Capitulo #115

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Galia, Raúl, Alexis, Armando y Alexander estaban sentados en el comedor, desayunando.

—¿Y Eduardo no va a bajar? —preguntó Alexander.

—Dolores le va a subir el desayuno, ya ven que no quiere bajar —contestó Galia.

—¿Que no estaba yendo a terapia?

—Lo está, pero todo es un proceso, Alex. No va a estar bien de la noche a la mañana.

—No me gusta verlo así.

—A nadie, hijo —dijo Raúl.

—¿Y qué han sabido de lo de Melanie? —preguntó Armando.

—Nuestros abogados ya están trabajando en el caso —respondió.

—¿Ella va a volver pronto? —preguntó Alexis.

—Esperemos que sí, campeón, eso es lo que más queremos.

En lo que estaban hablando, Eduardo se acercó al comedor.

—Yo también quiero que mi hermanita regrese pronto a casa —dijo Eduardo.

Todos lo voltearon y se quedaron muy sorprendidos porque Eduardo estaba vestido con su uniforme de fútbol.

—¿Qué haces así vestido, mi rey? —se levantó Galia y besó su mejilla.

—Le dije a mamá Dolores que voy a desayunar aquí con ustedes, en lo que me voy a mi partido de fútbol.

—¿Vas a jugar? —preguntó Alexis, sorprendido.

—Solo es un entrenamiento. Estuve hablando con mi entrenador y algunos del equipo, ellos saben lo que me pasó y, dijeron que si quería ir, fuera, dicen que me necesitan y que soy muy importante para el equipo.

—Ay, mi amor —Galia lo abrazó—. No sabes lo feliz que me hace escuchar eso.

—También el lunes voy a regresar a la universidad.

Galia sonrió aun más.

—Al fin buenas noticias en medio de tantas desgracias que nos han pasado —volvió a besar la mejilla de Eduardo.

—Tu equipo sabe quien es el mejor, por eso dicen que te necesitan —dijo Raúl.

—Gracias, Raúl —le sonrió.

—Ya le hice al futbolista más guapo, su desayuno favorito —dijo Dolores, dejando su plato de comida sobre la mesa.

—Se ve delicioso —dijo Eduardo, sonriendo—. Gracias, mamá —besó su mejilla y luego se sentó

—Si necesitan algo más, me avisan. Permiso —se retiró.

—Mi amor, yo estoy feliz de que quieras volver a jugar e ir a la univerdad, pero... ¿sí te sientes preparado?

—Sí, estoy preparado, mamá —asintió, comiendo.

—Es que tú sabes que hay personas muy crueles, mi amor, personas que se burlan de otras y que no les importa dañarlas. Yo no quiero que te hagan daño, por eso primero debes estar preparado antes de enfrentarte al mundo.

—Mamá, yo sé que habrá personas que se burlen de mí y que habrá otras a las que les daré asco, como a Diana, pero debo hacerlo, debo enfrentar mi nueva realidad.

—Está bien, mi amor, si eso es lo que quieres, yo te apoyo en todo —sonrió.

—Todos te vamos a apoyar, Eduardo —dijo Raúl.

—Super sí —asintió Alexis.

—Sí, porque somos una familia, la familia siempre debe estar unida —dijo Armando.

Contigo quiero enfrentar al mundo entero (Libro #2)©✔Onde histórias criam vida. Descubra agora