ᴸᵒ ⁱⁿᵉᵛⁱᵗᵃᵇˡᵉ - [ChenWei]

结语 - Epilogo

Capitulo Final

- No tendrá Extras -

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El día que nunca creí que llegaría, inevitablemente, llego: llevaría a Chen Yu a que conozca a mis padres y anunciarles que nos casaríamos. Estaba tan nervioso por no saber cómo terminaría esto, que creí que vomitaría de los nervios.

Los padres de Chen Yu se vieron un poco sorprendidos, cuando me vieron entrar de la mano con su hijo. Chen Yu no me soltó en ningún momento, demostrando lo mucho que me amaba y cuanto quería que sus padres me aceptaran. Creí que me moriría cuando él les mostro que me había pedido matrimonio, que había aceptado su propuesta, alzando nuestras manos para que ellos las vieran para que vieran nuestros anillos.

Ellos se quedaron callados por unos segundos, eternos para mí.

Luego nos felicitaron, aunque no lo demostraron mucho por los gestos de sus rostros, pero lo habían aceptado. La cena fue mucho más calma, al menos para mí; apenas había hablado, pero ellos me integraron a las conversaciones. El padre de Chen Yu y él fueron los que más hablaron, casi en su mayoría del trabajo policial, fue agradable que su madre me preguntara por mi profesión y lo que había estudiado.

Luego del postre nos retiramos, siendo nuevamente invitados a su casa para almorzar, algún otro día antes de la boda. Chen Yu me aseguro que lo habían aceptado, aunque no lo demostraran. Ellos eran felices, al saber que finalmente él había encontrado a la persona con la cual quería pasar el resto de su vida.

Eso me hizo sentir mucho mejor.

Ahora era el turno de mis padres, a quienes ni siquiera les había dicho que salía con Chen Yu, un policía antinarcóticos, desde hace casi un año y que nos íbamos a casar pronto. Casi prefería volver al día en el que conocí a los padres de Chen Yu, o a sus compañeros y amigos de la estación de policía, quienes nos habían organizado una gran fiesta, que venir a darles la noticia a mis padres.

Chen Yu había manejado hasta aquí, siendo guiado por mí. Estábamos esperando a que mis nervios se calmaran; eso no era algo cercano actualmente. Hacía más de diez minutos que habíamos llegado, pero no salimos del auto. Le pedí a Chen Yu que esperara, que me diera tiempo para juntar el valor de salir y enfrentar lo que se venía.

Le confesé que ni siquiera les había dicho a mis padres que salía con él, hace tantos meses, y que además nos íbamos a casar. Él se mostro muy comprensivo cuando me ofreció su mano para que la apretara, demostrándome que estaba allí conmigo. Me gire para verlo, él se acerco a mí, unimos nuestras frentes sin decir nada. – Todo estará bien –dijo en voz algo baja.

Asentí, aunque no estaba tan seguro.

Mis padres eran completamente diferentes a los de Chen Yu, lo había notado cuando fuimos a verlos. A ellos aunque les costó un poco, y les impacto la noticia, lo aceptaron porque aman a su único hijo. Según su madre, yo no era mal partido. Era el mejor que él pudo tener. Era un doctor y había sido el mejor de mi clase, lo había ayudado en el caso y había soportado mucho por él.

Según su madre: no habría otro que se preocupe por él, como yo lo hago.

Eso al menos me había hecho sentir mejor, liberar la tensión que tenía en mis hombros por ir a darles la noticia de que nos casaríamos, sin una reunión previa. Sus compañeros y amigos también me recibieron bien. Admiraron que alguien como yo aguantara a alguien como Chen Yu, conociendo su carácter; eso me hizo reír tanto esa noche, y fue una de mis favoritas.

Ahora estábamos aquí, y trataba con todas mis fuerzas de no tener un ataque de pánico, de no decirle a Chen Yu que arrancara el auto y nos fuéramos. Sentí una suave caricia en mi mejilla. – ¿Quieres que nos vayamos? –preguntó Chen Yu. Negué con la cabeza. Sería peor si me fuera y no les diera la noticia.