Contigo, hasta el último momento.

Mecánica cuántica

Lina

Saborear sus labios suaves, tocar sus brazos, sentir sus latidos, tenerla cerca de mi, me hacía feliz.

me llegó mis inseguridades, no sabía besar así que me alejo de ella.

–Lo siento debo irme.–Por suerte Ever no alcanzó a detenerme.

Llego a casa, no estaba nadie, prendí la bocina, empezó a reproducir una canción de Taylor Swift-lover
Recordé aquel momento que nuestros labios se juntaron, toqué sus suaves labios, el sabor, lo caliente que estaba su boca, ¡Todo fue mágico!

Me tapo la cara con la almohada y gritó la adrenalina que tenía acumulado. Si, admito que Ever me estaba empezando a gustar.

JADE

El sábado por la tarde
No pude resistir con mis sentimientos confusos, le mandé un mensaje a mi novio.

Mensaje por Whatsapp:

Jade: Necesito verte, mis padres no estan en la casa...       3:54 pm

Alan: ¿Quieres hacer algo atrevido?, para llevar los condones...   3:57 pm

Jade: Si, y también te extraño :( ya no me quieres.    4:00 pm

Alan: Sabes que te amo mucho, pero he estado ocupado entrenando... Te veo en 45 minutos, besos.   4:05 pm

Había pasado cuarenta minutos desde el último mensaje que me mandó. El timbre de mi casa sonó varias veces, salgo de mi habitación <<espero que sea Alan>> fijo mi vista por la mirilla de la puerta, veo a Alan con su chaqueta de cuero café acompañado de unas flores de colores, sonreí al ver ese detalle. Abro la puerta y lo abrazo colgandome de él.

–Te extrañé.–susurré.

–Igual.– Me abraza.

Lo guíe hasta mi habitación, empezamos a besarnos con pasión y un poco de desespero por mi parte, desabroché su cinturón luego la cremallera de su pantalón, él ya me había quitado mi bra, poco a poco me acosté en la cama.

–¿Y si lo hacemos sin condón?– Me susurra al oído.

No estaba segura, trago saliva.

–Te tomas una pastilla, lo compré en el camino.– Replicó

–Esta bien...

Cerré los ojos dejándome llevar por mis cuatros sentidos. Mi placer había aumentado, después de unos segundos ya estaba gimiendo, Alan me acariciaba mi espalda, mis pechos, besaba mi cuello, hacia todo eso mientras me penetraba. Empiezo a imaginar que Ever me estaba haciendo el amor, su cuerpo haciendo fricción con él mío, sus manos acariciando mi cuerpo, estaba tan adentro de mis pensamientos que no me di cuenta quien estaba realmente enfrente de mí.

–Gime.–Estaba hipnotizada por mis pensamientos.

–¿Qué?

–¿Qué?

Salgo de mi trance, abro los ojos, él me observa confundido.

–Lo siento... estoy nerviosa.–Miento.

Él me sonríe con ternura. piensa que estoy vulnerable.

–Tranquila no pasa nada.– Me consola.

Aún no había pasado ni cinco minutos y él todavía no llegaba a su clímax, el resto del tiempo ya no lo disfruté estaba consciente de quien estaba encima de mí. Desde que conocí a Ever me hizo recordar algo que estaba  reprimiendo por mucho tiempo.

Ever

Al día siguiente amanecí peor <<No debí hacer esfuerzo>> Me dolía demasiado el abdomen, mi padre me dio unas pastillas analgésicos, no pude acompañar a Lina para hacer la tarea de historia y no podíamos retrasarnos más. Soy tan necia que a veces no mido las consecuencias.