Capítulo 25

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Su mente se volvió a hundir en el recuerdo. Varias imágenes pasaban en su cabeza, como si estuviera presente, vio como su madre y su padre estaban corriendo detrás de él. Los dos estaban sonriendo, mientras intentaban alcanzarlo, pero cuando llegaron a atraparlo, una espada se clavó en su estómago.

Dolía, dolía demasiado. Sus padres se desvanecieron como polvo ante sus ojos y fueron llevados con el viento. 

No podía moverse, la espada no se lo permitía. "¿Un sueño pesado o me dio paralisis de sueño?" trato de moverse, pero no podía, no respondía ninguna parte de su cuerpo.

No sabía cuánto tiempo se había quedado así, pero logró abrir los ojos y la escena de la espada quedó atrás. Sentía su cuerpo pesado, pero podía mover la cabeza y miró hacia un lado topándose con la mirada fría del azabache.

-¿Qué...Qué haces aquí?-

Sasuke lo miró por un rato y luego apartó la mirada -¿Te sientes mejor?-

Naruto tuvo una extraña sensación y alzó su mano para tocar su cabeza. El sombrero seguía ahí, no se lo habían quitado, no dudo en suspirar de alivio... entonces ¿Por qué estaba actuando extraño?

-¿Sasuke? ¿Sucedió algo mientras dormía?-

-No quería que despertaras-

-¿.....?- 

-Ese bastardo no ha llegado - lo escuchó susurrar.

Naruto estaba más confundido "¿No quería que despertara?, ¿Tanto le dolió mi rechazo que ahora quiere verme muerto? ¿Bastardo? ¿Quién es?" 

Antes de que preguntara, la puerta se abrió y el hombre que lo había ayudado a llegar a su habitación apareció con un tazón en mano.

-Lamento la tardanza, pero por fin lo conseguí-

Sasuke asintió, se levantó de la silla y le arrebató el tazón -Retirate, ya no eres necesario aquí-

El hombre asintió con la cabeza, pero antes de irse le lanzó una breve mirada a Naruto y luego salió.

- ¿Quién es?-

-Un bastardo - dejó el tazón encima de la mesa -¿Te puedes levantar?-

Naruto negó -Me duele el cuerpo, ¿Tuve fiebre?-

-Así es, un doctor vino a checarte y dijo que tenías fiebre de invierno o algo así- decidió tomar el tazón en sus manos y se sentó en la cama.

Naruto abrió los ojos de sorpresa al ver el contenido. Era Ramen con chuleta de cerdo, no podía creerlo, ¿Cómo lo sabía? se sintió emocionado y miró al Uchiha con alegría.

-¿Cómo lo sabes? ¿Cómo sabes que me gusta el Ramen?-

-¿Te gusta? No lo sabía- con una cuchara tomo un poco de sopa y lo soplo - Lo tomaré en cuenta-

-¡Si! ¡Por favor, hazlo!- asintió emocionado.

Sasuke quiso reír en ese momento, pero se aguanto -Abre la boca

El rubio obedeció sin ninguna duda y acepto la sopa tibia dentro de su boca. Se sentía desfallecer, extrañaba su sabor, por fin después de 12 años volvía a sentir ese sabor tan familiar.

-Por favor majestad, dame esa chuleta que se ve deliciosa-

El azabache dudo -¿Esta bien que te de carne? recuerdo que el doctor dijo que debes de comer cosas ligeras-

-Jojo, yo no escuche a ningún doctor, estaba medio muerto así que no pude escuchar nada ¿Cómo puedo saber que no me estas mintiendo?-

-¿Piensas que te estoy quitando la carne?-

Naruto miro hacia el ramen y se dio cuenta que los fideos se estaban deshaciendo -¡Majestad, dame de comer! ¡Luego no servirá!-

Sasuke lanzó una carcajada, se le hacía tierno como su amigo estaba desesperado por comer Ramen "Así que esto es más importante para ti" lo tomo en cuenta y decidió seguir dándole sopa en la boca.

Naruto termino de comer y se volvió a quedar dormido.

Sasuke lo contemplaba en una esquina, su rostro dormido se le hacía precioso ante sus ojos, era una imagen que quería guardar en su corazón y en su memoria. Pronto, pronto iba a ser suyo completamente, sin que nadie de afuera se interpusiera.

-Majestad-

Escucho la voz del guardia que hablaba detrás de la puerta.

-¿Por qué no le dijo la verdad?-

El azabache no contestó.

-Se que es grosero de mi parte, pero ¿No cree que es extraño? ese doctor dijo que su amigo estaba sufriendo "cambios de hormonas" que por eso se desmayo ya que como es hombre su cuerpo está sufriendo contra algo que es desconocido en su sistema y...-

-Ya basta- 

El soldado se callo abruptamente y decidió ya no seguir tentando su suerte.

-Estoy seguro que él tampoco lo sabe-

Sasuke abrió la puerta y lo miró por última vez antes de salir.

Naruto se despertó con energía pensando que todo lo de ayer fue un sueño , pero cuando vio el tazón en la mesa se dio cuenta que no fue así. 

-¡Por fin comí Ramen!- gritó emocionado.

Se levantó de la cama y se arregló como siempre. Tomó el tazón y salió de la habitación para dirigirse al almacén.

-¡Hola Hinata!- saludó a su amiga que se encontraba desayunando.

-Hola, Menma ¿Ya te sientes mejor?-

Naruto asintió y se sentó junto a ella -Lamento no haber ido contigo a comer-

-No te preocupes, lo más importante es que estés mejor-

"Hinata eres un ángel" se le escapó varias lágrimas que logró limpiar a tiempo. 

-A todo esto ¿Me perdi de algo ayer?-

Hinata negó -No, solo chismes y cosas sin sentido-

Naruto no dudo en preguntar -¿El clan Sabaku y el clan Nara siguen aquí?-

-Se fueron esta mañana-

El rubio suspiró aliviado.

-¿De casualidad conoces a los líderes del clan?-

-¡¿Qué?! ¡No, no los conozco! ¿Por qué?-

Hinata alzó una ceja - Porque actúas extraño, cuando escuchaste la noticia te enfermaste y ahora que se fueron te sentiste alivianado-

"Que inteligente" pensó en una excusa y respondió -No estoy acostumbrado a otros clanes, me da un poco de miedo ver a otros líderes de afuera, también porque supe que sus líderes son escalofriantes-

Hinata tuvo sus dudas, pero decidió no preguntar.

-¿Es así? entonces está bien, siéntete tranquilo-

Naruto asintió "Lamento mentirte, pero no te puedo contar mi pasado" aunque confiaba en Hinata, no podía decirle la verdad. 

-Entonces ¿Qué te parece salir esta noche a comer?-

Hinata sonrió -Me encantaría-




Rosa NegraWhere stories live. Discover now