EXTRA: NAVIDAD MISTICA

24.6K 1.7K 1.8K
                                    

Primero que nada, feliz navidad homosexual.

Segundo, este es mi regalo por casi acabar con cierta capricornio la navidad pasada.

Tercero, les dejé un par cositas escondidas aquí.

🎄🎁

Marina.

Si lo pensamos, Jesús era capricornio. Especulo que por eso estoy tan enamorada de las fiestas.

Cancelé un par de fechas para Europa por quedarme en casa ese diciembre, Honne bromeó sobre rechazar un trabajo para VOGUE por quedarse a ver partidos de futbol. O al menos yo pensé que era un chiste, estuvo peleando por semanas en el chat de nuestros amigos con Luka y Nerea, sus países calificaron también.

Yo en mi inocencia aproveché el entusiasmo de los tres para invitarlos a ver el mundial juntos en casa.

¿Qué era eso que dije de los acuario? ¿Qué tomábamos malas decisiones?

¿Si pudiera volver al pasado a retractarme lo haría? Es probable.

—Hice sándwiches —avisé a Nerea cuando ella entró a la cocina, arrugué las cejas—. ¿Y tu camiseta?

—Hoy no juega mi equipo —explicó relajada—. es México contra Argentina.

—Claro —asentí como si entendiera—. Qué guay, Honne y Luka van a pasarlo genial hoy.

—Eh, no creo que sea la palabra correcta para describirlo —me dio la impresión de que huyó, tomó mi bandeja—. Han apostado hasta su loro.

Corrí a la sala a verlos, estallé en una carcajada apenas entrar, Honne tenía una bandera pintada en su mejilla izquierda, un diez en la derecha, liada con una manta celeste y se veía eufórica. Luka sentado frente a ella le mostraba el dedo del medio, él combinado con su loro tenían un sombrero tradicional, nadie agarró los demás aperitivos en la mesa.

Entre las comidas favoritas de mi esposa están los nachos. Esa tarde no agarró ni uno solo, hice toda esa comida para nada porque al parecer existe algo llamado "cábala" y ella tiene la de comer únicamente uvas durante los partidos, Luka tiene la de emborracharse, ellos ni siquiera creen en la energía ¿Qué era ese espectáculo?

Nerea me dio dos palmadas en la espalda antes de que me colocara en el asiento del medio, dándome energía para soportar aquello. Aun no tenía conocimiento de qué iba a suceder pues me iba apenas empezaban a patear, ¿Por qué si son tan millonarios no se compran una pelota cada uno? ¿Por qué no cuenta un gol si se tiró fuera de área? ¿Cuánto iba a durar eso?

A los minutos de que comenzara fui a recogerme el cabello, estaba empapada en sudor pero Honne por cábala tampoco quiso abrir las ventanas o encender el aire acondicionado. Reacomodé mi corsé cuando irrumpió en medio del baño cual espía, traté de hablarle, puso una mano en mi boca y empujó contra la pared.

Mi atención bajó rápido a sus labios. Sean cual sean sus intenciones, mi mirada fue bajando.

—Concéntrate —chasqueó—. Marina, voy a soltarte, no hagas ningún ruido, no respires, escúchame con atención —susurró en un farfullo, mis alarmas de preocupación se activaron—. ¿Dónde está el niño?

—¿Qué pasa...? —indagué con el corazón al borde de explotar—. ¿Qué...? —volvió a taparme la boca.

—No le digas esto a nadie, sin embargo, necesito tu ayuda. Necesitamos. —me tomó de hombros—. ¿Qué tipo de hechizos sabes hacer? La brujería es poderosa, ¿Verdad?

—Honne me estás asustando.

—Quiero que hagas un hechizo para que ganemos —admitió con completa seriedad—, una manifestación, una vela, payé, conjuro, como se le diga. Lo necesito.

Si ellos supieranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora