Capítulo 10; Lonely Together

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Después de pensarlo unos minutos desde que Justin se fuera, decidí ir al baño. No sabía a cuál, había en diferentes sitios en todo el local.

Probé suerte cuando ví a varios hombres corpulentos en una de las esquinas del club, en cuanto ví a Evert, sabía que era por ahí. Giré la esquina mirando las puertas. Cuando llegué al baño de hombres toqué y me quedé esperando apoyada en la pared hasta que abrieron y salió un brazo lleno de tatuajes tendiendome la mano. Reí interiormente y la cogí dejándo que me llevara dentro.

Ví que se había quitado la sudadera y ahora tenía solo una camiseta de tirantes blanca. Me fijé cómo de fuerte se había puesto desde la última vez que le había visto.

Me subí en la encimera del lavabo mientras le veía cerrar de nuevo con cerrojo la puerta.

—Necesito un momento a solas contigo — suspiró acercándose a mí. Se quitó la gorra dejándome ver su corto pelo teñido a un amarillo demasiado claro.

—¿Qué te has hecho en el pelo? — pasé mis manos por su cabeza y cerró sus ojos sonriendo de lado.

—¿Te gusta? — se acercó a mí poniendo sus manos en mis muslos y miró por encima de mi hombro, viéndose en el espejo —Me encanta.

—No me gusta — me miró enseguida —Me gusta tu color natural, ¿por qué te lo pones así?

—¿Por qué te pones mechas? — dijo tocando mi pelo —No eres la más indicada para hablar — chasqueó su lengua —Solo... — abrió sus brazos mirándome atentamente —Soy un chico joven, Ashley. Somos jóvenes, y yo más que nadie he cometido errores que ahora me doy cuenta de lo estúpidos que han sido. Todos nos equivocamos alguna vez en nuestras vidas — asentí escuchando cómo llamaban a la puerta del baño —Es difícil darnos cuenta de lo que perdemos — susurró acercándose a mí ignorando a quién hubiera llamado —Lo siento — murmuró pasando su brazo por mi cintura llevándome hacía delante —He tenido que aprender por las malas lo que tenía a mi lado, y ahora me doy cuenta de cuánto te necesito.

Fuí a responderle pero volvieron a llamar a la puerta terminando con la paciencia de Justin. Dió una patada a la puerta recibiendo otra en respuesta. Frunció su ceño cómo nunca le había visto.

—Justin — me bajé cuando le ví abrir la puerta de golpe. Suspiré de alivio viendo a Nick.

—Eres gilipollas, te juro que te hubiera arrancado la mano — dijo Justin dejándole pasar.

—Cuando se llama se suele contestar — le hizo una mueca —Me gustaría poder tener un momento de privacidad... — le lanzó una mirada a Justin.

—Me voy — dije abriendo la puerta saliendo de allí.

Sonó mi móvil en mi bolsillo y lo miré sorprendiéndome que fuera Ariana. Estuvimos hablando durante un rato contándonos nuestros problemas sobretodo ella. De su entrevista en la radio la cuál tuvo que soportar ciertos comentarios.

—Oh, y ví tu encuentro con esos fotógrafos, ¿quién narices se cree que es esa para ir diciendo eso? Juro que llego a estar allí y le falta acera para correr.

—Eso mismo me pregunto yo. Se creen que por la ropa que llevamos dice todo de nosotras y no nos conocen de nada.

—Te juro que aplaudí cuando Justin le tiró el café a ese imbécil — reí asintiendo —Estoy tan cansada de comentarios absurdos...

—Cada vez van a más... Ahora no se cortan al decirte las cosas que piensan — sentí una mano en mi cadera asustándome. Me giré viendo a Justin vestido con su sudadera y la gorra de nuevo. Me hizo un gesto con la cabeza para que andara —¿Sabes? Deberiamos de parar esto, tengo algunas ideas...

Hit The Lights ➵ j.bWhere stories live. Discover now