Capítulo 43

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Lamentablemente Naruto no podía participar en la guerra, por lo que lo llevaron a una habitación secreta que se encontraba debajo del palacio. Había pocas luces, pero estaba lleno con sacos llenos de alimentos y jarrones de agua. Naruto no era el único que estaba ahí, había varias personas escondidas en los rincones, esperando a que la guerra terminara.

-Majestad, por favor Siéntese aquí, necesita descansar- el doctor estaba a su lado, ya que Konohamaru lo necesitaban en el frente, por lo que el doctor se ofreció en cuidarlo, sorpresivamente podía usar una espada y defenderse, pero prefiere salvar vidas que lastimarlas.

Naruto asintió y se sentó a lado de una niña. La pequeña abrazaba una muñeca de trapo, algo sucia y descuidada.

El rubio inconscientemente acaricio su estómago, ya habían pasado 2 meses y todavía no estaba tan abultado como creía, ya quería que los meses pasaran rápido para recibir a su niño o niña.

-Majestad ¿Le duele el estómago? ¿Quiere que lo revise? – el doctor pregunto preocupado, no estaba seguro si el feto estaba bien después del veneno y eso que reviso constantemente el pulso del niño, pero aun así dudaba.

-Estoy bien, solo estaba pensando -

El doctor suspiro aliviado.

El sonido de las trompetas, llego a perforar los oídos de la gente. El techo temblaba a causa de las pisadas y de la maquinaria pesada.

-¿Esto es resistente? -

El doctor respondió-Lo es, no se preocupe, aunque haya un temblor, el techo no se derrumbara-

Naruto miro a su alrededor, buscando una grieta en la pared en la cual preocuparse.

Cuando de repente, la puerta de la habitación secreta se abrió rápidamente.

El doctor se puso enfrente del rubio, levantando su arma y mirando nerviosamente. En realidad, no quería matar, pero tampoco quería que le hicieran daño al chico milagroso.

Finalmente, la silueta bajo por las escaleras de piedra, seguida por una silueta más pequeña.

La mujer apareció ante la vista de todos, era Temari seguida por una sirvienta.

El doctor limpio el sudor de su rostro y guardo la pequeña espada.

- Lo siento, no quise asustarlos – Temari barrio con su mirada fría a las personas dentro hasta que aterrizo en el rubio - No creí que estuvieras aquí -}

Ahora que su hermano no estaba aquí, podía actuar como quisiera. Su aura se volvió peligrosa. Tanto que el doctor se puso en guardia.

Temari sonrió fríamente y miro hacia el rubio, sus ojos estaban llenos de un odio indescifrable. Ella se le acerco paso a paso.

.-Ah, aún no entiendo porque mi hermano te protege tanto, dime ¿Eres una persona desvergonzada? ¿Te gusta jugar con los hombres? -

-Señorita Temari...- el doctor sintió que las palabras de la joven eran muy hirientes.

-Es mejor que no te metas en esto o ¿es que tú también has sido engatusado? –

El doctor trato de responder, pero fue detenido por el rubio.

.-No es necesario que le contestes. Señorita Temari ¿Por qué me odia tanto como para envenenarme? ¿Le he hecho algo en el pasado? Ya que no recuerdo a verla visto durante mi infancia en la aldea Namikaze-

La gente miro mudo a las dos personas, esperando la respuesta de la princesa.

Temari no tardó en responder – Es verdad, nunca nos hemos visto, pero no fue necesario para ver que clase de persona eres. Primero te revolcaste con el príncipe Uchiha sabiendo que fue el asesino de tu familia y ahora que ves que las cosas se están poniendo mal, vienes y le pides ayuda a mi hermano cuando tu lo engañaste con tu muerte ¿Qué clase de monstruo eres tú?-

-Tu hermano tuvo la oportunidad de castigarme y no lo hizo ¿Quién eres tú, que me juzga cuando la persona que resulto herida no lo hizo? -La gente le dio la razón al rubio y empezaron a susurrar.

-¡Silencio!-

La gente calló.

Temari regreso la mirada en el rubio, pero esta ves sus ojos estaban llenos de cuchillos afilados.

-Mi hermano está enamorado de ti, ¿no es obvio que te aprovechas de eso?, ¿Qué clase de persona castigaría a un ser amado? Pero yo no te conozco y no siento nada por ti, por esa misma razón te juzgo como la persona más cercana a mi hermano-

-Siento que no lo haces por tu hermano, porque si fuera así no mataras a un bebé que ni siquiera ha nacido –

Un silencio pesado cayó.

-Ja...-

Temari lanzo una carcajada que rompió el ambiente, todos se sorprendieron del cambio de ambiente.

Temari se transformo en un demonio, dejando atrás la postura tranquila con la que había entrado.

-Jajaja...No eres tan tonto como creí -Se limpio una pequeña lagrima que había resbalado de sus ojos – Es verdad, no lo hago todo por mi hermano, también lo hago para el futuro -

Naruto alzo una ceja -¿Para el futuro? -

-Asi es, el estúpido de mi hermano y prometido no firmaron el acuerdo de paz con los Uchihas al contrario se atrevieron a romper la hoja enfrente de sus ojos declarando la guerra. ¿Sabes que significa eso? Los clanes que firmaron serian nuestros enemigos y no dejarían en paz al clan Sabaku y al clan Nara. Habría guerra todo el tiempo y el resultado final era la destrucción de mi clan. No quería que sucediera como el clan Namikaze, por lo que decidí trabajar en secreto con el emperador, ya cuando tomara su confianza, actuaria para acabar con el -

.-¡¿Tu eres el espía del emperador?!.- grito sorprendido el doctor.

Los susurros de la gente se convirtieron en maldiciones.

Temari no lo negó, camino hacia Naruto y agarro su muñeca -Ahora voy a acabar con lo que inicie -

La fuerza de la rubia fue extraordinariamente grande, tirando a Naruto que lo hizo gritar de dolor.

El doctor reacciono, pero antes de que diera un paso, fue detenido por la sirvienta de esta.

-Señorita Temari, por favor no haga esto, piénselo bien, ¿Por qué lastimaría a un bebé que no tiene la culpa? -

Pero antes de que Temari respondiera, un fuerte temblor movió la habitación, haciendo que aflojara su agarre y la sirvienta se distrajera. Varios hombres actuaron y tomaron a ambas mujeres en sus brazos

-¡¿Qué están haciendo?! ¡Suéltenme! -

El doctor levantó su mano con dos dedos y presiono un punto de presión que hizo que ambas cayeran inconscientes.

-Atenlas -

Los hombres encontraron una cuerda gruesa y las amarraron.

Naruto masajeo su mano adolorida - ¿Qué pasara con ella? -señalo a Temari.

El doctor contesto -Lamentablemente no podemos hacer nada, ya que es la hermana del emperador, así que solo podemos esperar-

El rubio asintió con la cabeza. Ahora sabia quien fue el que le dijo a Fugaku que esperaba un hijo. Pero ¿Por qué? ¿No era su nieto? Aunque lastimosamente le dolía admitirlo, creo que por esa razón tampoco quería tener un nieto de un bastardo.

Los temblores volvieron, sacudiendo las lámparas del techo.

-¿Qué estará pasando? -

-No lo sé, pero... huele a pólvora -








Rosa NegraWhere stories live. Discover now