ᴸᵒ ⁱⁿᵉᵛⁱᵗᵃᵇˡᵉ - [ChenWei]

十四 : Siempre tan oportuno.

Recibí una llamada del doctor Du, me solicitaban en el hospital rápidamente.

Deje todo lo que estaba haciendo, tome mi mochila y salí rápidamente. No me daba tiempo a pedir un taxi, así que fui corriendo hasta allí; llegue antes de lo esperado. Le había escrito a Chen Yu una vez baje por el ascensor, diciéndole que me llamaron para presentarme en el hospital.

Había obtenido su número esa última noche que nos vimos.

Me había tomado unos días, diez para ser exacto, para pensar en lo que paso en el hospital, la suma de todos ellos; aun seguía recibiendo comentarios hirientes contra mí y el hospital. El oficial Chen Yu me ha dicho que no les hiciera caso, pero siguen doliendo. Me ha ayudado a distraerme en estos días, era agradable ser cuidado por alguien que siente lo mismo por ti, aunque no éramos nada, aun.

Estos días él estaba muy ocupado, así que me llama en las noches para saber cómo estoy, también en las mañanas para saber si dormí bien; algunas veces viene a verme por unos minutos. Deja a su compañero Yang Yi esperando en el auto un rato, hablamos un poco y luego vuelve al trabajo.

Había pensado dejar mi trabajo en el hospital, pero hablar con Chen Yu me hizo cambiar de idea. Aun así leía los comentarios que lanzaban contra el hospital, muchos estaban siendo desprestigiados por mi culpa. No sabía cómo enfrentarlo, pero lo haría. No me sentía completamente listo para volver y dar la cara, al menos eso pensaba antes del llamado que recibí ahora.

Había estado ignorando los constantes llamados, iría a resolver el problema.

Pero tenía miedo.

Al ver las puertas del hospital ingrese, recuperando el aliento, camine hasta el ascensor. La espera fue corta. En cuanto las puertas se abrieron camine hasta la oficina, encontrándome con Gao Xi y el doctor Yan, quienes se sorprendieron al verme. Gao Xi se levantó de su asiento, acercándose unos pasos. – Gu Wei, finalmente apareciste – dijo con alivio.

Asentí, acercándome más a ellos. El doctor Yan comenzó a lanzarme sus comentarios, algunos un poco molestos y otros un poco hirientes, me lo merecía. Gao Xi lo hizo callar. El Dr. Yan solo se cerró la bata y se cruzo de brazos. – Perdón por haber causado problemas estos días –dije.

El doctor Yan me grito: si eso era todo, siendo callado por Gao Xi de nuevo.

– Lo sé, – continúe. – Mi problema está afectando a todos en el hospital. Solo pensé en mí mismo, no pensé en los demás. Es mi culpa. Quiero disculparme ustedes, espero que puedan perdonarme.

– Gu Wei, estoy feliz de que lo hayas pensado bien –dijo Gao Xi.

– He vuelto para resolver el problema – dije mirando a Gao Xi, luego los mire a ambos. –Prepare activamente los materiales requeridos por el equipo de investigación. También podría necesitar tu ayuda, doctor Yan.

–No te preocupes por eso –dijo Gao Xi. – Solo déjalo en nuestras manos.

Asentí. Vi como el doctor Yan comenzaba a murmurar que algo debía estar mal con él, si se involucraba en esto. Él volteo, dándome la espalda. En ese momento llego una enfermera muy agitada, voltee rápidamente al escuchar lo que dijo. – El paciente de la cama dieciséis tiene una hemorragia abdominal masiva, y ha sido enviado a quirófano.

Los tres salimos, dirigiéndonos rápidamente hacia el quirófano. Vimos al doctor Du con los padres del paciente, quienes rápidamente se acercaron a nosotros. El doctor Du dijo que su condición no es muy optimista, en cuanto le pregunte como estaba el paciente. La madre se abalanzo hacia el doctor Yan, pidiéndole que lo salve; su esposo se le unió poco después pidiendo lo mismo. El doctor Du finalizo la llamada que había atendido, preguntando quien de los dos le haría la cirugía al paciente.