вє мιηє 🌙 [ уσσηмιη ] 🌙

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| ⰞᗅΥ 𐌇ᗅⵎᏦ ᕼ⌷Ꮇⴹ |

Jimin estaba en su habitación, sentado en el suelo con las piernas cruzadas y los ojos cerrados. En la penumbra, distinguió la figura de su lado salvaje: un lobo blanco de ojos azules, sentado con la mirada fija, esperando que se acercara.

Tardaste demasiado en conectar. Debes ser más rápido, o no tendrás lo necesario para ser un Omega dominante.

-No puedo concentrarme. Estoy aburrido, encerrado, y todos los libros del librero son aburridos -se quejó el Omega, sentándose frente a su lobo, quien bufó ante su actitud infantil.

¿Con esa actitud esperas ser un Omega dominante? No te estás esforzando lo suficiente, y necesitamos salir.

-¡Lo sé! No me presiones, solo empeorará las cosas -Jimin abrazó sus piernas contra su pecho, apoyando su barbilla en ellas y haciendo un puchero.

Hazlo de nuevo, vacia tu mente e imagina este lugar.

-Está bien, lo intentaré una vez más -suspiró agotado, cerrando los ojos por un momento. Al abrirlos nuevamente, se encontraba de vuelta en la misma habitación donde estaba prisionero-. Parece que están decididos a volverme loco.

Cállate y continúa.

-No tengo hocico, tengo boca. Tú eres el que tiene hocico. -gruñó molesto a su lobo antes de cerrar los ojos y comenzar de nuevo.

La niebla de sus pensamientos, que bloqueaba su conciencia, poco a poco se disipó mientras imaginaba un bosque con un lago cercano. Su lobo hizo su aparición, aullando y corriendo en su dirección.

Lo lograste, humano tonto.

-¿Qué? -exclamó antes de que pudiera hacer algo, cayendo al suelo con su lobo saltando sobre él y lamiendo su rostro con alegría- ¡Hey! ¡Estás muy pesado! Soy un Omega frágil todavía.

Pronto dejarás de ser frágil, nos volveremos dignos de nuestro Alfa.

-Espera -Jimin se levantó de golpe, provocando que el lobo cayera de espaldas sobre las piernas del humano- ¿Qué Alfa? ¿De qué estás hablando?

He encontrado a nuestro Alfa. Es el pálido de antes, nos cuidó cuando éramos pequeños.

-Espera... ¿Estás hablando de Yoongi hyung? -preguntó con la esperanza de que fuera ese Alfa y ningún otro. Desde pequeño le había gustado mucho su hyung, lo admiraba, pero ahora que lo volvía a ver, su corazón se aceleró como nunca antes.

Así es, es nuestro Alfa.

-Gracias al cielo -suspiró aliviado y se dejó caer sobre el césped, descansando su agotado cuerpo- Siempre lo quise a él como mi Alfa.

Es perfecto, ¿verdad?

-Perfectamente imperfecto. -sonrió y acarició la cabeza de su lobo, quien emitió un sonido parecido a un ronroneo de gato o un chirrido de placer.

Deberías volver y descansar. Mañana continuaremos con lo que sigue.

-Está bien -Jimin encogió los hombros, tratando de quitarle importancia. El lobo se levantó y se alejó, permitiendo que el humano se pusiera de pie y se marchara.

Ten cuidado, hay muchos Alfas peligrosos.

El Omega asintió, cerró los ojos por un momento y, al abrirlos, se encontró de nuevo en la habitación donde estaba prisionero, ya envuelto en la oscuridad de la noche.