Colapso [rivers]

1O. Tanta "ama-bilidad"

Mariana había lloriqueado en los brazos de Samantha como una niña pequeña mientras desahogaba todas esas emociones comprimidas, ahí fue donde Rivers entendió que la chica no era una odiosa-caprichosa como creía, realmente estaba rota.

Era incrédulo pensar que Valdo podría ser la razón de que Mariana estuviese rota. 

Era tonto que la chica culpara a Rivers de eso. 

Pero era comprensible, ¿no?, ¿que hubieras hecho tú si la persona en la que más confías, la que más amas, te deja un día y luego descubres que hay alguien más en su vida?

Rivers tenía tantas dudas en su cabeza.

¿Qué más ocultan los hermanos Palacios?, ¿cuál fue la razón para que Osvaldo dejara a su hermana, sabiendo que él daría su vida por ella?, ¿con qué más cargaba Mariana?

Mariana, Mariana, Mariana...

Por alguna extraña razón, Rivers no podía sacar a la chica de su cabeza. 

El momento en el que sus labios rozaron se repetía una y otra vez.

Una sonrisa involuntaria se formó en su rostro mientras recapitulaba esa escena. A pesar de la discusión y los roces constantes con Mar, ese casi beso había despertado algo dentro de ella. Era una sensación que la atormentaba emocionalmente, aunque no sabía qué significaba.

⎯Te estoy hablando⎯  Ari sacudió el cuerpo de Rivers  ⎯¡Samantha!⎯  había estado ahí, tendida, esperando que Ari terminara de vestirse, probablemente el tiempo de espera fue lo que hizo que Rivers se perdiera en sus pensamientos  ⎯¿estás bien?⎯  preguntó Ari mientras se terminaba de ajustar la ropa. 

Rivers se acomodó en la cama recargándose en la cabecera  ⎯Estoy bien⎯  tomó aire  ⎯solo estaba pensando, en⎯ hizo una pausa insignificante  ⎯en cosas.

⎯¿Cosas como...?⎯  extendió curiosa. 

⎯Nada importante⎯  Rivers agitó su cabeza restándole importancia  ⎯¿terminaste?⎯  escaneó a la chica y su diminuto vestido rosa⎯  Abril se dio la vuelta para indicarle que necesitaba ayuda para atar su vestido, Samantha se arrastró por la cama para llegar a ella y poderla ayudar  ⎯listo⎯  indico cuando termino de atar el corset del vestido. 

⎯Me tengo que ir⎯  se giró hacia Rivers y la tomo del rostro, estaba de rodillas en la cama, con la altura perfecta para depositarle un suave beso en los labios.

⎯¿Nos vemos más tarde para cenar?⎯ preguntó animada Samantha.

Ari hizo un pequeño puchero  ⎯No puedo⎯  Rivers inclinó la cabeza confundida  ⎯quedé de ir a cenar con mis padres a casa de Ama.

⎯Esta bien⎯  respondió Rivers fingiendo estar triste  ⎯lo dejamos para otro día. 

⎯Prometo que te lo compensaré⎯  dijo en un tono coqueto y Samantha sonrió ampliamente.

⎯¿En serio?⎯  fingió sorpresa mientras la sujetó de la cintura  ⎯¿cómo piezas hacerlo?

Ari se inclinó hasta el oído de Rivers  ⎯Tengo un par de ideas⎯  le susurro, haciendo que la piel de Samantha se erizara por completo  ⎯pero ahora tengo que irme⎯  trono un gran beso en la mejilla de su chica y esta hizo un puchero. 

⎯Disfruta de la cena con tu familia, bonita⎯  dijo viendo como Ari salía de la habitación.

⎯Nos vemos mañana Rivis, te amo⎯  grito Abril desde la entrada, y al no recibir respuesta, salió del departamento. Rivers soltó un respiro largo cuando escuchó la puerta cerrarse y se volvió a tirar en la cama.