Fraternidad mixta...¡UNA MIERDA!

31. Verdades ocultas

Zoey Deutch hará de Dana. (Foto en Twitter)

LEER NOTA DE ABAJO; IMPORTANTE

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Los chicos han montado una gran fiesta.

En una vuelta que doy veo como Ryan se está liando con las dos chicas. Primero con una y después con la otra. Abre los ojos y se encuentra con mis ojos y yo hago lo primero que se me ocurre. Beso al desconocido que baila conmigo mientras con los ojos abiertos Ryan y yo nos miramos viendo a ver quién puede más. Abro la puerta bajo su mirada sorprendida y me meto con el desconocido a mi habitación. Lo último que veo cuando se cierra la puerta es que Ryan también se está metiendo con las chicas a su cuarto.

-L-Lo siento. Lo siento. Tienes que irte.- digo cogiendo una toalla y tapándome.

-¿Es en serio?- me pregunta el chico con una erección bastante marcada. Dios, soy una calientapollas- Que te den.- me dice y yo no digo nada, me lo tengo merecido por estúpida.

(Rose-Ryan)

-amigos, ¿no?- me dice con una sonrisa que no reconozco, no parece real.

-Amigos.- digo con superioridad.

-Espero que te lo hayas pasado bien, yo lo he hecho.- dicho esto se mete en su cuarto dejándome a mí en mitad del pasillo tonta perdida.

(Eddie-Josh)

Al girarme me sorprende ver a Josh restregando su erección por mi cuerpo y todavía me sorprende más ver cómo me come la oreja.

-¿Que est...?- le voy a preguntar, pero él me pone un dedo en los labios mandándome callar.

-SHHHHH!- me dice y yo me dejo hacer. Josh es atractivo y me encanta. ¿Por qué no?

(Ryan)

Las chicas querían y yo al principio respondí, pero después no podía sacarme las palabras de mi abuelo de esta mañana y de pensar en Rose y no he podido hacerlo. Patético, es lo que soy. Intento poner celosa a la chica que me gusta y soy yo quien acaba celoso

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El sueño no vuelve a alcanzarme. La fiesta ha terminado hace dos horas y yo me he desvelado cuando la gente se marchaba. Irónico ¿no?, no me despierto con el ruido de una fiesta bajo mis pies, pero si con que se termine la fiesta. Suspiro.

Me separo de la sabana dándole unas cuantas patadas para que no me cubra las piernas y me levanto de la cama quedándome sentada en el borde. Me paso la mano por la cara y por el pelo.

La segunda razón por la cual no concilio el sueño es Ryan. No sé qué me pasa con él, pero algo me pasa.

Salgo sigilosamente de mi habitación y bajo a la cocina. Abro los armarios en busca de los polvos del cola cao. Megan, una de las criadas que ha sido como mi madre, siempre que me desvelaba me preparaba un vaso de leche con cola cao y en menos de cinco minutos conseguía dormirme.

Caliento la leche en el microondas y antes de que salga, paro el tiempo y con él, el pitido. No quiero despertar a los chicos por eso cuando me voy a sentar en la barra para poder beber levanto la silla y evito los ruidos sonoros. Comienzo a beberme mi cola cao, me ha quedado genial ¿Por qué mentir? Apoyo la cabeza en la encimera junto a mis cruzados brazos decido que cerrar los ojos cinco minutos no es algo malo.

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De repente noto que mi mano que sujetaba mi cabeza desaparece y mi cabeza cae hacia la encimera. PUM. Del golpe con la mesa me caigo del taburete al suelo y como no, me despierto de golpe.