Cap 9

138 19 1
                                    

Carlotta

-Hola, ¿cómo estás? -Le dije a Matvey mientras me sentaba en la mesa ubicada en el balcón.

Me miró de arriba a abajo y simplemente respondió:

-Me alegra qué hayas llegado de manera puntual. Siéntate, tenemos asuntos que discutir y acuerdos a los que llegar.

-De acuerdo, me alegra saber que al fin me harán partícipe de algo en esto. -dije.

-Bueno, veo que no eres tímida para hablar, eso me agrada. Vayamos al grano, este matrimonio no lo pedí yo y tampoco lo pediste tú, se concretó por los de arriba.

-Así es. -Le dije y esperé a que siguiera hablando.

-Me aseguré de que nadie quiera interferir en nuestras vidas una vez nos casemos. Nos mudaremos a San Francisco, que es donde está toda la sede de mi organización. Mi única petición es que no seas un dolor en el culo.

Bueno, severo pendejo resultó ser este muñequito. Era alto, musculoso, de ojos azules y cabello rubio. Sus labios eran rojos, y esas pestañas, cualquier mujer mataría por ellas. Pero no era mi tipo, me encantaban los chicos un poco mas bronceados, con tatuajes, estilo chico malo, de cabello negro y ... mierda... ¿Estaba describiendo a Massimo Falcone? De verdad estoy loca...

-Entonces Carlotta, ¿A qué acuerdos quieres llegar?

-Pues lo primero es que no veo coherencia en lo que dices Matvey, no quieres que te estorbe pero, ¿acaso sabes de mi condición médica? en cualquier momento puedo estar enferma y debatiéndome entre la vida y la muerte, eso ni siquiera es algo que haría a propósito...

-Sobre eso, la verdad es que no podría importarme menos, mira, esto no es real, tendrás tu propia habitación y todo lo necesario para que no te enfermes... al menos para que no mueras rápido. ¿No puedes procrear? Me da igual, al menos podemos follar sin tanta preocupación.

Estaba en shock con este patán, me hablaba de sexo despues de decir que le daba igual mi muerte. ¿Otro de mis sueños? No lo creo. Conteniendo mi rabia tanto cómo me era posible, hablé:

-No, por mi condición no se me recomienda tener hijos, eso no quiere decir que sea esteril o algo así. Haré lo que deba para cumplir con mi deber, mi petición es que no me faltes el respeto, me des privacidad y pueda ejercer mi profesión.

-Son peticiones sensatas, pensé que pedirías dinero o ir de compras a diario. Me sorprendes positivamente querida Carlotta.

Me da una sonrisa super fingida y se concentra en su menú. Pide vino, odio el vino, así que bebo unos pocos tragos. No hablamos de nada durante la cena, es el peor primer encuentro de la historia, una hora después de haber llegado al restaurante me encuentro caminando hacia el parqueadero, me monto en mi carro, enciendo la radio a todo volumen y me dirijo tan rápido cómo puedo a mi casa.

***

El lugar está vacío y oscuro, así es como se siente mi interior algunas veces, subo las escaleras hasta la segunda planta, entro a mi habitación y me derrumbo en mi cama. Siento que el mundo se me viene encima y no hay nada que me ayude a esquivar lo que cae sobre mi.

Después de lo que creo que son horas dando vueltas en la cama, siento la mirada sobre mi. Esta vez me levanto lentamente de mi cama, miro alrededor solo para encontrar vacío el espacio otra vez; tomo una almohada y la abrazo, me imagino que en esta oscuridad soy visible para alguien y simplemente comienzo a llorar. 

Strangelove (Massimo  Falcone y Carlotta )Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin