Contigo, hasta el último momento.

Putazos

Veo el horario de las clases, pienso en toda la rutina que conlleva y sólo hago berrinches.

–¿Qué pasa atrás?.–Mi padre pregunta mientras maneja.

–¡Que hueva mis clases!

–No te quejes, muchas niñas quisieran estar en tu lugar en el salón de clases.

–Lo bueno es que comparto clases con mis amigas y mi novio,  se me hará pesado cuando Alan se vaya a la uni.

–Que por cierto será para el siguiente año.–Dice mi papá victorioso.

Jade se despide de sus padres y se baja del auto, sus amigas se acercaron hacia ella con ansias de verla. Ella era una chica popular en su escuela, contaba con cuatro amigas que hacían un equipo irresistible para los chicos y envidiable para las niñas.
 

–Ambar, Marisol, Hidai y Adria, las extrañé!!!

–Nosotras también.–Hablaron en coro abrazando a Jade.

–Entremos, luego nos cierran el portón en nuestra narices.

–Si, cómo la otra vez ¿Se acuerdan chicas?.–Dijo Marisol.

–Si fue chocante, lo bueno que despidieron al portero.– Responde Hidai

–Obvio porque somos poderosas y nadie nos derrota.–Jade abraza a Hidai.

Las chicas se dirigían a su salón pero antes de que llegaran al pasillo fueron atropelladas por una bicicleta, las cuatros cayeron al suelo.

–Lo siento no fue mi intención.–Dijo Ever una persona que vestía gorro, lentes, cubre bocas, una chaqueta y pantalones desgastados con tenis converse negro, la chica se acerca con Jade estirando su mano.

Jade toma su mano y se incorpora, después le jala del brazo.–Te metiste con las chicas equivocadas.–Estaba furiosa.

–Suéltame vieja loca, yo no les debo nada.

Las personas que estaban alrededor se acercaron impactados de que por fin había alguien que se atrevía alzar la voz contra aquellas niñas.

–¡Vieja loca tú!

Adria estaba furiosa estaba a punto de ir a cobrarle su chiste; sin embargo Jade la detiene.

–¿Qué te pasa?.–Adria estaba confundida por la reacción de Jade.

 
–Estoy confundida, ¿Eres una chica?.–Jade intentaba descifrar su rostro, su cuerpo, todo de aquella persona.

–¿Por qué lo dices?.–Pregunta Marisol.

–Su voz es agudo.–Responde Jade.

–¿Acaso no conoces a las tomboy?.–Pregunta Ever furioso.– ¿O no sales de tu burbuja?

Las personas ya habían hecho un círculo encerrado a las cinco personas.

Antes de que pudiera decir algo Jade alguien había interrumpido.

–¿Qué está pasando aquí?.–Dijo un chico con cuerpo voluptuoso.

–Amoor.–Jade corrió hacia él pero el tipo vió aquella persona y se fue contra él.

–¿Qué tienes con mi chica?.–Alan Levantó la mano hacia él, preparado para darle un puñetazo; sin embargo, Jade lo detiene.

–¡Es una chica, Alan!

Alan voltea la mirada hacia Jade y regresa mirando a Ever

–¿Y eso qué? Si se viste de chico pues que aprenda que no es fácil ser un hombre.

 
El puño de Alan va directo a la cara, Ever lo esquiva y le dobla su brazo aventándolo al suelo.

–¡Cuidado!

Una chica le advierte a Ever, da media vuelta pero antes de que reaccione Alberto amigo de Alan le da un puñetazo en el ojo izquierdo, calló al suelo dejando escapar un agudo chillido.

–A la…¡Si es mujer!.–Dijo Alberto sorprendido.