IMPERIUM ┗ Namor

Juntúul chéen

Los tres desviaron su atención de inmediato a la persona que acababa de llegar, la chica aterrizó con destreza en la cubierta, la distracción fue suficiente para que Namor atacará al instante y este golpeara con una fuerza sobrehumana la cubierta del barco haciendo a los tres perder el equilibrio.

En menos de tres segundos una enorme grieta se formó partiendo el suelo de la cubierta en dos y haciéndoles reaccionar al instante.

Cuando se recuperó Jessica miro a ambos y sin pensarlo atacó, pero está vez no fue por Namor sino por la chica.

—Zanya— Llamó el pelinegro dispuesto a acercarse y brindarle apoyo cuando las un nuevo ataque de fuego lo hizo retroceder al instante. Namor miro a el chico quien lo había interceptado.

—Tú oponente soy yo, hombre pez— Dijo el chico.

por su parte Jessica se lanzó a la morena con ataques físicos, sin usar sus poderes, la chica, quién parecía menor que ella, no era una gran amenaza, no era igual a Namor, a diferencia de este o alguno de sus guerreros su ataques carecían de  experiencia o fuerza, eran meramente ataques patéticos, claramente se veía la inexperiencia para poder defenderse o contraatacar.

—Esto será rápido— Escupió Jessica con desdén, desde la primera vez que vio a la morena se pudo percatar de la preocupación que despertaba en Namor, era alguien demasiado importante para él, porque ni siquiera cuando atacó a alguno de sus hombres había vacilado o dado una segunda mirada, pero con ella había sido diferente.

—No me subestimes— Dijo la morena con seguridad.

—No lo hago, pero es demasiado evidente que no representas una amenaza.

—¿Entonces por qué perder el tiempo conmigo?

—Porque evidentemente eres importante para él, y yo estaré más que satisfecha por matarte con tal de que el sufra— Otro ataque y Zanya solo se limitaba a esquivar, de vez en cuando lograba contraatacar pero era tal y como la rubia había dicho, ella no era una amenaza.

Solo necesitaban un poco más de tiempo, la chica claramente no estaba pensando correctamente y se dejaba llevar para Zanya eso era muy obvio, ella terminaría siendo su propia destrucción.

—¡¿Por qué mierda no atacas?!— Gritó Jessica cada vez más exasperada al ver que la morena solo se limitaba a esquivar y eso la enfureció —¡Maldita!— De repente el fuego se hizo presente en toda la extensión de sus brazos y sus ojos chisporrotearon en llamas, estaba furica en ese momento.

Las llamas empezaron a salir disparadas de las palmas de sus manos en ataques descuidados sin importarle en lo más mínimo los daños que estuviera causando a su alrededor, sin importarle si el barco se consumía por las llamas, no le importaba.

El calor era demasiado intenso para Zanya, aún así siguió esquivando y retrocediendo para llevarla directamente hacia donde quería, esa era la razón de su tardanza, debía llevarla a dónde quería para producir la combustión en un punto del barco, cuando el fuego diera en ese punto todo acabaría.

Namor seguía esquivando cuando por el rabillo del ojo observo el fuego ser lanzado con intensidad hacía su hija, fue una distracción de unos breves segundos que Dmitry aprovechó para atacar.

—No te distraigas, maldito— Dijo el castaño al tiempo que lanzaba un ataque más fuerte que los anteriores.

Namor retrocedió de inmediato ante el fuego, volando unos metros fuera del alcance de aquel ataque, había reaccionado justo a tiempo para evitarlo.

Fulminó al chico con la mirada, era una molestia, tendría que encargarse de él primero si quería ir y ayudar a su hija, aunque los breves segundos dónde la observo pudo darse cuenta de que Zanya estaba logrando su cometido y de seguir así el plan saldría tal cual lo planeado.