CAPITULO 23

2.1K 118 7
                                    


  POV SANTANA


Cuando Brittany entro a mi estudio la vi tan preocupada que no pude seguir ignorándola más, no le hacía bien a ella ni a mí, toda la semana pasada había sido una mierda total. En ese momento se me ocurrió hacerle una cena para hablar y se lo dije sin pensarlo mucho porque si lo pensaba terminaría descubriendo que quizás no era una buena idea. Ya estaba hecho y en serio quería que ya sea de noche. Me levanté y prepare el desayuno para Brittany y para mí, dejándoselo en la mesa mientras me iba a bañar. Cuando baje ella ya estaba lista en la sala.

–Buenos días.- dije caminando hacia la cocina para sacar las llaves de la camioneta.

–Buenos días, gracias por el desayuno.

–No hay de qué. Vámonos para no llegar tarde.- bajamos en el ascensor y vi que Brittany bostezaba, se veía tan linda. Tenía un aspecto mayor pero sus gestos la hacían parecer aún una niña. Nos subimos a la camioneta y durante toda la semana pasada viajábamos en completo silencio, pero las cosas tenían que cambiar así que le alcance el control del estéreo y ella sonrió ampliamente. Puso música y vi que cerraba los ojos y pronunciaba silenciosamente con sus labios.

–Porque cierras los ojos?- le pregunté.

–Para sentir la música.- dijo abriéndolos.

–Sentir? La música llega por los oídos para que cerrar los ojos?- pregunté sin entender.

–Porque no solo llega a los oídos, llega al alma.- dijo sonriendo.

–No entiendo.

–Pasa que hay canciones que te dicen más que unas cuantas palabras, te dan lecciones de vida o simplemente te hacen recordar batallas ganadas o pérdidas, no sé a mí me gusta sentirlas mías y crear mi historia con ellas, así las canto muchísimo mejor.- dijo y yo solo sonreí. Para mí la música era una compañía, era algo que hacía que no me quede dormida.

–Si te entiendo, aunque yo quizás soy más simple. Solo escucho para no dormirme o para no sentirme sola.

–Es que también sirve para eso, pero yo te he visto cuando tocas y luces concentrada.

–Luzco concentrada para recordar las notas.- dije y ella rió. Ya habíamos llegado a su academia así que me estacioné. –Hoy iré a la universidad en la tarde así que no nos veremos en el estudio. Nos vemos en la noche en casa ok?- pregunté.

–Le diré a Puck que me lleve, nos vemos.- dijo mientras se sacaba el cinturón, cuando giro para darme una sonrisa antes de abrir la puerta me estiré y bese su mejilla, extrañaba hacerlo y si iba a arreglar las cosas y ahora seriamos amigas un beso en la mejilla no venía mal.

POV BRITTANY

Me baje de la camioneta y entre a la academia con una sonrisa que no se me quitaría nunca. Santana había vuelto a ser la Santana de antes, extrañaba sus desayunos, su sonrisa, su modo de despedirse que por más que fuese común que se despidan con un beso, la manera de ella era especial. En la academia todo era increíble, era divertido hacer música todo el tiempo y estar con personas que lo amaban tanto como uno. El profesor nos dejo como proyecto final componer y cantar una canción en parejas, me encantaba el trabajo y ahora tenía que buscar a alguien para hacerlo. Ya tenía algunas amigas pero no sabía a cual decirle así que me quede pensando y recogiendo mis cosas cuando el profesor ya se había ido.

–Brittany!- me dijo Marley parándose al frente mío.

–Hola.- dije aturdida ya que estaba concentrada metiendo todos mis papeles en mi bolso. Marley era otra estudiante de mi misma edad, pero ella si estaba segura que quería dedicarse a la música y el siguiente ciclo se iría a Nueva York a estudiar.

–Estaba pensando que quizás podríamos hacer el proyecto final juntas, ya hemos cantado un par de veces y creo que hacemos buen grupo. Que dices?- me preguntó y me sorprendí ya que Marley tenía una increíble voz y ya habíamos practicado antes pero nunca algo así serio.

–Por mi perfecto, me encanta como cantas.- dije sonriendo.

–Gracias! A mí también me encanta tu voz.- me dijo con una gran sonrisa. Marley era muy bonita y de facciones muy delicadas. Por lo que tenía entendido, ella era bisexual. No entiendo que tiene la gente con probar ambos sexos, osea se supone que alguno te tiene que gustar mas no? Osea no se con cara digo esto ya que se supone que me gustan los hombres pero sin duda tengo una enorme atracción por una mujer. Lo malo es que no es cualquier mujer, es Santana, y creo que cualquier ser humano se confundiría teniéndola a ella viviendo contigo y sonriéndote y viéndote con esos ojos hermosos. Pero bueno era imposible que sea bisexual ya que nunca me atrajo otra mujer, la única hasta ahora era Santana.

–Estas ahí?- me preguntó y me sobresalte.

–Estaba pensando en otra cosa, disculpa. Cuando empezamos?

–Yo tengo libre las tardes así que por mi normal.

–Yo trabajo asi que podría ser de noche o los sábados, no hay problema no?

–No, por mi normal.

–Ok, entonces yo preguntaré si puede ser en mi casa y te aviso mañana para quedar bien el día.- para eso ya había guardado mis cosas y estábamos saliendo del aula.

–Porque tienes que preguntar?

–Es que me estoy quedando con mi hermana y su mejor amiga.

–Ah ok, entiendo. Me avisas mañana entonces.

