CAMILA bitácora fecha 10

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Dos semanas después mis padres me dieron permiso de dormir en su casa. Después de una ligera cena y una película romántica a petición mía y de Taylor., nos fuimos a la cama.

Taylor insistía en que yo tenía más cosas en común con ella que con Lauren... y tenía razón., pero eso era exactamente lo que hacía que Lauren y yo nos complementáramos a la perfección., me podía pasar horas enteras escuchándola hablar de sus grupos favoritos, de la primera película de terror que vio, de la vez que casi fue mordida por un guacamayo salvaje, de los platillos raros que había tenido la osadía de probar., ella era tan diferente a mí, que todavía no me entraba en la cabeza que estuviera dispuesta a pasar por todas las etapas de la amistad conmigo.

Esa misma noche... yo, Camila Cabello Estrabao, con todas y cada una de sus letras. Me di cuenta que la deseaba. Si señor... la deseaba como la deseaba Rubén, quería besarla como el imbécil de Keaton., quería quedarme en su cama para siempre... y comprendí que la había traicionado como amiga.

Ella se durmió primero, y yo la miraba con una mezcla de vergüenza y descaro., me sentía como la más ruin de las amigas. Ella tan confiada, estuvo dispuesta a todo por mí... para poder finalmente tener una mejor amiga, aquella que la acompañaría por el resto de su vida., la amiga con la que pensaba viajar por el mundo en compañía de sus respectivos esposos., la que le cuidaría a sus hijos cuando se enfermara, la que le prestaría su hombro para llorar las penas de un mal amor. Y yo... pensando en besarla, en acariciar su cuerpo después de desnudarla tela por tela, con mi rostro perdido en su cuello.

Yo no sabía lo que era el deseo sexual, hasta que la tuve acostada a mi lado., sí, había sentido las hormiguitas brincar en mi vientre., pero esto era diferente. Se acercó a mí tres veces durante la noche., yo por respeto la empujaba con suavidad a pesar de sus gruñidos de protesta.

....

Semanas después ella durmió en mi casa. Mis padres quisieron corresponder las atenciones de los Jáuregui y la invitaron un día. Ella aceptó.

Mi cuarto era de dos camas., Sofía y yo compartíamos recámara, pero mis padres le dieron posada a mi hermana por una noche para que Lauren se sintiera cómoda.

Habíamos llegado a un punto en que nuestras familias se habían hecho amigos gracias a nuestra amistad. Lauren insistía en que aún éramos casi mejores amigas., ella decía que para ser mejores amigas, necesitábamos pasar por otras etapas.

Esa noche ella se negó a dormir en la cama de Sofía. Dijo que prefería compartir mi cama, que ese era el objetivo principal de dormir en mi casa, que de ser así mejor dormiría en su casa y en su cama.

Lo tuve más difícil, mi cama era individual, y habría que dormir muy juntas para no caernos., ninguna sugirió la idea de juntar las dos camas., bueno a mí se me ocurrió desde el principio., pero no lo mencioné jamás. Ella se durmió primero y yo me dormí minutos después.

Unos gemidos de placer me despertaron casi entrada la madrugara., lentamente desperté y con somnolencia descubrí que era ella., para segundos después descubrir horrorizada que tenía la mano izquierda bajo la camiseta de mi casi mejor amiga., la tenía abrazada en forma de cucharita con mi pelvis conectada a su adorable trasero mi mano derecha bajo su cintura, una vez que descubrí ese detalle pude notar que tenía el pezón izquierdo de Lauren atrapado entre mis dedos pulgar e índice, y mi boca besando su espalda a través de la camiseta.

Obligue a mi cuerpo a despertar del todo y conservar la calma, era Lauren, mi casi mejor amiga, mi princesa... y era tan suave. No me moví, no respiré, ella gimió en voz alta esta vez y pude escuchar claramente mi nombre salir de su boca en un sonido ahogado y excitante...

_"Camz"_ susurró ella... y finalmente pude descubrir que una parte rebelde de mi cuerpo no atendió a mi suplica por mantenerme quieta... era mi mano derecha que se encontraba metida entre sus braguitas y que se movía reptando entre sus suaves pliegues. Entendí que Lauren entre sueños se había dado cuenta de lo que le estaba haciendo y que tenía el sueño más pesado que el mío., no eran gemidos, ya quisiera yo, eran protestas por lo que le estaba haciendo sin su consentimiento.

Con el rostro ardiendo de pena y el cuerpo ardiendo por su cercanía me obligué a dejarla en paz. Mientras rogaba a los dioses que ella no recordara lo que pasó.

Al día siguiente no supe que pensar, ella no dijo nada, pero su actitud era extraña para conmigo. No me miró a los ojos durante varios días.

.....

No se volvió a tocar el tema de las etapas de la amistad. Me sentía sin derechos a preguntar por ese título. Lauren volvió a su habitual forma de comportarse conmigo y yo trataba de evitar el tema de dormir juntas. Y digo trataba, porque Lauren me dejaba de hablar cuando yo me negaba.

_Por lo visto no te interesa_ me decía dejándome atrás_ bueno que importa... quizá a Ally le interese.

_Espera Lolo...._le decía desesperada.

_ ¿cómo vamos a pasar las demás etapas si te niegas a pasar más tiempo conmigo?

_Lolo....

Así discutía conmigo, hasta que se salía con la suya., siempre se salía con la suya. Pasé varias noches en su casa aunque Lauren se la vivía peleando con sus hermanos por mi causa. Decía que era preferible que yo fuera a su casa, pues no quería molestar a Sofía.

De todos modos se quedó a dormir en mi cuarto algunas noches. Sofía lo pedía y a veces se quedaba un rato más a que Lauren le leyera un cuento, hasta que mamá llegaba por ella.

_Es hora de pasar a la siguiente etapa_ me dijo un día_ de hecho ya adelantamos varias.

_ ¿cuales? _dije con curiosidad.

_La de los apodos personalizados_ me dijo_ Solo yo te digo Camz. Solo tú me dices lolo.

_y la de dormir juntas_ dije orgullosa.

_Esa también..._dijo sonriente.

_ ¿entonces?

_Tengo que desprenderme de una prenda que yo adore y dártela a ti. Y tú tienes que hacer lo mismo.

_ ¿cualquier tipo de prenda?

_Uno que podamos usar a diario. Una que demuestre ante el mundo que de cierta manera nos pertenecemos.

"pertenecernos" eso me gustaba... mucho

_ ¿Tú ya sabes que prenda me vas a dar?_ pregunté casual.

_tienes que elegirla tú_ me dijo con una sonrisa pizpireta.

_ ¿ya elegiste lo que quieres de mí?_ pregunté inquieta., yo solo usaba baratijas. ¿Qué le podría gustar de mí?

_Desde hace mucho tiempo_ respondió poniéndose seria por un instante.

_ ¿tenemos que hacerlo ahora?_ pregunté.

_tenemos una semana para pensarlo_ dijo mientras jugaba con una pelota de pin pon.

.....

Una semana después yo lucía una liga de hule negra en mi muñeca derecha, y Lauren se hizo de un anillo con una perla incrustada. Ambas eran una baratija, y lo sabíamos. Una semana después Lauren compró un anillo idéntico y me lo dio como regalo del día del amor y la amistad adelantado. Lo mandó a hacer con un joyero amigo de su familia. Era de oro. Y se puso otra liga en la muñeca, por lo que ahora estábamos simbólicamente unidas.


Ellas se aman (Bitácora de un amor prohibido)Where stories live. Discover now