15. Encontré el amor.

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Hacía mucho frío por lo que tuve que tallarme los brazos en busca de un poco de calor, ni siquiera una blusa con mangas me salvó del extraño clima. En general, mi ciudad se caracteriza por ser un horno.

Caminé rápidamente en dirección a la casa de Dante. Había llegado el día. Veinticinco de diciembre. Eran alrededor de las seis de la tarde. Me adentré en su porche y toqué la puerta. Su madre me recibió, la saludé tanto a ella como a su padre, el cual estaba en la sala.

—Los chicos están arriba. Están preparando los fuegos artificiales y otras cosas que quieren lanzar— anunció el hombre con una sonrisa—. Por cierto, sin romance entre ustedes. Ni An con Nick ni tú con Dante —advirtió, arqueando una ceja.

—No te gusta Dante, ¿no es así, Sophie? —intervino Liliana, madre del chico.

—No —insistí. ¿Cuántas veces me han interrogado con eso? Él no me agrada mucho que digamos, sería raro que me gustara. No soy una persona que una cara linda y una personalidad cambiante provoquen que desee arduamente a un chico.

—¿Ves, Étienne? Me parece que quieres que ellos sean novios, ¿no?

—Me descubriste. El resto de las chicas que están enamoradas de mi hijo son geniales, pero Sophie me transmite una sensación diferente —expresó el hombre pensativo—. Es la misma sensación que sentí al conocerte, Liliana. Destacan de alguna forma, no sé cómo explicarlo.

La mujer sonrió y se ruborizó ligeramente. Después me dijo que me reuniera con los demás, subí las escaleras por ese motivo mientras meditaba las palabras de su padre. ¿Dante y yo? Somos poco compatibles. Asimismo, creo que Dante se vería mejor con una chica como An, tanto en personalidad alegre como en apariencia memorable. Él y yo somos iguales. Si hablamos matemáticamente, negativo por negativo da positivo, pero no creo que funcione en la realidad.

—¡Me alegra que hayas venido, Sophie! —exclamó An al mismo instante que me abrazaba de modo que el aire comenzó a faltarme. Coraline, Nick, Alexis y Dante nos observaron con una sonrisa. An se apartó, permitiendo que Dante me tomara del brazo y me guiara hasta el patio. Alexis y Nick cargaban una caja cada uno, en ella, seguramente se encontraba la pirotecnia. Por otro lado, Coraline y An platicaban en voz baja mientras nos seguían.

Tan pronto salimos de la casa, volvió a darme frío e instintivamente froté mis brazos.

—¿Quieres mi bufanda? —inquirió Dante, extendiéndola. Era de color rojo.

Antes de que pudiera negarme, el chico la enredó en mi cuello. Le agradecí en un susurro. Él me dedicó una media sonrisa antes de irse a ayudar a los chicos. Coraline y An se acercaron a mí y las tres analizamos como ellos alistaban los fuegos artificiales.

—¿Te gusta Dante? —soltó Coraline. Fue nuestra primera conversación directa y era ridículo que comenzara de esta manera. ¿Acaso era una moda absurda preguntarme u insinuarme eso?

—No —afirmé, restándole importancia.

—Es una lástima —susurró ella—, se verían hermosos juntos.

—No tanto como Alexis y tú —apunté y esperé su reacción.

Coraline rio y negó con la cabeza.

—Él es mi mejor amigo y no creo poder verlo de otra manera. Seguro él piensa lo mismo.

Yo no estaba de acuerdo, obviamente Alexis sentía algo por ella. Es una pena que Coraline no se percatara de ello.

—¡Vengan, chicas, estamos a punto de lanzarlos! —llamó Dante a gritos. Las tres nos acercamos al lugar donde se hallaban. Nick prendió fuego a uno de los extremos de un cohete. Dante, Alexis, An y Coraline lo imitaron con su propio cohete. Me incliné y prendí el mío.

Nos alejamos al mismo tiempo y aguardamos. En menos de un minuto, el cielo se vio cubierto de diversos colores. Lo único que me molestó fue el intenso sonido, sin embargo, la vista me reconfortó. Azul, verde, rojo, rosa, morado y amarillo. El cielo se tiñó de aquellos colores, asemejándose a una pintura. Alexis tomaba fotografías, el resto mirábamos hacia arriba con asombro.

—Tengo frío —anunció Dante, apareciendo de repente a mi lado—. Voy a entrar, ¿quieres venir?

—Claro —acepté. Los fuegos artificiales eran preciosos, pero sabía que si continuaba afuera, me resfriaría.

Caminamos en silencio hasta la sala, sus padres ya no estaban ahí. Probablemente fueron al segundo piso. Dante comenzó a subir las escaleras y me pidió que lo siguiera. Así lo hice. Me senté en su cama y dirigí mi mirada hacia su rostro. Tomó una laptop de su cama y de un cajón de su escritorio extrajo una memoria. La conectó en la computadora y hurgó en los archivos del pendrive.

—¿Qué clase de música te gusta? —preguntó mientras me observaba por el rabillo del ojo.

—El rock clásico, pero ahora prefiero algo más tranquilo —sugerí, encogiéndome de hombros. Él asintió y dio play a una canción. No dijo nada, simplemente se sentó en el suelo a un par de metros de mí. Sus ojos no se apartaron de los míos. Escuché un piano siendo tocado con delicadeza. Abrí los ojos como platos, justo en el momento en que Dante comenzó a cantar.

«I'll use you as a warning sign.

That if you talk enough sense then you'll lose your mind.

I'll use you as a focal point.

So I don't lose sight of what I want.

I've moved further than I thought I could.

But I miss you more than I thought I would.

I'll use you as a warning sign.

That if you talk enough sense then you'll lose your mind».

Su voz desprendía sentimiento y una especie de calidez que me obligaba a oírlo atentamente.

I found love where it wasn't supposed to be —él me sonreía a la vez que entonaba la letra, por alguna razón, el mismo sentimiento extraño invadió mi pecho nuevamente. Aquel que estoy segura que refleja odio.

Right in front of me. Talk me sense to me —continuó. Sus pupilas se notaban dilatadas y parecía nervioso. Tal vez le dé miedo cantar con público. Se detuvo abruptamente y dejó que la voz del cantante fuera la única que resonara en la habitación.

—La canción es bonita y romántica, ¿quién es la afortunada? —inquirí en son de broma.

Él se encogió de hombros y suspiró.

—Alguien que no se suponía que sería.

Fruncí el ceño. Bien, no quiere decirme. Me enteraré tarde o temprano, lo sé.

FIN CAPÍTULO 15.




Otra comedia romántica absurda [OCRA #1]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang