Mariana, Mar

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El pequeño grupo estaba reunido en el departamento de Osvaldo intentando preparar una digna bienvenida para Mariana mientras su hermano la recogía en el aeropuerto. No sé si "digna" entre en sus estándares; después de todo, solo son streamers. Si no fuera por Ama, esto ya sería un desastre.

⎯Muévelo un poquito más a la derecha⎯ le daba Ama indicaciones a Filis mientras estaba sobre una silla colgando el letrero de "bienvenida" ⎯al otro lado⎯ indicó al primer movimiento de su novio ⎯¡hacia mi derecha!⎯ dio pequeños brinquitos en desesperación.

El chico la volteó a ver ansioso ⎯tenemos la misma derecha, bebi⎯ ladeó la cabeza levemente frustrado. Cuando Ama se propone algo, lo quiere a la perfección.

⎯Cierto bebi⎯ se encogió en hombros apenada y con una leve risilla en su rostro ⎯perdon amor⎯ se acercó a sujetarlo del rostro en cuanto se bajó de la silla y le deposito un tierno beso en los labios ⎯te quedó perfecto⎯ le susurró.

⎯¡Eit!⎯ Rivers le lanzó como resortera un globo desinflado a la parejita de enamorados ⎯dejen de estar empalagociando el ambiente⎯ hizo una mueca de asco y volvió a su labor de inflar globos.

Amairani entrecerró los ojos en dirección a la rubia ⎯Veo muy lenta la producción de globos, Samantha⎯ cuestionó acercándose al par tirado en el suelo rodeados de globos.

⎯Pues me pusiste al que no tiene tripa⎯ golpeó al chico levemente con el codo haciendo que soltara el globo a medio inflar en su boca ⎯eso hace que infle muy lento.

Ama, Roier y cualquier otra persona que haya escuchado ese comentario frunció el ceño ⎯el aire viene de los pulmones⎯ comentó Ama.

Rivers se giró hacia Roier ⎯¿Y de esos sí tienes dos?⎯ levantó una ceja y el chico asintió con la cabeza confundido ⎯entonces es flojo nomás⎯ aventó su cabeza hacia atrás dejándola caer en el sofá derrotada.

⎯Que pendeja estás mi Rivis, me cae⎯ Aldo se burlaba de ella desde el comedor.

Samantha puso en marcha nuevamente su resortera de globos y le soltó un par de latigazos al de lentes. La chica tenía buena puntería ⎯¡Samantha!, deja de estar malgastando los globos⎯ la regañó Ama en cuanto escuchó los quejidos de Aldo y antes de que esta se defendiera, volvió a hablar ⎯ustedes tres⎯ fue apuntando a los chicos: Aldo, Roier y Filis ⎯mejor bajen a la bodega por lo que falta⎯ les indicó y a regañadientes, los chicos salieron en filita del departamento.

⎯Me dijeron pendeja⎯ Rivers hizo una mueca triste y caminó hacia Ari, quien estaba decorando el lugar.

⎯Ay bebé⎯ ladeó la cabeza comprensiva ⎯es que sí lo estás un poco⎯ sonrió traviesa ante la juguetona confesión. Rivers abrió levemente la boca, ofendida ⎯pero no me disgusta que lo estes⎯ sonrió inocentemente, aunque no haya sido una gran justificación. ⎯Ya no te enojes, ven⎯ extendió sus brazos para que Rivers se acercara, y así fue.

Se acercó a Ari y la beso entre murmullos de queja.

Ama se aclaró la garganta, interrumpiendo a las chicas ⎯dejen de estar empalagociando el ambiente⎯ recitó las palabras inventadas por Rivers ⎯y pónganse a decorar⎯ colocó su mano en la cadera y se paró firme. Ari y Rivers rieron ante la actitud de la mayor.

—A la orden cuñada.



Rivers terminó de inflar su último globo, lo amarró y con la palma de su mano lo lanzó a alguna parte de la sala ⎯No entiendo por qué estamos haciendo esto⎯ bufó la rubia, dejándose caer en el sofá ⎯ni siquiera conocemos a la niña esa.

Colapso [rivers]Where stories live. Discover now