DROPPED 1 - HEAVEN (SUBIENDO NUEVA VERSIÓN)

Capítulo 12 (NUEVA VERSIÓN)

Jared se ofrece a llevarme a casa cuando las clases terminan, ya que ni Kate ni papá pueden recogerme por sus diversas causas.

Le gusto. Le gusto más de lo que me puedo imaginar. Y él a mí también me gusta, muchísimo.

Sí, Jared me gusta. Y es algo que llevaba sintiendo desde hace un par de días, desde el momento en el que se abrió a mí un poco.

No es el chico malo. Es un chico que ha sufrido mucho, un chico que vive aferrado al pasado. Sin embargo, parece estar intentando deshacerse de él.

Jared aparca el coche enfrente de mi casa. Nos quedamos en silencio, hasta que finalmente él lo rompe:

-Madison. –Murmura. - Esta tarde son los combates.

Casi se me había olvidado de que hoy era viernes. Casi.

- ¿Vas a competir hoy? –le pregunto, aunque sé la respuesta. -

-Sí. –Me dice. - ¿Vas a estar por allí? –me pregunta, algo nervioso. -

- ¿Te gustaría que fuera? –le pregunto, con curiosidad. -

-Quiero que esta vez lo veas entero. –Confiesa. - Quiero que ves qué es lo que hago y hasta dónde soy capaz de llegar.

No respondo. Permanecemos mirándonos a los ojos. Lleva una de sus manos a una de mis mejillas, acariciándola con suavidad.

-No hay nadie en casa. –Le digo. - ¿Quieres quedarte?

Una sonrisa de lado se forma en sus labios, y entonces se acerca a mí, plantando un suave y rápido beso en mis labios.

-Está bien. –accede. -

Salimos del coche y entramos en mi casa. Con el dinero que me ha dejado mi padre, pedimos un par de pizzas para comer.

Cuando cuelgo el teléfono siento sus manos rodear mi cintura.

Deja un par de besos sobre mi mandíbula, para ir bajando lentamente hasta llegar a mi cuello.

Volviéndome loca por el tacto de sus labios, me doy media vuelta y busco su boca para acabar con sus juegos. Llevo mis manos a su nuca, acercándolo todo lo que puedo a mí.

Su lengua se cuela en mi boca, y rápidamente encuentra a la mía. La desesperación empieza a apoderarse de mi cuerpo.

Retrocedemos un par de pasos, hasta llegar al sofá. Con cuidado, dejamos nuestros cuerpos caer sobre éste.

Sus manos me tiran sobre la cama, sin cuidado alguno. Recorren todo mi cuerpo, con ansia.

No digo nada. Permanezco callada, dejando que haga conmigo lo que quiera, temiendo, aun así, que será la peor noche de mi vida.

"No, Madison. Él no es Jeremy."

Sus labios bajan por mi cuello, hasta llegar a mi clavícula.

Continúa bajando ferozmente. Puedo sentir su ansia. Llega hasta mi ombligo y entonces lleva sus dedos al borde de bragas.

-Para... -murmuro, pero lo hago demasiado bajo y no me escucha. Continúa dejando besos en mi cuello. - Para, Jared. –le digo, esta vez más fuerte. -

Me mira con preocupación.

- ¿Estás bien?

-No puedo seguir. –Le digo, levantándome del sofá cuando me deja espacio para hacerlo. -

Me dirijo hacia la cocina, avergonzada por lo que acaba de pasar.

¿Por qué pienso en Jeremy? ¿Por qué no puedo olvidar aquella noche de una vez?