Un poco de ayuda

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Situación: Miguel apareció en tu ventana, desangrándose, así que lo ayudas.

ADVERTENCIAS: Un poquito de NSFW.

(Aquí el traje de Miguel es de tela, no es un holograma, la diferencia de edad y estatura no es mucha)

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"I want your ugly..I want your disease.."

Estabas en tu escritorio, el clima perfecto, la hora perfecta, todo era perfecto. Lluvia, casi las 2 de la mañana, y un poco de Lady Gaga en tus audífonos, lo único desagradable era tener que estar haciendo tarea en este momento.

"I want your everything as long as is free.."

Tu habitación estaba fresca, sin luces encendidas a excepción de la lámpara de tu escritorio y la luz de la luna que emanaba de tu ventana.

"I want your love..
Love, love, love,
I want your love...ugh.."

Unos sonidos en tu ventana acompañado de una silueta interrumpieron tu pequeño karaoke, volteaste y pudiste ver a Spider-Man o mejor dicho, Miguel. Se veía cansado, retiraste tus audífonos y te acercaste a la ventana. Encendiendo la luz del cuarto de paso.

-¿Es muy tarde para una visita...? -preguntó con la voz algo cortada por el cansancio.

-No, no lo es. -contesté con una media sonrisa.

En cuanto él se adentró a la habitació, la luz iluminó su cuerpo y quedé horrorizada al verlo lleno de heridas y gran parte de su traje sucio y roto. Contuve las ganas de gritar, pues mis padres ya estaban durmiendo.

-Ay carajo, Miguel, ¿que pasó? -lo ayudé a bajar de la ventana y sentarlo en el borde de mi cama.

-Digamos que había un pavo volador del renacimiento con garras largas y..-

-Ni continúes, ya me lo imagino. -suspiré - Voy por cosas para curarte, quítate la máscara y.. lo demás, hazlo más fácil para mi, ¿Quieres?..

...

- ¡Sss! Auch..- El alcohol en la herida lo hizo estremecer.

-Lo siento. -Mis manos estaban algo temblorosas, ¡pues claro! Tengo a Miguel desnudo del torso frente a mi, y la lluvia alcanzó su piel, prácticamente puedo ver como gotas caen lentamente por sus pectorales hasta el abdomen.

-Y..listo, esas fueron todas, los moretones deberían irse con la crema que te coloqué, y estos rasguños probablemente dejen cicatriz. - Me dispuse a guardar todo y regresar el botiquín a su lugar, ya en el baño, tomé una toalla pequeña y regresé con Miguel.

Me senté frente a él nuevamente, ahora más cerca, llevé la toalla a su cabello y comencé a secarlo, noté que cerró sus ojos, al parecer eso lo relajaba.

-Me siento afortunado de tener una enfermera personal. -ahí estaba su sarcasmo de siempre, solté una pequeña risita.

Inmediatamente se esfumó al notar un doble sentido en esa frase.

-Te traeré algo para el dolor..- su presencia me ponía nerviosa, en el buen sentido.

Me levanté de la cama y salí del cuarto, verificando que no hubiera nadie en los pasillos. Encendí la luz de la cocina y tomé un recipiente en el cual calenté agua para un té.

Encendí la estufa al máximo, mientras más rápido se caliente el agua mejor.

Ya con el Té en manos, regresé a la habitación, y encontré a Miguel husmeando en mi sketchbook, aún sentado en la cama, se veía muy a gusto.

-¿Esto es lo que haces en tu tiempo libre? -dijo con una risa de clara burla, estaba viendo los dibujos que hice de él. -Debo decir, que me veo muy bien aquí.

-Sisi, como sea, ya deja eso. -le arrebaté la libreta y la lancé por algún lado. -Toma, esto debería aliviar el dolor. -Esta vez me senté a su lado, y le entregué la taza con la bebida caliente.

Tomó la taza y empezó a beber, cerró sus ojos nuevamente disfrutando del humo caliente que salía, bebía con brusquedad, podía ver como la manzana de adán se movía en su garganta. Al terminar, soltó un largo suspiro.

-Gracias..-dejó la taza en mi escritorio para después voltear y verme con una sonrisa, la sonrisa más hermosa de mi puta vida.

Quedé hipnotizada..había un brillo en sus ojos que nunca había visto, sus lindos ojos marrones, pestañas no muy largas pero rizadas. Siempre hubo algo en él que me mantenía inquieta y no poder sacármelo de la cabeza por varias horas, pensando en ese atractivo rostro con facciones bien marcadas, esos labios carnosos que se veía que besaban como el cielo, y..ese cuerpo fornido, lleno de cicatrices.

Cuando estaba con él, perdía la noción del tiempo, como si solo fuéramos el y yo, y era lo que estaba pasando, solo somos él y yo ahora mismo..

Y tal cual como dije antes, perdí la noción del tiempo al contemplar su rostro, dejando mis ojos enfocados en sus labios. Esto no pasó por alto de él, se fue acercando a mi hasta sentir su aliento cerca, débilmente tomó mi mentón y plantó un beso en mi boca.

Estaba paralizada de los nervios, pero la felicidad interna al darme cuenta que mi teoría de sus besos angelicales si era cierta, no se comparaba. Poco a poco fui recuperando control de mi cuerpo y seguí su beso, cerrando los ojos para disfrutar de este mismo. Disfruté cada segundo de ese beso, en caso de que nunca se fuese a repetir, saboreando sus gruesos labios mientras sentía las famosas mariposas en el estómago.

Miguel con su otro brazo tomó mi cintura, levantándome un poco para dejarme sentada sobre su regazo, con mucho cuidado me apoyé sobre sus hombros, todo esto sin separarnos del beso. Mientras él tenía ambas manos en mis caderas, yo tomaba sus mejillas para profundizar el beso. Llegó un punto donde el beso se volvió ardiente y ahora nuestras lenguas estaban involucradas, un poco de saliva cayó de nuestras bocas.

-No podemos..estas muy débil..-a duras penas me separé del beso, jadeando por la falta de aire.

-Entonces déjame besarte..solo un poco más..-

...

Miguel dormía plácidamente sobre tu cama, podías oír su respiración tranquila y eso te hacía sentir bien, cayó rendido en el sueño en cuanto terminaron su sesión de besos.

Él era un poco más grande que tú, y como tu cama es para una sola persona, la ocupaba casi toda, así que tendrías que dormir en el sillón largo que tenías en tu habitación. Él te había ofrecido dormir encima de su pecho, pero las heridas debían sanar y podría dolerle.

Pero no negabas que esos pectorales se veían como cómodas almohadas.

No importaba, merecía ese descanso, y estabas dispuesta a cuidar de él por el resto de la noche, te sentaste en tu escritorio para terminar tu tarea, colocando tus audífonos nuevamente.

"You know that I want you,
And you know that I need you,
I want a bad, bad romance.."

3:47 am.


...

Ayuda me estoy quedando sin ideas

❝O N E  S H O T S - Miguel O'hara 🕷❞ Where stories live. Discover now