DROPPED 1 - HEAVEN (SUBIENDO NUEVA VERSIÓN)

Capítulo 34

 Jared

Retuerzo mi teléfono entre mis manos y dejo el de Madison donde estaba. Joder, no debería de haberme separado de ella desde que Walter me dijo aquello, Walter... Él lo sabía, y me avisó.

"Estúpido gilipollas" espeto en mi mente.

¿Cómo no pude darme cuenta antes?

Antes de empezar a romper las cosas de la habitación de Madison salgo por la ventana y vuelvo a mi coche. Conduzco a la máxima velocidad, sin importarme las consecuencias que tenga. Necesito saber dónde está, necesito saber que está bien, y me importa una mierda si tengo que volver a matar a alguien para volver a verla, ya lo he hecho en anteriores ocasiones.

En menos de diez minutos llego a sus almacenes, este imbécil se va a enterar de quién es Dropped. Bajo del coche y entro en el almacén más grande, donde doy por seguro que estará. Observo a uno de sus hombres guardando cajas de madera en un camión.

-¿Dónde está Walter? –lanzo en cuanto estoy lo suficientemente cerca de él para como para que me escuche.-

-Arriba. –dice.-

Subo por las escaleras metálicas y encuentro con una única puerta cerrada, la abro y lo encuentro guardando ropa en una maleta. Me mira.

-Dropped, que sorpresa, no esperaba verte aquí. –Dice dejando de hacer la maleta.-

-¿Dónde está? –Pregunto furioso acercándome a él.- Dime dónde está o juro que te vuelo la cabeza.

-Muy típico de ti, Dropped ¿Qué conseguirás si me matas? Menos información, soy el único que podría darte lo que necesitas escuchar, pero adelante, mátame.

-Dime dónde está y los dos saldremos ganando. –Digo mientras lo cojo del cuello de su camisa.-

-Créeme, no hay manera de que yo gane este juego.

-¿Elsa la tiene, verdad?

-Sabes que es una chica vengativa y hará lo que sea hasta verte hundido.

El pelo rubio de Walter está ligeramente despeinado, bajo sus ojos verdes hay unas ojeras enormes. Parece como si no hubiera dormido durante días.

-Estás cavando tu propia tumba, Walter. –Espeto.- Sólo tienes que decirme dónde está Elsa y saldrás con vida

-Mi tumba está cavada desde hace tiempo, Dropped. El día de mi muerte ha estado planeado desde hace tiempo.

Mis nudillos no tardan en estamparse contra su mandíbula. Necesito respuestas no más frases metafóricas. Lo empujo hasta que su espalda choca contra una pared, me acerco hasta quedar a unos milímetros de diferencia y gruño:

-No me toques las pelotas, Walter. Si quieres hacerme daño ya lo has hecho, pero deja en paz a Madison.

-No pienso abrir la boca. –Espeta.- Puedes matarme si es lo que quieres, pero seguirás sin saber dónde está.

Saco la pistola que tenía guardada y le pego en la frente dejándolo inconsciente. No pensaba que me haría sacarla.

Lo cargo en uno de mis hombros y bajo por las escaleras en busca de mi coche. Uno de los chicos que está abajo me ve y se altera.

-¿Qué haces? ¿Qué le has hecho a Walter? ¡Que alguien llame a la policía! –Grita.-

Aprieto el gatillo de mi pistola y la bala va directa a su pierna. Se cae al suelo retorciéndose de dolor. Me aseguro de que no hay nadie más en el almacén y entonces voy hasta mi coche, dejando a Walter en los asientos traseros.