« 𝗖𝗮𝗽𝗶́𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟭𝟭 »

2.2K 112 759
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El agarre en su brazo era realmente fuerte, más para una persona que no hacía ninguna actividad física en particular, más que caminar como cualquiera lo haría

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El agarre en su brazo era realmente fuerte, más para una persona que no hacía ninguna actividad física en particular, más que caminar como cualquiera lo haría. No aflojó en ningún momento su mano de aquel brazo, sin importarle las protestas del contrario ni la fuerza que estuviese implementando. Se encontraba realmente enojado y celoso, tanto así que se lo estaba dejando ver, tan claro como el agua.

— ¿A donde diablos vamos, Toya?-Su tono de voz no era para nada tierno, para nada suave, solo demandante y distante.

Lamentablemente, su pareja no estaba con los ánimos suficientes para responderle, ni se limitó a hacer si quiera un sonido de afirmación o negación.
No volteó a mirarlo, y siguió arrastrándolo, hasta unos callejones que ellos bien conocían.

Fueron frenando su acelerada caminata, hasta no estar a la vista de nadie, y asegurarse de que nadie se estuviera entrometiendo en su conversación.

— ¿Pero que cojones te pasa?, ¿de dónde sale tanto enojo?

— Ah, ¿en serio lo preguntas?-Acorraló al pelirrojo, dando un fuerte manotazo a la pared del callejón, donde ahora tenía acorralado al contrario.

— Sabes lo tonto que soy... me temo que me debes una explicación.-Cada palabra que salía de su boca sonaba firme, a pesar de la situación.

— Pues, no lo sé, ¿te parece estar encima de tu superior, provocándolo?

Ah, Toya era igual que un libro abierto, y entre más leías, más te enganchabas. Estaba más que claro que estaba celoso, y había malinterpretado la situación, pero a pesar de eso no se tomaría el tiempo de darle explicaciones, porque sabía que las ignoraría de todos modos y continuaría enojado un tiempo más. Su orgullo no le permitía ser tan dócil como solía demostrar a los demás, y eso Akito lo sabía.

Una sonrisa socarrona se asomó por el rostro del oji-verde, posiblemente intentando incitarlo a hacer aquello, pero era lo que realmente volvía aún más interesante aquel asunto, y estaba ansioso por saber como terminaba.

— ¿Ahora molestar cuenta como provocación? Increíble.

La expresión de seriedad estaba dando paso a una de enojo completa. De todos modos, conocía bien a su pareja y sabía lo bien que se le daba molestarlo, pues lo conocía lo suficiente para hacerlo, tanto así que ya se tomaba sus celos a juego.

« 𝗣𝗹𝗲𝗮𝘀𝗲, 𝗱𝗼 𝗶𝘁 𝗳𝗼𝗿 𝗹𝗼𝘃𝗲 » (Ruikasa) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora