Fraternidad mixta...¡UNA MIERDA!

29. Momentos embarazosos

Me despierto cuando noto que él se tumba a mi lado, dentro de mi cama mientras me abraza por la cintura.

-¿Qué haces?- digo adormilada.

-No digas nada, me he comportado como un capullo, pero te puedo asegurar que no eres un segundo plato así que por favor, vamos a dormir y mañana hablamos.- Me dice serio

-Vale.- le contesto yo como tonta que soy. Cuando lo digo Ryan me acerca más a él y me da un beso en el pelo.

-Buenas noches.- dice

-Buenas noches.- le digo con una voz que más parece un murmullo.

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POV Ryan.

La miro. ¿Qué es lo que me pasa? Nunca he sido así y ella no es distinta a las otras. Pienso. Sí que es distinta, esa personalidad no la tiene nadie. Se la ve tranquila, sin nada que la atormente, mientras que yo apenas he podido dormir. Ha sido una noche extraña, apenas he dormido pensando en esta situación que ni yo mismo entiendo pero me siento más descansado que nunca.

Con cuidado cojo mi móvil de la mesilla de mi izquierda. La luz me ciega al principio hasta que la consigo bajar. Las 7:23 am. Hoy hay clases, pero no voy a ir, tengo otros planes.

Me levanto con cuidado de no despertar a la bella dama que tengo a mi vera. Es hermosa. Tiene un mechón en la cara y no puedo evitar retirárselo para admirar un poco más su rostro. Me acerco a él y le doy un suave y cariñoso beso en la frente. Joder Ryan, se te están pegando las acciones de Eddie. Salgo de la habitación y cierro la puerta con cuidado. Cuando voy a entrar en mi habitación veo la silueta de alguien. Al saber que está a la izquierda se rápidamente que se trata de Dylan. Sé que me ha visto salir de la habitación de Rose, pero no voy a parar y dar ninguna explicación. Me tengo que ir antes de que Rose se despierte. Necesito aclarar mis ideas antes de hablar con ella.

Cojo una camiseta negra con el número 72 en el centro en color blanco, también tiene dos rayas horizontales en los brazos. Lo combino con un pantalón negro y unas converse negras. Ni que fuera de funeral- pienso y me rio- irónico. Bajo a la cocina donde se encuentra Eddie.

-Buenos días.- le digo.

-Buenos días.- me dice- ¿Te vas a algún sitio?- pregunta mientras termina de servirse una taza de café.

-Sí, no iré a clase- le digo mientras cojo una manzana- Nos vemos luego.- le digo saliendo de la cocina para salir de casa, pero me interrumpen.

-¿A dónde vas?- pregunta Dylan frunciendo el ceño.

-A un sitio. Tengo prisa. ¿Me dejas pasar?- le digo serio.

-¿Por qué has salido del cuarto de Rose? ¿Te la has follado y te has ido como si se tratase de una chica cualquiera?- me pregunta exaltado. La sangre sube rápidamente a mi cabeza y me dan ganas de pegarle un puñetazo. Ella no es una cualquiera.

- Lo primero, no tienes ni puta idea de nada de lo que hay entre Rose y yo así que no te metas y segundo, si me acostase con ella no sería asunto tuyo tampoco, y claro que no la trataría como si fuera un trapo.- le digo intentando calmarme, pero un pensamiento hace que todo vuelva a hervir.- ¿Por qué quieres saber eso? ¿Te gusta? ¿Te gustaría follartela?- digo a centímetros de su cara.

-Yo no me la follaria, no soy como tu.- me dice acercándose más a mí.

-Ninguno de los dos se la va a follar porque yo no voy a dejar que la tratéis así. Nunca me ha parecido bien el trato que le das a algunas mujeres Ryan, pero no te he dicho nada, lo que no voy a consentir es que eso se lo hagas a Rose. Me parece degradante y una humillación para ellas y mira que no las conozco. Pero si alguno de los dos se la "Folla", no va a tener con que hacerlo.- Avisados estáis...- dice Eddie. Se da media vuelta y vuelve a la cocina.