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SeokJin se estacionó frente al restaurante y sonrió demasiado feliz de estar ahí.

Desabrocho su cinturón de seguridad y se giró para ver a Jayoon, quien estaba en su sillita de seguridad, al verlo soltó un pequeño grito y movió sus piernitas.

— ¿Estas feliz de estar aquí? — preguntó SeokJin estirando su mano para tocar el pie descalzo de Jayoon—. Pero aún no sabes donde estamos. — agregó divertido—. No importa, también estoy feliz. Voy a presentarte a mi primer bebé. No debes sentirte celosa porque este bebé nos dio la linda casa en la que vivimos. Exacto, no la compró tu lindo papi. — completo entre risas, Jayoon soltó un grito.

SeokJin bajó de su camioneta, después de la llegada de Jayoon cambió de auto. Ahora usa una camioneta con espacio suficiente para todas las cosas de Jayoon.

Abrió la puerta de los asientos traseros y se agachó para besar repetidas veces las mejillas de Jayoon, quien tocaba su rostro y reía.

— Qué linda eres. Te amo mucho. — murmuró mientras besaba su rostro—. Vamos, tenemos que trabajar.

Cargo con cuidado a Jayoon y la sacó de la camioneta.

Jayoon miraba todo con curiosidad o eso es lo que pensaba SeokJin.

Cerró la puerta de la camioneta y avanzó hasta el restaurante, abrió la puerta y SeokJin no podía evitar sentirse demasiado feliz de estar ahí, aunque esté solo de visita.

Extraña su restaurante.

El personal lo tomó por sorpresa cuando entró.

Todos salieron sosteniendo globos, flores, confeti y carteles dándole la bienvenida a él y a Jayoon.

Jayoon gritó primero asustada y después se emocionó al ver tantos colores y estiró sus manitas en diferentes direcciones porque no podía decidir qué globo quería.

Uno a uno se acercaron para saludar a SeokJin y darle un vistazo a Jayoon, tenían curiosidad, aunque todos fingían que no habían visto la foto que filtró Hannah hace unos meses, lo habían hecho, así que tenían curiosidad sobre cuánto había crecido en esos meses.

— Oficialmente les presentó a la futura heredera de mis restaurantes. — dijo SeokJin mirando a Jayoon y besó su mejilla—. Jayoon. O tal vez la haga trabajar antes de heredarlos, aún no lo sé. — dijo haciendo reír a su personal.

SeokJin había decidido visitar el restaurante antes de abrir, aún no va a regresar, le encantaría, pero aún no quiere dejar a Jayoon.

Esa decisión a veces lo hace sentirse sorprendido porque antes de Jayoon no podía imaginar ninguna situación en la que él dejara su restaurante. Incluso cuándo estaba enfermo asistía, aunque se la pasaba en su oficina, pero estaba ahí.

Hoseok también está limitando demasiado su agenda de trabajo para continuar pasando tiempo con ambos, no quiere perderse nada. Solo sale de viaje una vez cada 2 meses y no más de una semana.

Los primeros cinco meses junto a Jayoon han sido increíbles aunque les costó un poco adaptarse a sus horarios de sueño, pero ambos están encantados de estar con ella.

Por supuesto que ha sido demasiado pesado, en especial porque no han contratado a nadie para que les ayude con Jayoon al menos unas horas al día, pero ambos tomaron la decisión de cuidar de ella tiempo completo al menos durante el primer año, después tal vez busquen algo de ayuda para ajustar sus agendas.

Lo que ambos quieren evitar es que Jayoon crezca como ellos, siempre estuvieron rodeados de amor y personas que se preocupaban por ellos y hermanos, pero sus padres por trabajo estaban fuera mucho tiempo.