Alfa [BakuTodo]

ғᴏʀᴛʏ-ᴛʜʀᴇᴇ

Masaru se detuvo de inmediato al ver a su hijo buscar cosas por el living mientras cargaba su mochila, apenas había pasado la hora de la cena por lo que normalmente significaba que su hijo se fuera a bañar para irse a dormir prontamente para ir al otro día a la escuela. 

ーKatsuki, ¿Qué haces?ー 

Preguntó al verlo ir a la cocina, directo al refrigerador, no le asombró para nada que Katsuki no reaccionara, los sentidos de su hijo eran realmente afilados, al punto que estaba seguro que podía oír su corazón latir preocupado dentro de su pecho y no tenía que oler sus emociones para nada. 

ーIré donde Kirishima ー 

ーOh, ¿Le avisaste a tu madre? ー 

ーNo, ¿Le avisas tú, papá?ー 

ーSi, claro, no hay problema alguno ¿Mañara irás desde allá a la escuela?, porque no puedes faltar ー 

ーSi, me llevo parte del desayuno también ー 

ーDe acuerdo, llámame cuando llegues, es tardeー 

ーTe mandaré un mensaje ー 

Masaru asintió sonriendo, sabiendo que había más que un motivo para que su hijo actuara así, estaba demasiado sumiso, demasiado para el enojo que cargaba dentro, seguramente estaba pensando, estaba usando todas las neuronas que tenía en su cerebro para poder formar un plan para que "no le arrebataran lo suyo", aunque no sabía exactamente como las cosas habían avanzado entre ellos, sabía bien, que a pesar de su método, apreciaba al chico que no había cambiado para nada su olor a pesar de la amenaza que era su hijo.

También tenía que tener en cuenta, que por proteger a Katsuki, ese chico se había enfrentado a él y se negó a irse bajo la amenaza que pudiera llevar a Katsuki al hospital cuando estaba enfermo.

Bien, era tiempo de hablar con sus padres, quizás podía ayudar un poquito a esos chicos.

Katsuki terminó de guardar su desayuno en la mochila que se calzó al hombro y caminó a la salida donde solo se puso sus zapatillas y salió de la casa.

Al escuchar la puerta, Mitsuki bajó del segundo piso.

ー¿Y Katsuki? ー

ーFue donde Eijirō-kun ー

Mitsuki alzó una ceja al ver tan tranquilo a su esposo, tanto que se le contagió la tranquilidad y se sentó a su lado en el sillón.

ーMasaru ー

ーDime, cariño ー

ー¿Vas a contactar a mis suegros? ー

ーPensaba hacerlo ー

ーNo lo hagas aún, voy a averiguar por mi cuenta algunas cosas antes, siento que aquí hay algo más que un matrimonio arreglado ー

ーSiento exactamente igual ー

ーNo es normal que justo después de que ellos dos se comenzaran a llevar bien se le ocurriera a sus padres, además, apenas tiene 15, si no 16, es ridículo casarlo a esa edad, son niños ー

Masaru suspiró negando con la cabeza, eso se sentía como una bomba, esperaba poder desactivarla antes de tiempo.

ーHabla con Katsuki, no dejes que use su voz contra la familia de Shōto-kun, no debe mostrarles de lo que es capaz, es la única condición que nos pusieron para que estuviera con nosotros ー

ーLo sé amor, pero creo que él lo sabe ya ー

Mitsuki cerró sus ojos al cejarse caer en el hombro de su esposo, estaba cansada mentalmente, era un fastidio, pero tendría que hablar en su organización para investigar quién demonios era ese viejo y la mejor forma de destruirlo si lo necesitaba, esperaba no tener que asesinar a nadie, no era algo de su estilo.

Katsuki iba con sus audífonos puestos, una mascarilla negra cubría la mitad de su rostro neutralizando su nariz, incluso usaba su capucha para centrar solo sus sentidos en sus ojos, todo para poder ver aquello que vio hace unas noches cuando había perdido el control de sus poderes, quería ver si de nuevo podía ver ese humo rojo marcaba su camino.

