Cap 7. Casino AquaMarim

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(Pv Jacob)

- Gracias por ofrecerte para ser mi modelo Jake.

- Me abstendré de hacer comentarios.

Kaoru siguió ajustando el vestido que debía entregar hoy a la novia del tal Pristige, ya había pasado una semana desde el incidente del minotauro y por ahora todo se mantenía en calma. Kaoru me perdono por todos los problemas que le causé, así que ya volvíamos a ser los mismos, y eso incluía ser su maniquí viviente de última hora.

Por que sí, luego de terminar el vestido Kaoru me obligó a usarlo para comprobar cómo se le vería a una persona común y por eso ahora estoy en su departamento usando un vestido azul con falda vaporosa con ondas como el océano, zapatos de tacón alto y un sombrerito negro con un lazo azul.

- Dejando esto de lado ¿Acaso ese hombre elige todo por su novia?- dije bajándome de la base.

- Si es algo raro, casi como que en realidad ella fuera su esclava o algo así.- dijo rascándose la cabeza dudosa.- Pero bueno yo no soy quien para opinar. Creo que eso es todo, sólo falta un detalle y quiero que el Sr. Pristige lo vea antes. Ya puedes quitártelo.

Fui a su cuarto y me quité el vestido con cuidado, no sé si es por que mi madre me hacía usar ropa de niña desde que tengo memoria o si Kaoru tiene un gran poder sobre mi, pero ya vestirme de mujer no me molesta, bueno tal vez un poco, no sé si eso ha influido en mi personalidad pero si soy sincero si me dijeran de debía usar esa ropa el resto de mi vida....tal vez no me molestaría.

Me vi en el espejo y me sonrojé al recordar que también tenía ropa interior de chica, el sostén tenía relleno y la braguita de encaje apenas hacía resaltar el bulto que me hacía diferente a una mujer, vaya en serio debería sentarme a pensar si en realidad soy hombre y me gustan otros hombres o simplemente soy un travesti que le gustan los hombres ¿Cómo afecta cada uno? ¿Cuál es la diferencia?

Me desnudo y busco mi ropa de siempre, unos jeans holgados y una playera negra una talla más grande, cuando me siento en la cama para acomodar mis tenis me doy cuenta de que la cómoda de Kaoru tiene un número de la revista Love and Pleasure, la tomé y la abrí con curiosidad.

Una página marcada mostraba a un hombre sobre un potro amarrado y vendado, la sombra evitaba que se viera su pene, pero los detalles se veían tan perfectos que parecía que el hombre estaba disfrutando su sumisión.

El timbre de la puerta hace que salga de mi ensoñación, Kaoru entra corriendo al cuarto y toma el vestido y el sombrero y corre a ajustarlo sobre el maniquí, admito que me queda mejor a mi, pero no creo que al cliente le guste que un hombre use el vestido de su chica.

Me acomodo la ropa y voy hacia la puerta, al abrir encuentro a una pareja que aunque se vean tan distintos, son curiosamente iguales.

El hombre es más alto que yo, cabello largo y lacio hasta la orejas en un tono rubio arena que combinaba con sus ojos azules y piel bronceada, a su lado había una chica casi tan bajita como Kaoru que parecía más una muñeca que una persona. Su cabello rubio tenía dos enormes rizos parecido a taladros y sus ojos verdes eran enormes resaltando sus mejillas sonrojadas y labios rojizos, llevaba un vestido largo suelto al nivel de las piernas de color rojo oscuro que contrastaba bastante bien con su piel pálida.

- Bienvenidos Sr. Pristige, Srta Valez.- les dije sonriendo.- Que honor volver a verlos.

- Al contrario joven, el placer es todo nuestro.- dijo Pristige en un tono un poco afeminado.- Sabía que podía contar con la ayuda de Miss Shin ¿Cierto June, preciosa?

- Así es.- dijo la chica en un tono femenino aunque poco agudo.- ¿Ese es mi vestido?

Corrió hacia Kaoru, quien contemplaba su creación.

Los Ases de la Ciudad PokerWhere stories live. Discover now