AMOR POR CATÁLOGO

CAPÍTULO FINAL

El incesante sonido de los teléfonos a su alrededor, junto con el aroma a cigarrillos, café y rosquillas solamente consiguió que Seung Hyun sintiera un fuerte dolor de cabeza. Removiéndose en una mullida silla, solo consiguió estremecerse cuando la silla al otro lado del escritorio fue corrida, permitiendo que un alto hombre de cabello negro tomara lugar frente a él. Mirando por el rabillo del ojo, encontró una expresión ceñuda junto con unos ojos cansados.

Suspirando profundamente, hundió sus manos en los bolsillos de la chaqueta que Ji Yong había puesto en la maleta que le había entregado más temprano.

Luego de verlo partir, simplemente había tomado el cambio de ropa que había puesto para él, y mientras recuperaba también el dinero que se encontraba allí, así como también su billetera y un teléfono móvil, había salido del lugar apenas pasadas las seis de la mañana. Las calles que solía frecuentar le parecieron tan frías y desconocidas. De alguna manera, sentía que las veces que había transitado por ellas habían sido en otra vida. En definitiva, sí había sido otra vida. Su antiguo yo.

No era un cobarde.

Irguiéndose en la silla, vio atentamente cómo el capitán Han cruzaba los brazos sobre el escritorio mientras sus ojos lo escudriñaban como un halcón. Carraspeando, simplemente se detuvo a mirar la carpeta abierta frente a él, misma que tenía una fotografía del padre de Ji Yong en la esquina, al lado de un sello de clasificado.

—Debe leer la declaración y decirme si es consistente con lo que acaba de decirme— informó el hombre, deslizando una hoja membretada hacia él— Si es correcto, debe firmar al final.

Tomando el papel, dio una rápida leída al contenido, en donde se explicaban los motivos de su presencia en ese momento. Dentro de la denuncia se explicaba el cómo el padre de Ji Yong lo había amenazado, intentado sobornar, e incluso cómo lo había amenazado con hacer daño a su hija.

Por lo que el hombre le había podido explicar, Ji Yong había conseguido las grabaciones del edificio en donde había sido encontraba su madre, en donde se mostraba a Kwon Young Hwan entrando al edificio, así como también en el pasillo del piso del departamento del que era dueña su esposa. Todo en determinada hora, justo la misma en la que el forense había declarado muerta a la madre de Ji Yong. Sumado a ello, había una investigación federal, llevada a cabo por el departamento de crímenes financieros por fraude corporativo.

—El joven Kwon me informó que su padre estará presente en una reunión el día de hoy. Es preciso que llevemos a cabo el operativo de su captura en dicho evento, debido a que logramos averiguar que planea salir del país, rumbo a Alemania esta misma noche.

—¿Alemania? — el detective asintió, frunciendo el ceño al notar como Seung Hyun se tensaba. — Eun Ji

—¿Disculpa? — frunció el ceño, viendo repentinamente cómo el joven frente a él se ponía de pie apresuradamente, mirando a ningún específico en el piso.

—Lo sabe va por mi hija.

Nada nunca es tan sencillo, y aunque Ji Yong era astuto, terminaba siendo hijo de su padre. El grandísimo hijo de puta había permitido que su hijo jugara sus cartas, pero al final, él siempre era quién hacia el último movimiento.

Siendo por más de las seis, el capitán Han había movilizado a sus detectives, así como también había pedido un escuadrón armado, en caso de que Kwon Young Hwan intentase algo. Por supuesto, también se había girado una orden que le imposibilitara el uso de cualquier medio para salir del país.

Nervioso, Seung Hyun había subido a una de las camionetas de la policía, al lado del capitán Han, quien lucía verdaderamente ansioso. Se había organizado un operativo para aprender al multimillonario, eso sin duda le traería un ascenso.