little boy × vminkook

32 for u

Advertencias: lo escribí yo, ya deberían esperar de todo. De ahora en adelante ya no podré más advertencias.

HoSeok abrazó con fuerza a TaeHyung quien no podía parar de sollozar en su hombro. Comenzó a acariciar su cabello para calmarle, pero fue en vano. Nada parecía calmar al chico que había cambiado demasiado físicamente, era más alto y su espalda de había vuelto más ancha, al igual que sus brazos y piernas, pero, en ese momento, parecía seguir siendo el debilucho adolescente que iba a su departamento en busca de JiMin.

—HoSeokki-hyung, lo siento mucho— se decidió por decir finalmente TaeHyung sin despegar el rostro del hombro de su mayor —Yo no quería molestarle. Olvidé... olvidé que JiMin ya no vive aquí. HoSeokki-hyung, ¡Lo arruiné todo!— Al pronunciar las últimas palabras, los sollozos se hicieron más fuertes. HoSeok suspiró y separó a TaeHyung de su cuerpo, tomando su rostro con sus manos para obligarle a que le mirara a los ojos.

—TaeHyung— El menor fijó sus ojos en los suyos, deteniendo sus sollozos—Estás enfermo de borracho y, de seguro herido, por eso olvidaste donde vive JiMin.

—Lo sé, hyung.

—No puedo dejar que te vayas a esta hora y en tu condición. Te quedarás aquí, ¿está bien?— El moreno asintió lento y tranquilo, a pesar de que las lágrimas seguían cayendo. —Dormirás en la habitación de JiMin.

—No quiero dormir ahí, hyung.— habló Tae al instante negando con su cabeza.

—Nam se llevó su cama cuando se fue.— HoSeok suspiró —Puedes ocupar mi habitación si quieres, yo dormiré en la habitación de JiMin...

—No quiero dormir solo, hyung.

Jung bajó una de sus manos de la cara del menor y lo miró extrañado. No sabía como reaccionar precisamente frente a su propuesta. No le molestaba dormir con otro chico y el sabía que Tae no intentaría nada, de hecho el chico se notaba a segundos de quedarse dormido donde fuera. Lo que le causaba algo de molestia era el hecho de que Tae era el ex de su primo y que no le veía hace años. Finalmente terminó por aceptar.

—Vete a dormir a mi habitación, yo iré en unos minutos. Me prepararé un café ¿Quieres uno?     

El molesto ruido de su teléfono le hizo despertar de su sueño vacío. Se removió en su cama mientras su ringtone permanecía y tomó el aparato con su mano izquierda mientras se quejaba. Miró el nombre de contacto sentándose al instante en la cama la notar de quien se trataba. "Mamá" relucía en la pantalla. Seguramente ya venía llegando a Seúl y él se había quedado dormido. No la veía hace largo tiempo y se quedaba dormido, se sentía un pésimo hijo. Dejó a un lado todos sus pensamientos y las cosas que tenía por hacer, levantándose y juntando las cosas necesarias para ir a tomar una ducha mientras apretaba contestar.

—¡JiMinnie!— Escuchó decir a su madre del otro lado de la linea con su animosa voz. JiMin no pudo evitar sonreir, como extrañaba a esa mujer.

—¡Mamá! ¿Dónde estas? Lo siento...

—Te quedaste dormido. — le interrumpió entre risas. —Siempre te quedas dormido cuando tienes cosas importantes que hacer. Debes cambiar ese mal hábito, hijo.        

Un viejo recuerdo dominó la mente de JiMin causando cosquillas en su estómago. Subió su mano derecha a sus labios y los acarició mientras admiraba vivas imágenes causando que sus pupilas quedaran fijas sin estar viendo algo en particular. Juró poder saborear las saladas lágrimas de JungKook nuevamente mientras su madre le hablaba Dios sabe que cosa. Cerró sus ojos con fuerza y movió su cabeza de un lado a otro para borrar aquella imagen de su mente y poder concentrarse en lo que su madre le decía. Sabía que necesitaba más de un mes para poder superar todo, pero pensaba que ya en ese tiempo no tendría tan fuertes flashbacks.