pregunto abriendo lentamente los ojos.

- no te incumbe.- responde tajante, ruedo los ojos.

- tienes razón, no me incumbe así como a ti no te incumbe lo que haga y deje de hacer.

Desmond levanta una ceja y yo en cambio lo miró desafiante pero con una sonrisa a punto de salir.

- Necesito tu sangre. - hace a un lado la prenda que tapa mi cuello pero se arrepiente, me deja a un lado y sonríe maliciosamente. - pensándolo bien tomaré sangre de aquí.

Acaricia mis muslos estremeciendome por cada roce que produce con mi piel, muerdo mi labio inconsciente. Desmond inhala y exhala recibiendo el olor de mi en su sistema, al parecer parece disfrutarlo ya que comienza a pasar su lengua por ellas, llevo mi mano a mi boca impidiendo que salga algún ruido que llame la atención de los vampiros de la mansión, suelto un quejido de dolor a la vez que siento el ardor de los colmillos enterrarse en mi muslo derecho, mi falda se levanta por la fuerza que ejerce su agarre.

- Desmond.- llamo pero sigue absorbiendo sangre de mi muslo.

- Desmond.- vuelvo a llamar.- Quiero volver así que permíteme irme de aquí... Será un tiempo, te lo aseguro, volveré para que Artem no me encuentre y ¡Auch!

THE ALPHA ARTEM [PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora