Magnolia ❞. ₊ [ HyunLix ]

Chapter Thirty : Endless Story.

La tarde del sábado y el jardín botánico reciben a Félix y a Hyunjin con un sol radiante y brisa fresca, el cielo está despejado y no hay demasiada gente alrededor, por lo que, aquella cita que le había pedido el mayor a su novio estaba contando con las mejores condiciones posibles.

Hyunjin mueve sus pies paso por paso sobre la caminería de piedra mientras sostiene con un solo brazo la cintura de su novio, quien va caminando por encima del pequeño y estrecho muro que delimita el borde de la caminería y la separa del césped, haciendo equilibrio.

—. Con cuidado. — Advierte el mayor cuando Félix se ve en la obligación de dar un pequeño salto de un murito hasta el otro para continuar el recorrido.

Han estado caminando a lo largo del inmenso jardín botánico, desplazándose con paciencia, metiéndose en cada uno de los viveros que parecían salir de la nada, dentro de los cuales habían estado conociendo nuevas especies de plantas y flores.

Félix estaba disfrutando aquella cita, no solo porque la naturaleza lo hacía sentir bien, sino porque su novio había estado consintiéndolo con cualquiera de sus ocurrencias.

Llevaban en un pequeño bolso unas cuantas bolsas de semillas, pues según el menor, iban a plantar varias de las especies nuevas de flores que habían conocido para venderlas en la floristería, y Hyunjin no se sentía quién para negarse a comprar los pequeños sobres.

Aparte de todo, habían estado haciendo paradas cortas en las casitas que ofrecían comestibles, probando múltiples bocadillos y disfrutando la experiencia de poder reciclar o aprovechar los envases en los que les vendían la comida.

Félix parece feliz cuando come el último bocado de su manzana acaramelada, había estado emocionado por terminarla, pues el palito de madera que la sostenía, tenía una semilla incrustada en el otro extremo, y podría plantarla para darle vida a un árbol nuevo.

Apenas se había enterado de eso, Hyunjin había sugerido que guardasen aquel palito un par de semanas, después de todo en unos quince días estaba programado su siguiente viaje a Australia, y le había parecido una buena idea que el árbol fuese destinado a crecer en el jardín del hogar de sus suegros.

Por supuesto, al menor la idea le había parecido maravillosa, por lo cual limpió bien el palito, y lo guardó con cuidado dentro del bolso.

—. ¿Qué haremos ahora? — Termina por preguntar, depositando en un cesto de basura el vaso del milkshake que habían compartido un rato antes.

—. Vamos a la sombra de algún árbol.

Félix asiente e inicia su búsqueda, y luego de unos minutos acaba sentado, acomodado encima de la tela del mantel a cuadros que ha llevado el mayor justamente para ese objetivo, bajo la sombra de un árbol mediano que tiene pocas raíces sobresalientes.

Hyunjin se recuesta sobre el mantel, y unos cuantos segundos más tarde, tiene a su novio acostado sobre su pecho, mirando lo mismo que él, las nubes.

El castaño se ríe y señala. — Esa se parece a Kkami.

El mayor ríe también y asiente, para después señalar una nube un poco más grande. — Esa parece un helado.

El rato pasa de esa manera, la intensidad del sol baja un poco, sin embargo se lleva con ella la mayoría de las nubes que habían estado pasando.

Al perder el entretenimiento con la forma de las mismas, ambos habían terminado disfrutando su descanso, haciéndose fotos con el celular del mayor mientras seguían recostados sobre el mantel, con expresiones raras o caras graciosas.

Ente risas, Félix acaba por abrazar estrechamente a su novio y besar su mejilla. — Jinnie, regálame una flor.

Es lo que le dice de repente, y Hyunjin no puede evitar sentirse un poco sorprendido.