Capítulo 42: Cosas de hospital.

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'Levantó la vista hacia la persona que tiraba de su brazo hacia el interior de un local en medio de la oscura noche. Era Ethan, su ceño se encontraba fruncido sobre su fría y seria mirada. Parecía que estaba cabreado con la pelirroja, pero ella no sabía el motivo, ni siquiera entendía dónde estaban y mucho menos, cómo habían aparecido allí de repente.

Cuando el vampiro abrió la puerta del establecimiento, el bullicio golpeó a Ciara sin compasión alguna. Aquel lugar era tan complejo que llegaba a ser complicado describirlo. A ambos lados de la entrada, había unas escaleras, escondidas por una pared, las cuales conducían a un piso superior. El resto de la estancia que se erguía ante sus ojos, estaba rodeada por una barra de bar, de donde salía una elegante luz azulada. Gracias a esta se iluminaba la estancia, aunque también había unas suaves luces amarillas para alumbrar minimamente la zona del bar.

En el centro del lugar, los clientes podían divertirse gracias a las chicas que bailaban sobre unas barras de metal que llegaban desde el techo hasta unas mesas redondas, rodeadas por varios sillones de dos o tres plazas cada uno. Todos los muebles eran blancos con la tapicería en negros, a excepción de la larga barra y las estanterías, las cuales eran de cristal.

Aquel lugar era un prostíbulo, y cada vez estaba más convencida de que le desagradaba demasiado.

Como si de un truco de magia se tratara, la presencia de una chica en medio del local llamó su atención, Bethania, pero ¿Cómo había aparecido ella allí? Sí hubiese estado en ese punto todo el rato, la pelirroja la hubiese visto antes...

Como si de un truco de magia se tratara, la presencia de una chica en medio del local llamó su atención, Bethania, pero ¿Cómo había aparecido ella allí? Sí hubiese estado en ese punto todo el rato, la pelirroja la hubiese visto antes

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Esta les dirigió una sonrisa de suficiencia, con una extraña complicidad.

Ciara volteó de nuevo la cabeza hacia el vampiro, el cual tenía en su rostro la misma dichosa sonrisa cómplice que su, en esos momentos, enemiga número uno.

Él caminó unos cuantos pasos hacia delante, obligando a la humana a caminar a su lado, y cuando estuvieron a suficiente distancia de la vampiresa, el rubio empujó a Ciara hacia Bethania como quien le tira un trozo de carne a los perros para alimentarlos.

Se llevó la mano al antebrazo, a la altura de donde el rubio la había apresado hasta entonces. Ahora empezaba a sentir molestia. Se dio la vuelta en dirección al vampiro con una mirada reprobatoria ¿A qué había venido eso?

Esta vez fue Bethania la que la sujetó para que no se marchase de su lado.

Cuando Ciara quiso darse cuenta, Ethan se encontraba literalmente detrás del culo de una de las bailarinas del club. Estaba tirándosela allí mismo, delante de todos, y a nadie parecía importarle.

La pelirroja quiso ir junto a él para exigirle una explicación, pero la rubia se lo prohibió tirando se su brazo, ella estaba disfrutando de verla sufrir.

Segundos después todo había cambiado. Ahora se encontraban en un lugar oscuro. Lo único que Ciara podía ver era a ambos vampiros abrazados a una distancia prudente de ella. Bethania le daba la espalda mientras que Ethan la miraba fijamente sin parar de meter mano y jugar impetuosamente con la rubia.

Heartless | #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora