Capítulo 6

9.4K 994 346
                                    

NOAH.

Aunque hubiera deseado poder seguir conociendo a Madison, Hunter me llamó esa noche por una emergencia. La emergencia es que le había ido mal en su cita. Normalmente le hubiera dicho que lo viéramos por la mañana, pero él llamó. Él nunca llama. Busqué a Julie para comentarle rápidamente lo que había pasado y me fui, Hunter no estaba demasiado lejos y llegó en su moto.

—Lamento molestarte. —Él me entregó el casco extra que llevaba.

—Lo considero como devolver la mano luego de todo lo de Carrie. —Subí con algo de incomodidad por mi falda y abracé su cuerpo, mi mayor miedo era caerme.

—¿Quieres ir a dar una vuelta?

—No tengo muchas más opciones. —Lo molesté antes de que él partiera, abracé su cuerpo con más fuerza.

Él no era un loco que iba a toda velocidad, menos cuando íbamos los dos, estuvimos un rato recorriendo la ciudad, luego de un rato lo disfrutabas bastante. Aunque nunca me atrevería a manejar una motocicleta. Eso también parecía ser relajante para Hunter, pero sólo me pedía acompañarlo cuando no quería estar solo con sus pensamientos. Al llegar a nuestro edificio subimos hasta mi departamento y él se quitó su casco arreglando su cabello, yo lo imité, siempre el casco me dejaba un desorden tremendo y nunca podría verme bien como él quitándomelo como si estuviera en un comercial o una película.

—¿Quieres una taza de té? —Pregunté cuando se sentó en el sofá, pero asumí que era un no cuando llevó sus manos a su cara. Él estaba llorando.

Hunter fue al primer hombre que vi llorar sin miedo a que lo vieran.

—No lo entiendo, Noah. ¿Hay algo mal en mí? —Me senté a su lado y posé mi mano en su espalda. —Estoy cansado.

—¿Puedes decirme qué paso?

—Lo de siempre, salí con esta chica, pero cuando intentó besarme escapé. No es que no me gustara, pero no me causaba un interés hacerlo. —Él limpió sus ojos. —No puedo hacerlo, casi nunca puedo hacerlo. Desde que terminé con Zoey hace dos años no puedo hacerlo. Te juro que lo intento.

—No tienes que forzarte, son cosas que pueden pasar. Tú la amabas.

—Pero ya no lo hago. Estoy seguro de eso, sólo la recuerdo cuando me pasan estas cosas. Es como si nadie más me causara interés, pero no es eso, porque las chicas son lindas y agradables, pero cada vez que intentan algo más siempre escapo porque no lo siento correcto. —Por mucho tiempo pensé que Hunter en realidad era gay, no era el estereotipo de un chico heterosexual que se veía como él, pero no era eso. —Empiezo a confirmar que hay algo raro en mí.

—Todos somos diferentes, Hunter.

—No lo entiendes, Noah. Crecí en un mundo en donde siempre me dijeron cómo tenían que ser los hombres, incluso como debíamos pensar, sobre todo de las mujeres. Si bien mi madre y mis hermanas siempre me enseñaron a no seguir completamente eso, el no hacerlo, me hace sentir diferente. Pero para mi ser diferente no es algo bueno. No quiero ser así. No quiero sentirme así. —Sus lágrimas volvieron a salir. —Como odio esto. Sé que quizás no es un gran problema, pero llevarlo por tanto tiempo me hace sentir estancado.

—Hunter, creo que te estas culpando demasiado por algo que no puedes controlar. Hay que entender que existen cosas en nuestras vidas que simplemente no podemos controlar, la gente cree que cuando se trata de ti es algo que puedes controlar porque tomas tus propias decisiones, pero es una gran mentira. Ambos sabemos que no es así, hay cosas que simplemente van más allá de nuestro poder y no está mal sentirte triste por eso, por el contrario, parece lo más lógico como reacción. Pero no dejes que eso te detenga, quizás ahora no funcionó, pero quizás la próxima vez sí. Y si nunca funciona, sabes que eso en realidad es más común de lo que alguien podría imaginarse. No por ser un hombre tienes que regirte por lo que esperan de ti, creo que en el momento que aprendiste a tejer dejaste de guiarte por eso, ¿no?

Caminos a Ti.Where stories live. Discover now