Para su mala suerte, no lo logró, no logró ver nada en el tiempo límite que fue el camino hasta la casa de Kirishima.

Golpeó dos veces con el dorso de su mano para indicar que estaba ahí y pronto la puerta se abrió, no dudó y entró y una vez adentro se sacó la capucha junto con los audífonos, aunque se dejó la mascarilla.

Necesitaba no sentir su olor lo más posible para poder pensar.

Kirishima no le dirigió la mirada a pesar de que quería, sabía que debía estar soltando un olor que asustaba a su amigo, un olor que no había percibido por estar demasiado concentrado pensando. 

Bakugo cerró los ojos con la puerta cerrada detrás de él, una inspiración profunda le dijo dónde estaba exactamente todo en ese departamento, incluso pudo saber que Todoroki estaba en el balcón con la ventana cerrada, quizás por eso aún no había advertido de su presencia. Después de soltar el aire de sus pulmones sus sentidos volvieron a la realidad, dejó de ver todo como si fuera un mapa de negro con rojo y solo sintió la misma seguridad de siempre que tenía al entrar en ese lugar. Kirishima le recibió la mochila y la fue a guardar, sabe que se quedará así que no la necesita por ahora. 

—Supongo que no necesito decirte donde está— 

Bakugo dejó ver una pequeña sonrisa en sus labios al escuchar la afirmación de su mejor amigo, no necesitaban más palabras que esas para entenderse, por eso caminó directo al balcón sin deshacerse de nada de su vestimenta, tenía frío, no sabía como el idiota estaba afuera solo con un pantalón de Kirishima y un suéter liviano, ni siquiera usaba calcetas. 

Todoroki no deparó que Bakugō estaba ahí hasta que sintió que el gran ventanal se abrió, se sentía pequeño así que su postura lo representaba al tener ambos pies apoyados en el sillón y abrazar sus rodillas que había retraído contra su pecho, a pesar que sentía frío eso mismo lo hacía sentir tranquilo, sentía que estaba escondido de nuevo en el armario del patio donde nadie había logrado encontrarlo hasta que estuvo a salvo.

Y justo ahora, así mismo se sintió.

Tanto que sin querer sonrió al ver tan tranquilo a Bakugō.

Ni uno de los dos dijo nada, pero no lo necesitaban, sus sentidos los llamaban, y por una vez no se negaron a eso, no cuando Bakugō caminó hasta sentarse al lado de Todoroki con sus pies en el suelo y su postura recta y Todoroki apoyó ligeramente su cabeza en el hombro de Bakugō.

Compartieron el silencio, un silencio tan marcado que solo se podían escuchar a lo lejos los autos que se movían para llegar a sus casas, aquellos que solo anhelaban un lugar donde descansar.

ーNo quiero casarme ー

Aceptó de pronto Todoroki sintiendo como un gran peso se quitó de sus hombros al decirlo, sintió que el aire entró de vuelta a sus pulmones y las ganas de vomitar cesaron, y aunque, no estaba herido, el dolor que su cuerpo sentía había desaparecido.

Bakugō bufó una risa.

ーY pobre de ti imbécil que lo hicieras ー

Todoroki sonrió al escuchar la seguridad con la que Bakugō había hablado, le hacía sentir que realmente tenía el derecho a elegir, le hacía sentir que no estaba solo como siempre había sentido.

Todoroki soltó una de sus piernas y con su mano izquierda buscó la mano de Bakugō y ahí la sostuvo, la sostuvo tan suave que Bakugō sintió que no lo estaba haciendo así que se encargó de apretar el agarre.

Todoroki sonrió cerrando sus ojos dejando por fin a su cerebro descansar, por fin sintiéndose a salvo.

Kirishima fue después de un rato a buscar una manta para cubrirlos, después de todo se habían quedado dormidos en el sillón abrazándose el uno al otro.