CAPÍTULO 22

776 86 27
                                    

Seung Won se reclinó contra su cómoda silla de cuero, sosteniendo entre sus dedos índice y anular un cigarrillo a medio fumar, mismo que llevó hasta sus labios, dando una profunda y larga calada, sosteniendo el humo por largos segundos hasta al fin liberarlo con lentitud, sintiendo su sistema relajándose.

Recapituló lo sucedido hacía apenas unas horas. Su viejo amigo, aquel hombre que conocía casi desde el preescolar, estaba detrás de alguien y estaba dispuesto a hacerle daño a ese alguien.

A su parecer, Kwon Young Hwan siempre había sido un hombre de cuidado, sin embargo, jamás lo había imaginado estando dispuesto a desaparecer a alguien. Apagando el resto del cigarrillo sobre el cenicero que reposaba sobre su escritorio, carraspeó mientras tomaba su teléfono móvil y marcaba un número que sabía de memoria. Escuchando un par de sonidos del otro lado de la línea, supo el momento exacto en el que habían cogido la llamada.

-Me sorprende mucho tu llamada...- la grave voz del desconocido divirtió al de cabellera negra, quién simplemente soltó una breve risa.

—Siempre tan mal educado. — se burló— Aunque, a veces olvido que no creciste con una educación, sino que te formaste con los años.

-Y tú siempre presumiendo de la tuya, tanto que incluso das a pensar que careces de ella. -

—Un día de estos, acabarás con mi paciencia y entonces sí, perderé mi educación y acabaré personalmente contigo.

-Y allí estás, amenazándome de nuevo...- se escuchó un profundo suspiro- ¿Qué puedo hacer por ti, amigo mío? - ironizó al llamarlo de aquella forma.

Ambos sabían que, si no fuese porque se servían mutuamente, se hubiesen matado hacía tiempo.

—Necesito investigar a alguien. — dijo al fin— Necesito saber todo sobre esa persona.

-¿Y quién es el afortunado? –

—No sé su nombre. Tienes primero que averiguar sobre Kwon Ji Yong, y entonces sabremos la identidad del afortunado.

-Kwon Ji Yong, ¿el hijo renegado que niega su herencia? - cierto recelo se escuchó en la voz de aquel viejo hombre- ¿Qué podrías querer saber tú de ese muchacho?

—Todo. — finalizó— Averigua sobre él, y sobre quienes le rodean.

-Dalo por hecho...- mencionó aquel hombre, escuchando como el pelinegro suspiraba profundamente antes de colgar.

Seung Won se reclinó en su silla apenas breves segundos antes de ver cómo abrían sin permiso la puerta del estudio, mostrándole a un pequeño niño de corto cabello azabache y un par de ojos marrones, sonriéndole suavemente.

—Hola papá...— murmuró el pequeño, apresurándose hacia el mayor, quien sonrió sinceramente y lo recibió entre sus brazos, sentándolo sobre su regazo.

—Hola, enano...— sonrió divertido, viendo a su hijo menor fruncir el ceño— ¿Qué sucede?

—Nada...— murmuró mientras miraba a su alrededor, el amplio estudio en el que cuando más joven, se la pasaba jugando con su progenitor.

—Tu madre mencionó que estabas peleando con tu hermano, de nuevo. — suspiró el viejo— ¿Eso es verdad?

—Jun Hoe es un imbécil...— gruñó el niño con el entrecejo fruncido.

—¿Qué te he dicho sobre las malas palabras?

—Mi hermano las dice, y también tú. — intentó razonar el niño, ocasionando que el mayor le mirase seriamente.

AMOR POR CATÁLOGOWhere stories live. Discover now