La Hija de Elijah

Capítulo 24: Cena

NARRA SOPHIA

Mentir a Lucas fue lo mejor.

O al menos eso es lo que me repito cada dos por tres.

Las cosas iban bien, no quería fastidiarlas, no quería que todo se fuese a la mierda.

Hoy tengo la cena con sus padres, sigo repitiéndome que solo lo hacen porque me quedo aquí y que esto no tiene nada que ver con que me acueste con su hijo.

Claro que por mucho que lo diga mentalmente sé perfectamente que esto no lo hacen por la cortesía de invitar a la "amiga" de su hijo, más bien lo hacen con la intención de conocer a la amiga con derechos de su hijo.

Sentí unos brazos rodearme por detrás y miré a través del espejo enarcando una ceja.

Lucas: Muy guapa, ¿ya has acabado?

Sophia: Sí, solo estoy recogiendo el pequeño desastre que he montado. – una brillante sonrisa adorna su rostro.

Lucas: Perfecto, te espero abajo ¿vale? – asiento mientras el deja un beso en mi mejilla

Sophia: Genial. – le sonrío a través del espejo antes de que él desaparezca con su velocidad vampírica.

Bueno... pues va siendo hora de una pequeña cena con la familia Salvatore.

                                                          .................. ɱ ................

Sophia: Pues yo tomaré un... Romanée Conti de 1945. – el camarero me miró muy confuso.

Camarero: Disculpa, pero sea lo que sea eso no tenemos.

Sophia: Es vino – digo con lógica - ¿Tenéis un Château Mouton-Rothschild 1945 Jeroboan? – me mira aún más confuso negando - ¿Cheval Blanc Imperial 1947? – vuelve a negar y suspiro - ¿Puedes decirme que vinos tienes?

Camarero: Tenemos un Cut Zinfadel 2013, Matanzas Creek 2013 y cape point 2013.

Puse una mueca y niego.

Sophia: ¿Tenéis vieux carre? – vuelve a negar.

Genial. Simplemente genial.

Sophia: ¿Sabe qué? Mejor póngame una coca cola. – el chico asiente apuntando el pedido antes de largarse y Damon suelta un silbido por lo bajo.

Damon: Hay que ser más amable con los camareros, Mikaelson. – se burla y ruedo los ojos.

Sophia: Es increíble que no tengan nada que haya pedido.

Damon: Vivimos en un pueblo, no esperes conseguir lo mismo que en Nueva Orleans.

Sophia: Ni si quiera conocías las marcas.

Lucas: Apuesto a que le has dicho las más caras y esas solo las conocen la gente rica.

Sophia: Rica y con cultura en el vino. – añado - ¿Y cómo sabes que he dicho los más caros?

Lucas: Siempre escoges lo más caro, no conoces la palabra ahorrar.

Sophia: Si la conozco.

Lucas: Les dijiste a tus hermanos que si Josie o Lizzie no les perdonaban podrían comprarle un Yate.

Elena: ¿En serio? – me mira divertida - ¿Un Yate?

Sophia: ¿Qué tiene de malo? Pueden usarlo en verano para ir donde quieran, es útil.

Damon: Sin duda no conocer la palabra ahorrar. – niega – Los regalos más pequeños y sentimentales son los más bonitos.