–Listo.- me despedí de ella y me fui hacia el estudio. Hoy por lo que tenía entendido Emma no estaría, así que más seguro me iría con Sugar a ayudarla o a conversar de la vida como hacíamos siempre. Se supone que tenía que ayudar a Puck pero Sugar siempre me llamaba y me quedaba con ella. Era divertido ya que sugar siempre me hacía reír, creo que sugar era la más relajada de todos ya que mientras que Puck y santana trabajaban como dos locos todo el día, ella solo conversaba conmigo mientras miraba un proyecto en su computador. Llegue a la oficina y como nunca Sugar estaba toda llena de planos y con un aspecto agotado.

–Hola.- dije observándola.

–Brittany! Has llegado justo a salvarme la existencia!- dijo mientras ordenaba sus planos.

–Qué?- pregunté sonriendo.

–No tengo tiempo para leer un informe y necesito ayuda.- dijo.

–Ok, no hay problema yo lo leo y te cuento todo.- dije acercándome.

–Ya perfecto, te lo mando ahora a tu correo.

–Pero no tengo computadora, porque no lo imprimes?

–Es un poco largo y la impresora ahora está ocupada con unos planos que he mandado. –Entonces como hago?- pregunté.

–Santana no está, así que anda a su oficina y usa su computador.

–No se va a molestar?

–No, ya la llame para preguntarle.

–Ok, sabes cuál es su contraseña?

–Me dijo que la tiene escrita en una libreta en el cajón izquierdo de su escritorio.

–Ok, lo leo y vengo.- dije saliendo.

–Gracias!- fui a la oficina de Santana y era raro estar ahí sin ella pero igual entre y me senté en su escritorio. Abrí el cajón izquierdo y había dos libretas, abrí la primera y estaba llena de fotos impresas. Eran fotos antiguas de ella con su familia y me sentí extraña observando ya que eran cuando Santana era una niña y había olvidado esa imagen de ella. Yo era una bebe cuando ella tenía esa edad y recién empiezo a recordarla cuando ella era ya un poco mas grande. No pude evitar seguir viendo las fotos entre las hojas, sabía que no estaba la contraseña ahí pero tenía curiosidad. Seguí pasando las hojas y me seguía encontrando fotos de ella con su mamá, había una en donde Quinn tendría unos 7 años y las dos estaban frente a un pastel de cumpleaños con las caras manchadas de manjar. Cuando pase las hojas me quede perpleja observando una. No me acordaba de la existencia de esta foto y menos de la escena, era Santana que tenía unos 8 años sentada en el sofá de mi casa conmigo en su regazo y las dos estábamos dormidas. Yo tendría unos 3 años en la foto y no recuerdo cuando exactamente fue y porque yo dormía plácidamente en sus piernas, mientras que ella tenía una de sus manos en mi estomago como agarrándome para que no me cayera. Era extremadamente tierna y no pude evitar quitar mi vista de ella. ¿Por qué Santana tendría esa foto? Después seguí pasando las fotos y habían muchas más de ella con Quinn y algunas de ella con mis hermanas. Todas las fotos eran antiguas, termine de verlas y abrí la otra libreta y tenía algunas palabras o números escritos tachados, al final había una la cual no entendí ya que eran letras y números sin sentido "S21B19". Lo ingrese a su computador y leí el informe de Sugar. Cuando lo termine fui a su oficina y nos quedamos hablando sobre él un buen rato. Después Puck paso a buscarme y me llevo a casa, era increíble viajar con Puck, era una gran persona. El día había sido agotador pero lindo ya que nada me borraría la foto que tenía Santana de mi y ella. Porque la conservaría? Y sobre todo de donde la saco? ya que es muy probable que la haya tomado mi mamá. Llegue al departamento y me despedí de Puck, subí por el ascensor y cuando entre se sentía un olor extraño y cuando me asome a la sala, la mesa estaba lista como para dos personas y tenía una copa de vino y un pequeño jarrón con flores. Estaba asombrada y aún más cuando vi a Santana en la cocina mirando el horno con un mandil de cocina. Esta cena no era cualquier cena y tenía la impresión de que Santana había llegado antes a cocinar ya que observaba el horno y toda la cocina estaba hecha un desastre con ollas sucias. El olor era increíble así que me acerque haciendo ruido en la puerta para llamar su atención.

–Oh mierda! Me has asustado Britt-Britt!- dijo parándose bien. Era lindo volver a escuchar el Britt-Britt de sus labios.

–Lo siento, llegue y no me esperaba verte acá.- dije sentándome en la barra del desayuno.

–Porque? Te prometí una cena no?- dijo sonriendo.

–Sí, pero dijiste que tenías que ir a la universidad así que pensé que pediríamos algo o no sé.- dije nerviosa ya que su mirada estaba atenta a la mía y eso me ponía los nervios de punta.

–Qué clase de persona te invita a cenar y pide comida?- dijo como si le hubiese dicho algo irónico.

–La normal?- pregunté y ella hizo un gesto extraño.

–No, no es normal invitar a cenar y pedir comida. No tiene sentido, para tal caso te hubiese llevado a un restaurante.- dijo y se puso un guante en la mano y se inclino para sacar lo que había en el horno. Me quede mirándola y había preparado una lasagna, el olor era increíble.

–No sé que habré hecho para merecer eso, pero huele increíble y lo agradezco.- dije acercándome y Santana solo rió.

–Es mi forma de pedir disculpas.- me sorprendí con eso y giré rápidamente para verla. –Te parece si mejor hablamos en la mesa? Anda a cambiarte mientras sirvo.- dijo y solo sonreí.

–Ya vuelvo.- dije saliendo de la cocina. No podía creer lo que había hecho y más ahora que se que todo era para pedirme disculpas, osea se arrepentía de haberme tratado como si no existiera? No sabía que pasaría en la cena pero estaba ansiosa, ansiosa por volver a hablar con ella, por verla sonreír y por comer esa lasagna, me moría de hambre.


CAMBIASTE MI VIDA (BRITTANA)Where stories live. Discover now