BESOS COLOR ROSA (OBISAKU)

Capitulo 4

- Oh – Obito sonrió y se levantó para aproximarse a la joven

 – Bien... te esperare afuera – acerco su rostro al oído de la chica

– Rosada – le susurro, Sakura sintió el aliento cálido rozar su lóbulo, se sintió invadida y nerviosa, dio unos pasos atrás cubriéndose lo mejor que le permitía la toalla, Obito le guiño un ojo y se dirigió a la puerta.

- Que tipo más raro y sinverguenza – pensó para sí, pero por algún motivo no le desagradaba tenerlo cerca, no tenía idea que significaba. Pues bien, ahora debía alistarse, quería conocer ese lugar donde viviría un tiempo.

Obito se encontraba apoyado en la puerta de la habitación de Sakura, y otro azabache lo diviso.

-¡Ey! ¿Qué haces? Te estaba buscando, vamos a entrenar un rato – propuso Sasuke a su primo.

- Luego, voy a pasear a la pequeña Rosada- justifico con una sonrisa, Sasuke alzo una ceja.

- Me parece que habías dicho que no era tu tipo ... - refunfuño Sasuke, odiaba cuando su primo no accedía a sus invitaciones y más por el hecho de tratarse de una supuesta chica que no le interesaba.

- Jaja, no te pongas celoso, solo soy cortes –

- No parece- chasqueo la lengua- Estaré en el campo de entrenamiento de todos modos, búscame ahí cuando termines – dijo el menor mientras reanudaba su paso, justo en ese momento la puerta se abrió, y apareció el rostro de Sakura, ella cruzo mirada con el joven. El la observo brevemente y alzo la mano en señal de saludo, ella hizo lo mismo y la agito tratando de parecer amable, Sasuke reanudo su paso dejando atrás a Obito y Sakura.

- ¿Nos vamos? – Obito se acercó a Sakura y disimuladamente la observo, su atuendo era sencillo, un vestido rojo que llegaba hasta sus rodillas no era su estilo, pero la muchacha se veía tierna.

Recorrieron buena parte de la mansión, Obito le indico cuales eran las habitaciones que ocupaban cada uno de los integrantes de la familia.

En aquel lugar vivía: Madara, Itachi, Sasuke y él. Los padres de sus primos, Fugaku y Mikoto, tenían una propiedad cercana a la mansión, sin embargo, Itachi y su hermano preferían alojarse en la mansión por sus instalaciones para entrenar, además Itachi tenía una estrecha relación con Madara y Sasuke al no recibir la suficiente atención de su hermano mayor pasaba el tiempo con su primo Obito, este también agradecía la compañía de Sasuke, la relación con su padre no era del todo buena. Madara esperaba mucho de Obito como futuro Líder del Clan Uchiha, por tanto, su exigencia Obito la sentía como una molestia constante.

- Dios... esta casa es tan grande, no sé si recordaré el camino a mi habitación – comento Sakura apenada, Obito se río ante el comentario de la muchacha, le parecía exagerado, pero le daba un poco de ternura las reacciones de la joven.

- Vamos, aún queda más – Y así fue, siguieron recorriendo los salones; biblioteca, sala de reuniones, comedor, cocina, baños y un sinfín de áreas que la pequeña niña jamás se imaginó que podría tener una "casa". Ella entendía que por casa debía haber una cocina con comedor, una sala de descanso, dormitorios y un baño.

- Los jardines se dividen en varios sectores, por allá – apuntando- es la zona de entrenamiento, por aquí hay un vivero...aunque casi nadie lo cuida, de hecho, ni sé si habrá vida ahí- Sakura se entusiasmó con ese detalle, a ella le encantaban las plantas sobre todo las que tenían fines medicinales.

- ¿Obito? – le llamo suavemente

- Mmm

- ¿Podría... cultivar algunas plantas en ese vivero? - pregunto con timidez