Tomó el control remoto, enciendo la televisión y mi peor pesadilla aparece en la pantalla.
- Hubo una riña en...
Intento escuchar todo lo que la periodista de las noticias anuncia, pero mi mente insiste en bloquearse.
- Hasta el momento, se reporta que hay dos muertos. El primero es Ricardo Ramírez, presunto culpable de múltiples homicidios, lavado de dinero y narcotráfico.
Veo la foto del hombre que más de una vez me hizo correr a esconderme.
- También Humberto Solís, quien presuntamente pertenecía a una línea de trata de blancas. Ambos hombres estaban en espera de su juicio final, para después tener su sentencia que podría ser cadena perpetua en la cárcel, pero su muerte cambió el rumbo de su destino.
- Señora - Cooper aparece - No creo que deba ver eso.
Sigo mirando la nota hasta que termina y pasan a otra, es ahí cuando decido apagar el televisor.
- Daney dijo que la muerte de este hombre significa un peso menos para ella, pero... algo me dice que no es así, me siento alerta en todo momento, como si supiera que algo va a pasar, pero al mismo tiempo no lo sé.
- Debe ser parte de su ansiedad, señora - Cooper murmura - Yo también creo que la muerte de ese hombre, nos quita un peso de encima a todos.
No, algo me dice que no, que viene lo peor.
- Cooper, quiero ir a ver a mi madre - le pido - ¿Puedes llevarme sin decirle a Daney?
- No puedo hacerlo - se niega enseguida - Lo siento, pero es peligroso.
- Pero...
- Puede llamarla por mi celular, si quiere, pero no puedo llevarla con ella.
- Está bien - suspiro - Te agradecería que me prestes tu celular.
Él saca su celular de los bolsillos y me lo da sin irse de la habitación.
Seguramente quiere asegurarse de que no planee escapar.
- Mamá, soy yo, Alba - le digo cuando contesta la llamada.
- ¿Alba? Justo estaba pensando en ti - me dice con energía - ¿Escuchaste las noticias? ¡Ricardo está muerto, qué buen día es hoy!
Ella celebra con alegría su muerte, mi madre lo detestaba como la mayoría.
- Ese hijo de puta no podrá lastimar a nadie más - ríe - Estoy feliz.
- Eso parece...
- ¿Tú no? Él es a quien más temía que me encontrará, él sin dudarlo me hubiera matado, pero el "jefe" no, él me escucharía.
- ¿Sigues teniendo esas ideas tontas? - pregunto molesta - Sabes que es peligroso.
- No lo es, ya está en la cárcel también, así que no me importa unirme a ellos ahora, prefiero avanzar.
- ¿Qué? - me sorprendo - ¿Es en serio? ¿Hablas en serio, mamá?
- Sí, estaba hablando con mi consejero, quiero irme a otro lugar - responde - Pero creo que necesito pedir permiso, la policía debe saber dónde estoy.
Vaya, no imaginé escuchar esto hoy, ¡Excelente noticia!
- ¿Y a dónde piensas irte? - pregunto con emoción.
Ahora soy yo la que está feliz por las nuevas noticias.
- Aún no lo sé, ¿A dónde quieres que vayamos? - me pregunta.
